Capítulo 7: Sentimientos encontrados.

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Al día siguiente fue igual de agotador o peor, pero la ausencia del Rey se estaba traduciendo en incompetencia. Varios de los asuntos burocráticos se estaban retrasando por falta de firmas o autorizaciones.

Trabajar en la administración de un país es sumamente estresante.

Mi hermana y yo nos encontrábamos de camino al palacio junto con nuestros respectivos secretarios, ambas ya nos habíamos hartado de la ausencia del Rey.

Y, por supuesto, en una monarquía todo lo tiene que aprobar él.

A todos nos dijeron que nos limitáramos a enviar correos a menos que fuera urgente, pero los correos llevan días sin contestación y la Semana de la Moda está a nada de comenzar.

Yo no iba a pedir permisos, iba a exigirlos.

Al llegar, como siempre, nos tenían que hacer una revisión de seguridad, a veces esto era muy molesto.

Pasamos por el detector de metales y a las dos nos timbro, a estas alturas me empecé a enojar, yo no traía nada de metal y eso solo indicaba que les dieron instrucciones de detenernos por más tiempo.

-Primera Ministra, señorit....-dijo una de las guardias antes de que la interrumpiera mi hermana.

-Si ya sabemos- contestó mi hermana igualmente frustrada- háganlo rápido por favor, sé que te pidieron que nos detuvieras.

Y obvio que sabíamos quien dio la orden, esa señora de la corte Noh cada dia me cae peor.

Pase hacia delante donde tenía que subirme a una pequeña plataforma para que empezaran el chequeo extra.

-No me hagan esperar de más, no estoy de humor para más incompetencias, así que apurense- dije al joven guardia de seguridad que procedió a hacerme la inspección aparte, lo vi un poco temeroso debido seguramente a que sabe que su jefe es mi novio.

Cuando después de varios minutos nos dejaron pasar e íbamos caminando por los pasillos con dirección a la oficina del rey, escuchamos a la Dama de la Corte Noh hablar con alguien de manera nefasta sobre nosotras.

-Son insoportables, ¿acaso piensan que el palacio es un supermercado?- dijo claramente molesta por nuestra presencia.

-El equipo de seguridad trató de ganar tiempo, pero no funcionó- dijo quien supongo que es la secretaria personal del Rey.

-¿Les dijo por qué vinieron hasta acá?

-Estamos aquí para informar a su majestad de asuntos nacionales- dijo mi hermana mientras llegábamos al mismo tiempo que ellas a las puertas de la oficina del Rey.

-Les pedimos a todos que enviaran un informe a menos que se tratara de una emergencia nacional, y todos estuvieron de acuerdo con eso, no pueden irrumpir así en el palacio, ¿acaso quieren que aumentemos la seguridad en el palacio? ¿o necesitan que les enseñemos las reglas de nuevo?- dijo la señora Noh.

No es un muy buen momento para que me hablen así y mucho menos para que me reten de esta manera, cuando estoy enojada actuó con lo más fuerte de mi carácter.

-¿Por qué mejor no das un paso atrás?- dije y la señora Noh me miró entre sorprendida y enojada, no se esperaba esa respuesta de mi parte- su majestad ha estado siendo muy negligente con su deber, yo llamaría a eso una emergencia nacional.

-¡Cómo te atreves a hablar así del rey en su propia casa!- dijo reprochándome la señora Noh.

-No vamos a dejar que sigan ocultando al rey, tenemos trabajo que hacer- esta vez dijo mi hermana, casualmente ella estaba más tranquila que yo.

Me quedare| Jo Young | The king: Eternal MonarchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora