𝐶ℎ𝑎𝑝𝑡𝑒𝑟 𝑡ℎ𝑖𝑟𝑡𝑦

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(...)

Se hizo el medio día. Estaba en el Gran Comedor, junto -obviamente- a Draco. Almorzábamos de lo más normal, aún con algo de dolor de cabeza. Pero ya casi no era nada.

Mientras tomaba un poco de jugo de calabaza, sentí como me desordenaban el cabello. Volteé a ver y, era Fred, el cual detrás de él tenía a George. Les regalé una sonrisa, ya que me alegraba por fin averlos visto.

Hola chicos, ¿que tal? -Pregunté cruzando una pierna para el otro lado de la banca.-

Draco, me miró mal. Pero solo lo ignoré, y volví a mirar a los gemelos.

Bien, ¿y tu? ¿cómo dormiste?

De hecho, bastante bien, solo tengo un poco de dolor de cabeza,pero ya casi no se sie te, ¿Tu George, cómo has dormido?

Oh, él durmió súper, soñó contigo, y repetía muchas veces que quiera que lo vuelvas a besar, como anoche. -Habló Fred antes que George, se me abrieron grandes los ojos. Draco volteó lentamente hacia mí, estaba muy enojado, se notaba en su mirada. Y las mejillas de George se tornaron de un color rojizo mientras le pegaba a su hermano en el brazo para que callara.-

Mejor, nosotros ya nos vamos. ¿Verdad Fred? -Dijo George empujando a su gemelo.-

Pero-

Vamos. -Terminó de empujar a su hermano y se fueron.-

Miré a Draco, y sonreí falsa y nerviosamente.

¿Tienes algo que decirme, Pope?

Y-yo, yo t-te, yo te lo iba a contar hoy en la tarde. Digo, digo eso no paso, solo estaba-.  Mierda. -Susurré e hice una pausa volviendo a mí lugar.-

¿Acaso me lo iba a ocultar?

Tenía planeado decirte lo hoy en la tarde, cuando vayamos al bosque. Ya que es más ¿privado? quizás. No te lo iba a ocultar, solo esperaba el momento justo.

Ajam. ¿Y porque te besó? ¿Te gusta? ¿Le gustas? ¿Ah? -Cuestionaba el platinado.-

Yo lo besé. Si me gusta. Y no se si le gusto. Supongo que si, pero no estoy al cien por ciento segura. Solo a un niventa y cinco por ciento.

¿Cómo pudiste hacerme esto?

¿Hacerte que, Draco?

Me traicionaste, duh.

¿Que mierda? Claro que no. Nunca hicimos algun juramento o algo así, que diga que no podía estar con los gemelos. Además, yo no me quejo que andes con puras chicas coqueteando todos los días.

No, pero igual. Tu no, no... no podías estar con esa zanahoria. Me dijiste que no lo harías.

¿Que? Yo jamás te dije eso. No metas palabras en mí boca que yo nunca dije, maldito rubio teñido. -Agarré un pedazo de pan que habia sobre una canastilla en la mesa, me levante de mí lugar y me retiré del comedor.-

Draco repitió me acción, solo que sin un pan. Solo se levantó y me siguió.

¡Pope vení para acá, ya mismo! -Gritaba mié tras caminaba rápido intentando a alcanzar me.-

No me das órdenes Malfoy.

¿Malfoy? ¿A ver, y desde cuándo nos llamamos por nuestros apellidos, Endetti?

No lo sé. -Me di la vuelta.- Solo no me digas que mierda tengo que hacer, ni con quien mierda debo estar. Por que no me dejaré controlar cómo tu haces con tu padre. -Dije mientras él seguía acercandose, hasta alcanzar me.-

Pero no llegó a eso, se detuvo aproximadamente un metro lejos de mí. Sus ojos estaban clavados en los míos, parecía que quería gritar me e insultarme, pero no podía. Tenía un nudo en la garganta, y sus ojos comenzaban a cristalizar se.

𝐒𝐨𝐲 𝐀𝐥𝐠𝐨 𝐏𝐚𝐫𝐚 𝐀𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧. [𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲] #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora