45. PROMESA CUMPLIDA

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Estoy al merced de malik, siento como el frío metal de la espada se acerca a mi garganta, causando un escalofrio. El sonríe como si saboreara el momento, por mi mente cruzan las imágenes de las muertes de cada tributo que me ayudo a llegar a este momento, yo les prometí salir con vida y cumpliré mi promesa, como puedo safo una de mis manos y tomo la ultima flecha que me queda, lo empujo lográndolo apartar de mi dando me tiempo de acomodar la flecha en el arco y disparar rápido, ni siquiera fije mi blanco era ahora o nunca, su vida o la mía.

Abro mis ojos lentamente, escucho como se queja silenciosamente, en su rostro se nota el dolor, la flecha se a clavado en su corazón tal cual siempre la quise clavar ahí, para ver si apenas así sentía algo y al pare ser si lo hizo.

El comienza dar pequeños pasos hacia atrás, llega al borde y cae hacia los muros que comienzan a sacar unas ponsoñas y las encajan en su cuerpo que poco a poco se pone pálido, deseo que el cañon suene anunciando su muerte para que ya no sufra, pero que hago , no puedo seguir viendo como sufre aunque es lo que estuve esperando desde que los juegos comenzaron, se que esos pensamientos no eran mios si no del monstruo que el capitolio creo meses atrás.

Cierto mis ojos agachando la mirada, cuando volteo al cielo y los abro veo un nuevo amanecer, una esperanza que nunca se apagó en mi corazón ni en la mirada de mis compañeros, la imagen de sus rostros pasa en mis pensamientos todos sonreían su sacrificio no fue en vano, cumplí la promesa de salir con vida, pero aun tengo otra mas pendiente.

Suspiro y me dejo caer de rodillas al suelo, lágrimas de felicidad recorren mi rostro, conoceré a mi hijo y volveré a tener a katniss en mis brazos veré a todos mis amigos.

Un aerodeslizador llega y baja una escalera hacia mi pocision, yo la tomo y comienzan a subirme, al estar arriba me ofrecen una manta y algo de comida, yo la acepto sin pensar me moría de hambre ya que la comida que nos mandaban era muy escasa.

No tardamos mucho en llegar a una asotea del capitolio. ¡Estoy aqui , estoy vivo!. Baje del aerodeslizador, me arrodilló y beso el suelo. Escucho una voz sínica y divertida es...... Heymichs, sonrió al verlo.

Wao, tanto tiempo sin ver la chica ya te enamoraste del suelo. —dice heymichs divertido.

Yo solo río y me pongo de pie para abrazarlo, el sigue bromeando pero me abraza.

Oye, ya tan rápido te aburrió el suelo que buscas algo mejor.

Vamos heymichs no es momento de sarcasmos.

el rie y da unas cuantas palmadas en mi espalda, me indica que tenemos que irnos, caminamos hacia una plataforma en la cual salia un elevador, entramos en el y comienza a desender, heymichs solo dice una frase a la cual yo sonrio.

que bueno tenerte de vuelta peeta.

gracias heymichs, yo tambien pienso lo mismo.

oye peeta, imagino que quieres verla, sierto?

como nunca.

que te parese si primero te bañas y despues te llevo a verla antes de tu entrevista.

arias eso heymichs, en verdad?

yo lo abrazo y el corresponde, el elevador se detiene , abriendo sus puertas para dejarnos salir lo cual hacemos, estamos en un penhous de paredes de color gris metálico y adornos muy elegantes común del capitolio, llega un chico avox y trae una nota me la entrega y yo la leo.

Hola señor mellark, yo soy tom y lo ayudare a prepararse para la entrevista.

Yo lo saludo y el hace una seña indicando que lo siga lo cual hago, nos detenemos frente a una gran puerta de metal dorado, el chico avox la abre dejandome pasar primero ami, ya estando dentro el se acerca al armario sacando una porta trajes de color negro y me lo entrega, entra al baño y ajusta la temperatura del agua, sale y me deja solo para que me duche.

Entro al baño, me des visto y dejó que el agua tibia recorra mi cuerpo comenzando pero mil cabeza barajando hasta mis pies. Salgo de la ducha y comienzo a secarme, enrrolo una toalla en mi forzó y salgo hacia la habitación tomo la ropa y comienzo a vestirme con unos bóxer de color gris, unos pantalones de vestir grises, una camisa blanca con detalles dorados, un saco del mismo color del pantalón e igual tenia adornos dorados con unos zapatos negros.

Me dirijo hacia un tocador de madera blanca en el cual hay un gran espejo, al estar frente a el comienzo a peinar mi rubio cabello hacia un lado. Por fin dejo de hacerlo y me miro por ultima vez en espejo, cada rastro de esa pesadilla que acaba de terminar están presentes por lo que tengo que ir a maquillaje para que las cubran, aun me duelen las muertes de mis compañeros pero si no fuera por ellos yo no estaría aquí, alguien toca la puerta es el chico avox "tom" que trae una pequeña pizarra en la que escribió  el señor abernethy lo espera. Yo le agradesco y me dirijo a la puerta y camino por un pasillo que topa en la estancia  en donde heymichs me espera para ir a ver a katniss e ir a la entrevista.

El me saluda y camina al elevador, yo lo sigo y entro parandome justo a su lado, el oprime un botón haciéndonos bajar hasta la resepcion, las puertas se abren  dejándonos salir de el, comenzamos a caminar a la salida donde nos esperaba un carro de color negro, heymichs es el primero en entrar, yo como fui el último cierro la puerta mientar el auto se pone en marcha, heymichs le indica que nos lleve al hospital, yo sonrió por la emoción, durante el camino juge con mis dedos ya no aguantaba mas conocería a mi hijo y podre tener mi familia con katniss mi vida estaba completa.

El carro se para y heymis abre la puerta del lado donde se encuentra yo lo imito y camino hacia adentro del hospital, no espero a heymichs por que se quedo dándole indicaciones a el chofer. Llego a la recepción donde se encuentra una señora de aproximadamente 45 años se le miraba que estaba cansada, ella me saluda amablemente yo imito su gesto y pido pasar ala habitación de katniss, ella me guía por un blanco pasillo llenos de puertas de roble, nos detenemos en una ventana por la cual puedes ver a los recién nacidos, y ahí esta mi pequeño Austyn es tan tierno y frágil, es de piel blanca y cabello castaño en su cuna dice mellark everdeen, el esta dormido el verlo tan tranquilo me conmueve, comienzo a acariciar el vidrio en su dirección como si fuera a el, me preocupó cuando se comienza a mover, pienso que se caerá o algo pero no es así el comienza a abrir sus ojitos, son idénticos a los mios son de color azul, al verme se dibuja una sonrisita en su rostro y una mas grande en mi, lágrimas salen por mis ojos ya que por primera vez puedo ver a mi hijo, siento la mano de la enfermera, volteo y ella me sonríe después me pide que la siga, yo lo dudo ya que acabo de conocer a mi pequeño, por fin comienzo a caminar tras ella, se detiene a tres puerta de la ventana donde se encontraba mi hijo.

Bueno señor Mellark, aquí es la habitación de su esposa, con permiso.

Ellame deja y se va, tomo la perilla entre mis manos y le doy vuelta haciendo que abra.

LOS JUEGOS DEL HAMBRE : DESPUES DE LA REBELIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora