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Siento que está noche me hipnotiza, como muchas otras anteriormente. Siento el frío poco usual en la primavera, puedo sentir la brisa golpear en mis mejillas, justo en este momento es la única parte de mi cuerpo que está expuesta a este clima. El aire es tan fresco, tan natural.

Respiro y sigo sintiendo que me hace falta el aire, creo que no puedo consolarme desde la última vez.

Ese brillo, esa luz.

Nuestros recuerdos dé repente pareciera que quieren tirarme, los miro en mi cabeza con mi vista borrosa aún plantada en la aurora.

A veces me gusta imaginar tu voz susurrando en mi oído. Me cuentas todos los planes a futuro y luego desapareces como el humo en el viento.

Amabas mirar las estrellas, yo también lo hago. Decías que contará cada una de ellas, yo dije que eran demasiadas y probablemente sería un número infinito, después dijiste que toda esa cantidad representaba todo lo que me amarías por siempre.

Sé que debes estar pensando en mi justo ahora, sé que no haz dejado de hacerlo. Yo tampoco dejaré de retenerte en mis recuerdos, aunque odias que así sea. Me pides a gritos que me vaya, pero aún aquí estoy.

Una tras otra nuestras vivencias se desmoronan de poco en poco.

Te encontré algunos años atrás, cuando tú corazón estaba destruido, me diste la oportunidad de sanarlo y es lo que nunca deje de intentar. Creo que justo ahora debió dejar de doler, sé que ahora sonríes con alegría y bailas con emoción al recordarme.

Ahora estás tan lejos que no creo poder abrazarte. Ahora hay un espacio gigantesco que divide tu mundo del mío. Me gusta cuando de la nada siento tu aroma vagando por mi alrededor. Te siento más cerca que nunca.

Pienso si podrías venir un momento, o quizás para volver a verte, debo ser yo quien debe ir a tí.

Hoy en día quise encontrarte, y lo hice, claro que lo hice, siempre estás presente dentro de mis más ocultos sueños.

Aún no puedo olvidar el día que te perdí.
Ese día llovía con locura, no tenía miedo a mojar mi chaqueta, quería darte un último aliento. Cuando mis piernas me permitieron llegar, ya era demasiado tarde.

Mi herida no pudo sanar, no creo que pueda al menos en un tiempo más.

No me arrepiento de no estar ahí, me arrepiento de haberte dejado ir.

Algo en mi decía que nada en eso estaba bien, no lo estuvo. No fuiste el único que se fue, no fuí el único que perdió. Aún quiero haberme aferrado a tí.

Ni todo lo que tengo podría remediar lo que siento, ni todo lo que quisieron darme para llenarme.

Aún sigo hablando con el corazón porque sé que me escuchas. A pesar de no poder verte, sé que estás a mi lado y recargas tu cabeza en mi hombro como solías hacerlo anteriormente.

Si me enseñas el camino a ti, créeme que te seguiré corriendo.

Este dolor algún día terminará convirtiendose en agonía, pero ¿Qué puedo hacer?

Canto una dulce melodía que espero estés escuchando, cierro mis ojos y me dejó llevar los ritmos de mi voz, como lo hacía cuando estabas conmigo.

Prometí no derramar ni una lágrima más, pero mis ojos no pueden contenerlas cuando hablo de ti a los demás.

Me duermo cada noche con la idea de que mañana un nuevo día será, que quizás algo bueno vendrá. Esa es la historia que se repite una y otra vez, hasta que me embriago en mis propias ilusiones.

Cuando cierro mis ojos, estás ahí y no quiero que desaparezcas todavía.

—¿Ahora mismo estás aquí, TaeHyunie? —. Pregunté al aire, esperando que mis instintos puedan responderme.

Te siento, de alguna forma todos piensan que estoy loco por esperar que me respondas, yo no me considero así, está inmensa distancia no es impedimento para imaginarte a mi lado.

—¿El cielo es un lugar lindo para tí? —. Vuelvo a cuestionar como si desde el paraíso fueras a enviar una señal.

Yo sé que estás ahí, fuiste un ser tan puro que hasta el día de hoy, aquella estrella divina brilla en tu nombre como nunca antes.

—Te extraño.

Rompí en llanto una vez más, nunca debí dejarte ir, ¿Por qué lo hice? ¿Por qué todo se volvió complicado desde aquel día en el que el destino exigió separarte de mi?

Aún no me perdono.
Al menos espero que tus amigos que desgraciadamente también se fueron te estén abrazando justo ahora.

Siempre vivirás en mi corazón, nada ni nadie logrará sacarte de ahí. Pero creo que estás visitas cada día me hacen más daño.

Prometo ser feliz para ti, Tae.

Derramé la última lágrima que mi cuerpo pedía expulsar. Me levanté del césped húmedo y miré por última vez el hermoso cielo que acompañaba mi noche estrellada. Te sentí a mi lado, otra vez, pero no me deje vencer.

Cada que las estrellas iluminen el cielo, te recordaré, porque sé que tú también amabas mirarlas junto a mí y hoy en día, el cielo brilla más ya que tú estás ahí.

Te amo.

         Fin.


¡Hola a todos!
Ahora soy WayHxme haha

Espero que les haya gustado muchísimo, perdón por el daño emocional :(

Noche Estrellada | TaeBin OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora