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"Feliz cumpleaños a ti. Feliz cumpleaños a ti." empezaron a cantar todos al unísono. "Feliz cumpleaños, Louis. Feliz cumpleaños a ti."

Louis tenía las mejillas sonrojadas. Todos en la fiesta le estaban mirando mientras seguían cantando. Tenia a Harry a su lado y a su hermano en el otro lado. Sus padres estaban enfrente con los padres de Harry. Y todos ellos le seguían cantando las mañanitas.

Cerró sus ojos y pidió un deseo mientras daba un pequeño soplido.

Se escucharon aplausos por lo que abrió los ojos encontrándose con que todos reían. Harry puso una mano alrededor de su cadera por lo que volteó a verlo.

"Estas muy hermoso." dijo Harry besando su mejilla.

"Oh calla. Harás que me sonroje." dijo Louis abrazándolo.

"Eso es lo que quiero." dijo el alfa dejando un beso en su sien.

"Tortolitos. Aún seguimos aquí." dijo Johnny señalando a todas las personas que estaban mirando.

"Que vergüenza." susurró Louis escondiendo su rostro en el pecho del alfa quien gustoso lo abrazó.

"¡Partamos el pastel!" gritó Johnny para que todos los demás dejaran de prestarle atención a su hermano quien ya estaba muy avergonzado. "¡Yo pido el kiwi!"

Harry se encargó de llevarse a Louis lejos de ahí. Llegaron a la cocina en donde milagrosamente no había nadie robando comida.

"Ya estamos solos, bebé." dijo Harry pasando su mano por la espalda del omega. "Hueles tan bien."

"Lo siento. Me puse el rociador que huele a fresas." se disculpó Louis bajando su mirada.

"No importa. Si tu te sientes cómodo así, entonces esta bien." dijo Harry alzando la mirada del omega y dejando un beso en sus labios.

"Okay." Louis pasó sus manos por los rizos de su alfa. "Me encantan tu cabello."

"Lo sé. Me di cuenta cuando me lo jalaste." dijo Harry moviendo ambas cejas y haciendo referencia cuando tuvo su celo.

"Oh." simplemente dijo el omega mordiendo su labio y sus mejillas tiñéndose de rojo. "Lo recuerdo."

"Estaba pensado en darte tu regalo ahora mismo." dijo Harry agarrando su mano.

"¿No estarás pensado en lo que creo que estás pensado?" preguntó Louis mirando a su alrededor. "Alguien podría entrar."

"No es lo que tu mente piensa." dijo Harry sonriendo. "En realidad tengo dos regalos." sacó una caja con un gran moño encima. "Espero que te guste. Se me ocurrió hace días y quedó muy lindo."

"¿Qué será?" preguntó Louis con curiosidad mientras abría la caja. Soltó un sonido de sorpresa cuando vio lo que había adentro. "Harry." susurró sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas.

Dentro de la caja había un globo de nieve, dentro de ella habian dos muñequitos vestidos como el día que se conocieron además de que también había un carrito de compras dentro. ¡Por Dios! ¡Es tan hermoso y lindo!

"Nos conocimos en un supermercado." dijo Harry algo avergonzado. "Así que pensé en ello y quise que tuvieras algo significativo. Además de que no se me ocurrió otra cosa pero si no lo quieres esta bien. Puedo soportarlo."

"Harry." dijo Louis besando la mejilla del alfa. "Gracias, la amo."

"¿Quieres acompañarme a tú auto? Ahí tengo tu segundo regalo." dijo Harry algo nervioso.

"¿Ahora si de lo que creo que es?" preguntó Louis sonrojándose.

"No es lo que piensas." dijo sonriendo mientras jalaba a Louis fuera de la cocina y pasaban a un lado de las personas.

"¿Por qué soy tan malo adivinando?" preguntó Louis dejando que Harry lo sacara de la casa.

"En realidad no trataste de adivinar. Solo pensaste en una cosa." respondió Harry sonriendo. "Esta en la parte de atrás de tu auto." dijo Harry dándole las llaves del auto al omega.

"¿Cómo las conseguiste?" preguntó Louis agarrando las llaves.

"Johnny." dijo simplemente el alfa.

"Muero de curiosidad." el omega abrió la puerta de su auto y se sorprendió al ver lo que estaba en el asiento trasero de su auto.

"¿Te gusta?" preguntó Harry nervioso. "Recuerdo que me habías dicho que amabas esa caricatura y que tu auto se llama así."

"¿Me compraste a Polar, Panda y Pardo?" preguntó Louis aún sorprendido. Los osos estaban sentados. "Son muy lindos."

"¿Si te gustan?" preguntó nervioso Harry.

"Los amo. También amé el globo de nieve." el omega pasó sus brazos alrededor del cuello del alfa. "Gracias. Me encantaron mis regalos." dejó un beso en los labios de Harry.

"Pues también amarás el mío."

Ambos voltearon hacia donde estaba Johnny.

"Lo siento de verdad. Pero solo soy el chico de los recados." se disculpó Johnny. "Dice papá que ya es hora de abrir los regalos y me dijo que si te veía besando al alfa que les aventara agua. Pero se me olvidó así que lo dejare pasar."

"¿Te atreverías a mojar a tu querido hermano sabiendo que se enfermaría por el frío que está haciendo?" preguntó Louis indignado.

"Si." respondió Johnny encogiéndose de hombros. "Vamos. Papá debe de pensar de que lograron comprarme."

Aunque ambos sabían que Johnny sería el primero en llegar a ayudar a Louis si se llegara a enfermar.









Love in the Supermarket.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora