"Y si nada nos libra de la muerte, al menos que el amor nos salve la vida"
Frank Iero es un chico que ya no encuentra mas sentido a su vida pero conoce a su ¿Angel? Que lo ayudará.
¿Puede él salvar su vida?
¿O acercarlo mas a su muerte?
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—Frank...¿que haces?— me miraba con severidad desde la puerta del baño con los brazos cruzados y una toalla al borde de su cintura
Mierda me descubrió, palidecí al instante
—Gee y-yo...— le dije nervioso tratando de encontrar una excusa
—Creí haber sido claro cuando te dije que era confidencial— se acercó a mi con lentitud mirandome serio
—Gee lo siento— le dije apenado— es solo que la vi ahi y yo... — me quedé callado cuando Gerard se inclino a mi altura apoyando sus manos en mis piernas arqueando una ceja quedando cerca de mi rostro
—¿No te quedó claro?— preguntó cerca de mis labios
—Lo siento Gee— dije bajito mirando al suelo
—No te escuché— dijo tirando levemente de mi cabello hacia atrás para que lo mirara
—Ah, perdon Gee— jadee y Gerard atacó mis labios con deseo
—Eres muy curioso mi pequeño— dijo desabrochando mi camisa y comenzo a dejar besos humedos en mi cuello
—Gerard...— gemí mientras pasaba mi mano por su cabello
—¿Dudas de mi?— preguntó quitando mi camiseta
—¿Que?— le dije apenas audible, no podia concentrarme
—¿Dudas de mi? ¿Crees que te dejaría?— susurro en mi oido, tocandome por encima del pantalon para comenzar a desabrocharlo
—Gerard...— suspiré —yo no se que pensar— admití
—Frankie no deseo a nadie más que a tí— dijo con voz ronca retirando mi pantalon
No respondí ante lo que me decía, me levanté del sillon y comencé a besarlo tomandolo por las mejillas para que asi fuese más profundo
Gerard me tomó por los gluteos con fuerza levantandome y yo enredé mis piernas alrededor de su cadera
Nos dirigimos a su habitación y con cuidado me dejó caer sobre la cama retirando mi ropa interior, segui besandolo y comencé a acariciar desde su pecho continuando con su torso lentamente hasta llegar a la toalla que sostenia en su cintura y quitarla
Tomé su erección con mi mano llevandola de arriba a abajo con movimientos rapidos haciendo que jadeara mientras él se dedicaba a succionar mi cuello dejando pequeñas marcas que se notarian más tarde
Dejo caer su peso cuidadosamente sobre mi atacando mis labios con pasión, mientras separaba mis piernas, jugando con su miembro en mi entrada lubricando un poco con su preseminal
—Gee porfavor— supliqué
—¿Que pasa pequeño?— rió maliciosamente mordiendo su labio inferior
