4) No te dejará

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Ni siquiera tengo que decírselo.
(Miriam) - No me tienes que contestar ahora. Solo te pido que te lo pienses, estoy en el mismo hotel que tu hermano.
- Okay. Pongo mi mano sobre la de ella y sonrío.
- Hablando de mí hermano...¿dónde está Roi?
(Miriam) - Aquí abajo, pero quería dejarme hablar contigo primero. Si quieres, le digo dónde está tu habitación.
- Sería genial, gracias! Ya no tengo ganas de bajar.
(Miriam) - Te entiendo. Nos vemos pronto. La acompaño a la puerta y le doy un abrazo.
- Nos vemos.

Narra Miriam

¿Dónde está Roi? No lo encuentro en el salón y decido ir afuera. Nada. Al final lo encuentro en la cocina. Pero qué... perfecto, se está besando con alguien. Qué vergüenza, ahora tengo que interrumpirlo. Pero no tengo otra opción, no parece que vaya a parar pronto. Ufff...
- ¡Roi!
O no me escucha o solo está fingiendo.
- ¡Roi García! ¡Te tomas un respiro, ahora hay cosas más importantes!
Echa la cabeza hacia atrás, le dice algo a esa tía y vuelve a mirar en mi dirección.
(Roi) - ¡Espero para tí que sea realmente importante!
- ¡Lo es! Es un asunto de familia. A propósito, siento haberos interrumpido. Soy Miriam.
(Mia) - Mia, encantada.
- Igualmente. Espera... ¿Roi me puedes esperar un momentito por ahí?
Nos cambiamos unas miradas. Se despide y se aleja un poco confundido.
- Mia, ¿ésta es tu fiesta?
(Mia) - Sí, hoy es mi cumpleaños. ¿Por qué preguntas?
¡Así que ella es la mejor amiga de Lola!
- Por nada. Sé que la fiesta es de una chica que se llama Mia, pero por supuesto no sabía quien eres.
De todos modos. ¡Felicidades!
Le doy dos besos.
(Mia) - ¡Gracias! - sonríe -
- Lo siento mucho, pero tengo que hablar con Roi. Seguramente lo volverás a ver.
Le guiño y desaparezco en el pasillo con Roi.

(Roi) - ¿Qué es tan urgente?
- Lola quiere hablar contigo.
¿Por qué no tenía ni idea de que ibas a llegar hoy?
(Roi) - Em ¿sorpresa?
- ¡Pues, vaya sorpresa! Además, genial lo de Mia ehh. ¡Espera a que Lola se entere!
(Roi) - ¿Por qué Lola? A ella nunca le importó con quién me beso.
- ¡Sí, pero tampoco besaste a su mejor amiga!
Me mira sorprendido.
(Roi) - ¿Ésta es su fiesta? No lo sabía.
- Me río - Da igual.
Le digo donde está el cuarto de Lola y nos despedimos.

Estaba a punto de irme, cuando me para Mia.
(Mia) - ¿Ya te vas?
- ¡Sí, acabo de llegar hoy y ha sido un día muy largo!
(Mia) - Oh, que pena, porque eres muy simpática. Pero lo entiendo
¿Oye, puedo preguntarte algo?
- Claro.
(Mia) - ¿Puede ser que conoces a Lola, que eres SU Miriam?
Bueno si me he enterado yo de quien es ella, no me sorprende que me está preguntando eso.
- No sé con seguridad si soy realmente SU Miriam, pero sí.
(Mia) - ¡Qué bien! Me alegro que hayas venido. ¡Ya era hora! Sé que no eres tú la que debería haber hecho el primer paso.
No la he podido convencer de llamarte.
- ¿Así que te lo ha contado todo?
(Mia) - Más o menos, sí.
- ¿Sabés que no tiene sentido intentar a convencerla de hacer algo, no?
(Mia) - Lo sé. - se ríe -
No puedo evitar de hacer lo mismo. Mia me cae muy bien, entiendo por qué se convirtió en la mejor amiga de Lola.
(Mia) - No quiero retenerte, pero me gustaría verte más por aquí.
Me abraza. - Lola no te dejará ir.
- Gracias.
(Mia) - ¡A tí, nos vemos!
- ¡Adiós!

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