Cap. 8

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EREN:

El día de mi boda, 22 de Septiembre de 1887, este día madre estaba revisando todo detalle, ella misma se aseguró que mi baño tuviera más perfume que agua, me cepillo el cabello y maquillo un poco.

-Listo -Dijo Carla- un leve rubor en tus mejillas te hace ver más tierno

- ¿Gracias?

-Oh calla

- ¿Por qué sigo en bata? ¿No se supone que usare ese vestido que la madre del Duque, eligió para mí?

-Dirígete apropiadamente a ella cariño, es tu suegra ahora y no te preocupes que la modista vendrá en unos momentos

-No me preocupo, solo me extraña porque hasta tú estabas emocionada

-Debo decir que te verás espectacular, no cualquier novio usa vestido

Tras un gran suspiro, alguien toco a la puerta, cuando indicaron que podían pasar, vi a Reiner entrar, lucia bastante elegante con su traje de gala militar, luciendo su rango de capitán en el brazo izquierdo, ese traje negro con bordes rojos y dorados, con sable en la cadera y guantes blancos. Lucia apuesto, nos sonreímos y él dijo.

- ¿Nervioso?

-No lo sé, pero tú te miras elegante

-Solo es el uniforme, ¿aún no te visten?

-No, mi madre insiste en esperar a la modista -Reiner me miró fijamente, entonces le pregunte- ¿te ocurre algo?

-No, si me permites decirlo, Levi tiene mucha suerte, aunque los dos sabemos que no se la merece

Solo sonreí ante su comentario, le di un abrazo el cual correspondió, debo decir que esta vez, a diferencia de esos abrazos cálidos, este se sintió rígido y triste, se separó de mí, me dio un beso en la frente y salió de mi habitación, no sé porque recordé el día que lo conocí, Reiner y yo tenemos 8 años de diferencia, ahora tiene 23, cuando el llego a nuestras vidas, tenía 11 años casi los 12 y yo solo 4.

-Años atrás, mansión Jaeger 12:30 pm-

Estaba durmiendo tranquilamente en mi cama, abrazando a mi osito de peluche, de repente escuche que mis padres pasaron por la puerta de mi habitación diciendo cosas en voz alta.

-Grisha ¿Qué hiciste?

-No lo podía dejar ahí, la mejor manera de ayudarlo es traerlo aquí con nosotros

-Pero ¿tan pronto? Eso no convenía ahora

-Por favor, sé que la única persona que lo entiende eres tú Carla

-Yo te entiendo, créeme que sí, sin embargo, la gente comenzara a hablar y la reputación de nuestra familia -Carla estaba por decir más, pero el rostro angustiado de Grisha, la dejo sin palabras, haciendo que se suavizara- debemos, prepararle una habitación

-Grisha abrazo a Carla con mucha fuerza, la mujer correspondió y dio una pequeña palmada en la espalda de su esposo-

-Gracias querida

Acepto - RirenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora