🇷🇺RUSSIAN Братва 🇷🇺

CAP 21 EMBOSCADA

El invierno era culpable de que la oscuridad gélida de la noche cayera más rápido de lo normal sobre la ciudad de Moscú, faltaban muy pocos días para que el año terminara y a pesar de que todo parecía ir completamente normal para los habitantes del lugar, la realidad era otra para la familia Romanov y para la familia Alianov. Aquella rivalidad de años y pequeños altercados entre ambos grupos habían comenzado a despertar la curiosidad de grupos enemigos, además de levantar ciertos rumores que recorrían la calles del bajo mundo de la red más corrupta de la Unión Soviética.

-¡Todo esto fue culpa de la zorra que tienes escondida en tu habitación, papá! -

El grito desquiciado de Wanda Romanova se escuchó por toda la mansión donde se refugiaban ahora después de que la rusa se negara a ser revisada por los doctores de la familia.

-¡Detente, Wanda, vuelve aquí!

Thor levantó la voz, caminando con dificultad y adolorido tras su hija debido a las dos balas que hace poco acababa de extraer y suturar en su cuerpo mientras Pietro apresuraba su paso también para ir tras él y ayudarlo un poco. Wanda simplemente estaba fuera de sí, vociferando cosas sin sentido desde que había puesto un pie dentro de la casa.

-¡Tú! ¡Maldita, perra!

Wanda pasó entre los gorilas que custodiaban la entrada y apuntó con el dedo a la mujer que sorprendió de pie junto a la ventana de la habitación, provocando que su entrada tan abrupta hiciera a Melina pegar un gran respingo de sorpresa.

-¿Qué? -Melina susurró confundida al escuchar a la joven dirigirse a ella con tanto desprecio.

-No te hagas la inocente conmigo, sé perfectamente bien quién eres realmente.

La nieta de Alexander soltó con rabia y caminó hasta donde Melina Ivanovna yacía pasmada para atacarla e intentar arrastrarla por el cabello para sacarla ya de ahí, enfureciéndose aún más al notar que la prenda que llevaba encima para protegerse del frío era de su padre. Wanda aprovechó la incredulidad y fragilidad de aquella mujer para iniciar un enfrentamiento poco justo en el que la hija de Iván trató de interponer sus manos entre ambas para apartarla. Lo que menos deseaba Melina era lastimar a alguien dentro de aquella casa, ella nunca había sido una mujer que resolviera los problemas a golpes como si fuese una ordinaria sin educación.

-¡Basta, detente, por favor! -Melina gritó desesperada al sentir sus jalones, manotazos y rasguños caer sobre su cuerpo, consiguiendo que uno de esos tantos empujones la hicieran caer de espalda contra el piso.

-¡Eres una zorra asquerosa, todo esto es tu maldita culpa! ¡Me tuvieron cautiva gracias a ti!

Wanda gruñó furiosa y se montó a horcajadas sobre Melina para seguir dejando ir sus golpes sobre ella mientras intentaba inútilmente protegerse con sus propios brazos. La rusa nunca antes había sido tan humillada y maltratada en su vida, más bien ella no solía ser una persona que fuese haciendo enemistades.

-¡Es suficiente, Wanda! -Thor apareció finalmente, tomando a su hija de la cintura para apartarla de Melina de un solo tirón. Sin embargo, la poca rapidez de su padre le permitió dejar un último golpe que cayó con dureza y mucho odio sobre una de las mejillas enrojecidas de la castaña.

-¡No, no es suficiente! Haz que pague papá, la quiero muerta. Los hombres que trabajan para ella me lastimaron, abusaron de mi. ¿Te parece poco? Debe pagar con su vida. ¡Debes matarla! -Wanda exigió justicia, soltándose en un llanto escandaloso que terminó con algunas pataletas mientras Thor la hacía su prisionera de espaldas a su torso.

-Déjeme ayudarla, señorita... -Pietro corrió hasta Melina para extender su mano, pero ésta enseguida se arrastró aterrada para alejarse del joven y terminar abrazada a sus rodillas contra una de las paredes de la habitación.