Mi guardaespaldas [YOONMIN]

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Namjoon no pedía nada, más que su esposo fuera feliz, le dolía saber que en muchas ocasiones Jin se tenía que reprimir las lágrimas para que él no se sintiera culpable o cómo le había tocado ver que se escondía para llorar, Jin no sabía que Namjoon lo veía llorar porque él siempre tenía que fingir que no era asi, él solo pedía que si había un dios le permitiera ser feliz a su hermoso esposo, el daría su vida si fuera necesario, pero que por favor se llenara ese vacío que ambos tenían, la vida de Namjoon tampoco era muy feliz, el también se escondía para llorar, también se reclamaba el por qué no podía darle lo que tanto deseaba su pareja, inclusive en varios momentos se lastimaba para según el “castigarse” por ser un mal esposo, en muchas ocasiones había tenido impulsos de simplemente quitarse la vida, pero recordaba que tenía que proteger del amor de su vida, asi que se ponía de pie y fingía que todo estaba bien, hacía todo lo posible por hacer reír a su lindo ser de luz, él amaba, enserio amaba a su Jinnie, era de esos amores que ya no existen, amaba verlo sonreír, amaba cuando contaba esos chistes que no tenían gracia, amaba cuando se despertaba y podía apreciar esos bellos ojos hinchados a causa del sueño, esos labios gruesos de un color rosa que hacia una combinación perfecta con su tono de piel, sus cabellos un poco revueltos a causa de esa almohada que era testigo de sus sueños y en algunas ocasiones lágrimas, verlo recién despierto era un verdadero privilegio, era lo mejor del mundo y nunca en la vida cambiaría eso.

Todo en sus vida había cambiado cuando ese hombre al que nadie conocía había entrado a sus oficina diciendo que tenían trabajo, no podían negarse dado a que era sus jefe, él les explicó detalle a detalle que es lo que harían, cuáles serían sus funciones y por qué les daba a ellos dos esa confianza para hacerse cargo del trabajo.

De cierta forma se arrepentía de no haberse negado, si lo hubiese hecho su esposo no tendría esos golpes, no estaría lastimado y no tendría una herida de bala en el hombro ¿Por qué tuvo que aceptar? Después de esto se retiraría y viviría feliz, si es que sobrevivía, asi que esperaba con todas sus fuerzas salir con vida pero si tenía que perderla para salvar la de su amado con gusto lo haría no sin antes decirle que sea feliz y que busque a otra persona que pueda darle lo que el no pudo y que el dinero que ambos habían logrado ahorrar se lo quedara el para vivir como se merecía.

De solo pensar eso se le hacía un nudo en la garganta, y cuando sintió por sus mejillas ya se encontraban las primeras lágrimas.

Decidió parar en un auto servicio y volteo a ver a Jin quien se encontraba observándolo confundido, no quería decirle por qué se encontraba en tal estado, asi que solo movió su cabeza negando a lo que su esposo entendió perfectamente. Limpió con sus pulgares sus lágrimas y aclaró su garganta.

Namjoon: Chicos iré a comprar algo de comer y beber ¿desean venir o quieren algo?

Taehyung despertó y bostezó, se estiró como pudo y salió del auto, fue seguido por Jungkook quien claramente iba solo porque tae se bajó.

Tae: Yo iré hyung.

Jungkook: Yo también iré.

Lisa: Yo me quedo, solo tráiganme unas donas y un jugo.

Jin: Yo también me quedo, solo quiero un helado, un jugo y un pan de esos que tienen cubierta de chocolate. Ah y para el señor Park también traigan algo de comer, lo necesita.

Los tres asintieron y entraron al autoservicio buscando lo que les habían pedido.

El señor Park se encontraba sentado en el asiento trasero hundido en su tristeza y era de entenderse perfectamente, habían matado a su esposa frente a sus ojos, si él no hubiese hecho todo eso en su pasado nada de esto estuviese pasando. Pero claro, sus errores lo estaban alcanzando y le estaban quitando a las personas que más quería, primero su esposa y seguramente quién seguía era su pequeño.