› 〉 de mimos a falta de atención ፧ ꒰ kookmin! ♡

O16

Cuando JiMin abrió los ojos, una luz inmensa provocó que los volviera a cerrar. Por segunda vez hizo el intento y logró mantenerlos abiertos por un buen tiempo, su mirada viajo a su mano que sentía un cálido calor envolverle, encontrándose con JungKook quien yacía dormido sentado escondiendo su rostro entre sus brazos cruzados.

Volvió a subir la mirada y observó el lugar en el que se encontraba. Quedó aún más confundido al darse cuenta que las paredes estaban pintadas de un blanco puro y el colchón en el que estaba recostado no era su cama sino una camilla.

Fue ahí donde imágenes de momentos atrás del caso en el que estuvo presente invadieron su mente la cual le hizo soltar un grito repentino y lastimero.

─ ¡TaeHyung! ─JiMin empezó a gritar y el contrario despertó de inmediato ante la reacción de su amado.

─ JiMin, bebé. Tranquilo, no grites ─intentó calmarlo, más no pudo hacerlo.

─ ¡T-TaeHyung! ¿¡Dondé esta él!? ¡Necesito verle!

─ Shhh... duerme de nuevo, cielo. Intenta calmarte por favor. TaeHyung ahora mismo está en una operación, lo acaban de llevar a la sala de emergencia. No sabemos su estado, pero esta en buenas manos, no hay nada de que preocu-...

─ ¿Qué? ─dijo al borde del llanto─. ¡Quiero ir!¡Déjame ir con mi mejor amigo!

JiMin empezó a forcejear para liberarse del agarre de su novio quien impedía que se levantara, y es que, ese era el objetivo que él quería realizar. Levantarse y correr en busca de TaeHyung cuarto por cuarto con el fin de abrazarlo y echarse a llorar en su pecho como solía hacerlo.

─ Aún no podemos verle, están en operación. Descansa otro rato, estás muy exhausto.

─ ¡No, no quiero! ─una de sus manitos hechas puño se estampó con fuerza en el rostro de JungKook. Exactamente en el nasolabial, sacándole sangre pues, le había partido el labio─. Y-Yo.

El cuerpecito de éste empezó a temblar de los nervios y a sudar mucho frío mientras su respiración se agitaba y sus manos golpeaban su pecho ante el dolor punzante que sentía.

Sangre era lo que menos quería ver.

─ ¿JiMin? ─lo tomó por los hombros acto de seguido de sacudirlo levemente─. ¿¡JiMin!? Oh Dios, ¡Doctor!

Apenas JungKook gritó el nombrado no tardó en entrar acompañado de una enfermera. Ambos al ver al chico entrando en pánico no tuvieron de otra más que inyectarle un sedante. Luego de ayudarlo se retiraron, dejando nuevamente a la pareja a solas.

─ Lo siento, tenía que hacerlo. Lo siento, duerme un rato ¿Si, mi amor? ─le sonrió, tratando así de transmitirle seguridad.

─ No-Nochu, por favor.

Las manitos del rubio a duras penas tomaron el rostro de JungKook. El sedante ya estaba haciendo efecto y por más que quisiera seguir rogando ya no podía, solo le quedaba llorar en silencio.

─ No llores, todo estará bien. Confía en mí ─posó sus manos sobre las de él y las quitó lentamente, no sin antes depositar un beso en cada una─. Él es fuerte.

─ No es fuerte ─puchereó con los ojitos apunto de cerrarse por completo.

─ No te esfuerces o alfa se sentirá mal. El cuidará de omega mientras descansa.

─ Alfa...

Esa fue la última palabra que llegó a pronunciar para posteriormente caer en un sueño más profundo que el anterior. Ya que su desmayo no era nada comparado con un sedante inyectado en su cuerpo.