Soy el cazador y contigo la presa

Capitulo 3

Muchas gracias por leer hasta aquí, me hace muy feliz que le dieran un poco de su tiempo a esta novela, mil gracias

 Elian Pov.

Cuando terminamos él se colocó la ropa y se quedó de pie.

En mi celda había una pequeña silla y una mesa, no eran muy grandes pero me servían. Tenía miles de cosas que revisar todos los días después de todo y tenía un teléfono oculto pero solo algunas personas de mi confianza conocen su ubicación.

—Truman, siéntate en mi cama mientras vienen por ti—

Especifique esta vez para que no siguiera en el suelo.

—Si—

Se sentó alegremente y paso sus manos con cuidado sobre las mantas como si las apreciara.

Me mire al espejo y me arregle de nuevo.

Una vez que mi ropa y todo estaba en su lugar, me asome fuera de mi celda.

— ¡Elm! — Llame y entre a mi celda.

Tome unos documentos de mi mesa y me senté en la silla.

...

—Truman, olvide decirte que no me gusta compartir. Si me entero que te estas divirtiendo con otras personas, te convertiré en un agujero público en las celdas de castigo y te sorprendería lo salvaje que se vuelve una persona cuando está encerrada sin contacto humano o luz— Advertí mirando de reojo a Truman.

De nuevo no vi miedo en su expresión, sino una cara soñadora y llena de amor que me miraba mientras acariciaba el listón en su cuello.

Asintió con entusiasmo.

— ¡Si! —

Nunca espere ver una expresión de tanta felicidad en este lugar y menos por una amenaza.

Dudaría de su inteligencia si no hubiera visto de lo que es capaz.

...

Me encogí de hombros restándole importancia

Me enfoque en revisar los reportes de las ganancias que obtuvieron mis locales la semana anterior. Había algunos problemas de borrachos incontrolables pero nada fuera de lo común y aparentemente mi territorio estaba tranquilo.

Lo que solo me da más trabajo porque nada permanece de esa forma por demasiado tiempo.

Después de unos minutos, vi una silueta a través de las cortinas improvisadas de mi celda. Una persona alta y fornida estaba en la entrada esperando indicaciones.

Truman estaba algo tenso mirando.

—Pasa Elm— Indique.

Truman se relajó cuando hable y volvió a estar tranquilo.

—Buen día Jefe—Saludo alegremente.

Su actitud entusiasta no queda bien con su apariencia ruda y musculosa, sin mencionar que él no es alegre y amable como parece, el en realidad es bastante sádico cuando se enfada, pensándolo así, se parece a Yannick un poco en ese sentido. Los dos parecen amables y alegres pero en realidad tienen su lado interesante.

—Sí, Truman este es Elm. Elm este es Truman mi...—

—Su nuevo calienta camas, entiendo. ¿Qué se le ofrece Jefe?— Hablo con un tono despectivo al principio y luego retomo su tono alegre al dirigirse a mí.