Harry es un híbrido, mitad gato mitad humano.
Es muy raro encontrarse con un híbrido en Londres, las personas los odian y creen que son aberraciones.
Por suerte, Louis no cree eso.
versión hb de Sweet Lou, otra fic de mi autoría
・。。・゜
Sofi, 2020
・。...
Harry lloriqueó mientras se tapaba con una manta. Todo su cuerpito dolía y aún tenía un poco de temperatura, a pesar de que su celo había acabado hace algunos días.
Louis entró a la habitación con un plato y una mesita, para dejar ambas cosas a un lado de la cama y tirarse a abrazar a Harry.
— ¿Cómo está mi dulce gatito? — preguntó dejando besos sobre el hombro de Harry.
— Mal. — respondió berrinchudo, haciendo un puchero con sus labios y dándose la vuelta para poder ver a Louis.
El humano lo abrazó por la cintura y dejó un beso sobre su frente, notando que su temperatura no había bajado.
— ¿Quieres tomar sopita para sentirte mejor? — murmuró, a lo que Harry asintió; tenía mucha hambre.
Louis acomodó la mesita sobre las piernas de Harry y puso el plato de sopa junto a una cuchara.
Harry se relamió los labios y agarró la cuchara. Tomó un poco de sopa y después sonrió hacia el humano.
— Yummy. — balbuceó, volviendo a tomar otra cucharada.
Louis sonrió y se sentó a su lado, acariciando la espalda del omega y limpiándolo con una servilleta, ya que había veces que le quedaba sopa a los bordes de sus labios.
— Llamó Liam. Dijo que tenía el día libre y preguntó si queríamos ir a su casa, así podemos conocer a Shawn. — dijo Louis, corriendo los rizos de Harry hacia un lado.
El omega cerró sus ojitos y se recargó en la mano de su novio.
— Pero Hazz se siente mal. ¡Y Hazz no quiere que ellos se sientan mal por estar junto a él!
El castaño suspiró y sacó la mesita de las piernas de Harry, volviéndola a colocar a un lado de la cama. Tiró al híbrido por su bracito, hasta que estuvo sentado sobre su regazo.
— Tal vez Liam sepa qué es lo que te tiene así, cariño. Tal vez sólo sea una gripe, pero prefiero quedarme tranquilo. — dijo en un tono bajo, dejando un besito sobre el cuello del omega. — Liam cuida de tres híbridos y su madre cuidaba de cinco cuando Liam era pequeño. Sabe mucho sobre híbridos, ¿hm? No te preocupes, es para que te sientas mejor.
Harry hizo un puchero y asintió. Sus ojitos rojos y un poco cristalizados por la alta temperatura que tenía.
— Hazz quiere que Lou lo vista, porque está muy cansado y sólo quiere dormir. — balbuceó el híbrido, estirando sus bracitos hacia el humano.
Louis sonrió, agarró un bonito suéter rosa, una falda blanca, un par de medias bucaneras y las adoradas (y muy, muy preciadas) Converse de Harry. Se acercó a la cama y empezó a vestir a su novio, quien se dejó hacer tranquilamente en sus brazos.
— ¿Quieres llevar a Chocolate con nosotros? — preguntó el castaño, acariciando las pequeñas orejitas del híbrido.
Harry movió su naricita de botón, sus ojos se cerraron y el estornudó fuertemente. Un gimoteo salió de sus labios en cuanto sus ojos se abrieron y se llenaron de lágrimas.
Louis corrió rápidamente escaleras abajo y agarró el viejo osito de peluche que estaba en el sofá.
— Lou, Hazz no se siente muy bien. — murmuró Harry, de pie al lado de la cama, antes de que sintiera sus rodillas temblar y dejar de sostener su peso.
Louis se acercó lo más rápido posible y agarró a su pequeño gatito antes de que cayera al suelo.
— Mi pobre bebé, ya verás que después todo va a estar mejor. Tranquilo.
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