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"Después de que te emborrachaste dijiste que querías bailar, y fuiste al segundo piso (algo que no tuvo mucho sentido porque la pista de baile estaba en el primero). Yo, como buen protector, te seguí para que no te cayeras por las escaleras. Tropezaste, pero te agarre antes de que salieras rodando. Me sonreíste y me agradeciste. Luego, viste la puerta del baño y le dijiste que era el chico más lindo que habías visto.

Debo admitir que la puerta tiene más curvas que Huijun.

Dime, ¿seguro quieres saber lo que paso después?"

Post-it • MinBic •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora