"¿Dobby?" Blake llamó, mirando el dormitorio vacío. No quería admitirlo, pero le preocupaba haber llevado demasiado lejos a su yo más joven. Era tan fácil olvidar que aún no había experimentado ni siquiera una minúscula ira y rabia por venir. Habría tenido un indicio durante el juicio, si no hubiera estado allí, ya que todo realmente comenzó cuando Dumbledore comenzó a tratarlo como si no estuviera allí. Quería asegurarse de que Harry no terminara como él mismo, pero para hacer eso necesitaría alienar a mucha gente. Sabía que no sería fácil, pero no tenía idea de lo difícil que sería.
"¿Sí señor?" Dobby aparece con un pop.
"¿Dónde está Harry?" Blake preguntó con resignación.
"Está afuera, señor, sólo diez minutos, ¿lo llevará Dobby?" Preguntó Dobby, animándose ante la idea de ayudar a su Maestro. Le gustaba estar aquí, era mejor que estar en Hogwarts... bueno, al menos durante las vacaciones de verano. No había nadie a quien realmente servir durante esos meses, y no había mucho que hacer sin los estudiantes en la escuela.
"No, iré solo", dijo Blake, rechazando la idea de inmediato. Incluso en el futuro, no usaba a los elfos domésticos a menudo, por lo que tampoco iba a comenzar a confiar en Dobby todo el tiempo aquí.
Dobby hizo una profunda reverencia antes de desaparecer una vez más, volviendo a su tarea original... que era limpiar las áreas a las que ni Blake ni Harry aún tenían que acercarse. El edificio era más grande de lo que cualquiera hubiera imaginado e incluía un sótano subterráneo con paredes insonorizadas. Por los instrumentos que habían encontrado abandonados en el interior, Blake asumió que la última persona que lo usó había sido alquimia. No había sido molestado, por lo que estaban de acuerdo en que el sótano había sido oculto; ya sea como propietarios, podían verlo cuando nadie más podía, o los hechizos de ocultación se habían deteriorado con el tiempo. Lo cual era posible, ya que el polvo era tan denso que era casi imposible respirar allí. Los libros que habían encontrado allí habían sido colocados en una caja, descartar cruelmente el trabajo de una vida parecía simplemente horrible. No, alguien más los usaría. No sería él; no sabía mucho sobre alquimia, solo el aspecto de pociones, pero eso era solo el dos por ciento del proceso.
Saliendo de la casa, comenzó a caminar por el sendero, pensando principalmente en lo que había ocurrido horas atrás. Había sido demasiado vocal contra Black, al menos frente a Harry. Por un lado, quería que Harry supiera todo para no sentir el dolor y la ira que sentía. Sin embargo, al tratar de deshacer las cosas, podría terminar arruinándolo y enfureciéndose más rápido; la idea le preocupaba un poco.
Fiel a la palabra de Dobby, fue una caminata de diez minutos hasta que vio a Harry junto al pequeño estanque. Parado allí inmóvil, solo mirando hacia adelante... Blake no necesitaba acercarse para adivinar que Harry estaba pensando. Fue bastante obvio; Suspirando de agitación, caminó hacia adelante, su mente tratando de encontrar alguna forma de arreglarlo.
"No comiste mucho," dijo Blake, volviéndose hacia Harry o más bien a su lado.
"No, no, no lo hice", admitió Harry, volviéndose también para mirar a Blake. "¿Snape me culpa por lo que le pasó a mi mamá?"
¿Eso era lo que le molestaba? "¿Es eso realmente lo que te está molestando?" preguntó.
"Una de las cosas", confesó Harry, sus ojos verdes se nublaron.
"No, él nunca te culpó", reveló Blake.
"¿Entonces por qué él...?" Preguntó Harry desesperadamente.
"Siéntate", dijo Blake, tomando asiento en el césped. "Tienes que entender que Snape ha tenido una vida dura; su vida hogareña era peor que la nuestra. La única persona en la que tenía que confiar era en nuestra madre. Luego se sintió atraído por una multitud a la que le gustaban las mismas cosas que él los mismos ideales que él ".
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Los juegos que juegan
FanfictionHarry Potter, de treinta y cuatro años, viaja en el tiempo, adoptando el nombre de Blake Slytherin; interfiere con su propia prueba y se mete con los planes perfectamente trazados de Dumbledore. ¿Qué pasa después? ¿Blake habrá mordido más de lo que...