"Perdonadme si ante vuestros ojos peco, pero a veces me avergüenzo cuando pienso en mi ansiado y anhelado caballero que arriba a nuestro carnal encuentro y me llena de caricias y besos ajenos. Ya se que es impropio de mi pensar en eso, pero mi sangre es tibia y mis gemidos amargos cuando en mis noches no hallo consuelo más que en el rozar de la piel de aquel blanco lienzo. Imaginaos lo vergonzoso que para mi debe ser y aun así suspirar por vos."
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La noche del lamento de las olas.
PoésieEsta obra literaria aún está en proceso, una antología de poemas y estractos de estos que narran una de las historias más crudas, trágicas y a la vez extrañamente bellas de una de las parejas más queridas por los seguidores en la saga literaria que...