Capitulo 9

4 4 0
                                    

*MARATÓN 1/2*

-Oye ,min…- se oyó la voz del chico moreno desde la puerta -el entrenador viene hacia aquí-

Mis ojos se abrieron de golpe devolviéndome la viva imagen del deseo en los suyos, en algún momento los había cerrado y con ello había perdido todo atisbo de miedo, sabía que era peligroso pero por algún motivo mi cuerpo no respondía a lo que pasaba por mi mente lógica.

-Nos veremos pronto, oegugin- dijo al tiempo que me soltó y me mostraba sus dientes con una sonrisa de lado.

Mis ojos lo siguieron cuando salió del vestuario sin que yo pudiera controlarlo, no entendía que había ocurrido ni porque, el motivo por el que había venido a encararlo murió en el mismo momento en que sus labios abrazaron los míos y la poca cordura que me quedaba se fue con él.

Cuando pude recuperarme del todo salí y fui en busca de Hobi y los demás, los encontré rápidamente en la puerta de la ultima clase haciendo planes para el fin de semana.

-Hola bella!- Hobi estaba pálido al verme -de verdad temía no volver a verte hoy- dijo acercándose a mi -estas bien?- preguntó cerca de mi oído.

Asentí para que solo él pudiera verme y se quedara tranquilo, más relajado sonrió al resto y siguió conversando con ese desparpajo del que solo el era dueño.

-Y bien?, Vas a venir verdad Angie?- pregunto Yui- poniendo los ojos en blanco ante mi mirada inquisidora- a la fiesta que dará la familia Kim…en realidad solo la dará Namjoon ya que sus padres están de viaje-.

Miré al grupo que parecía a la espera de mi respuesta, asentí no muy segura de ello y por alguna razón la mirada de Hobi se clavó en mi o al menos me dió esa impresión, al tiempo que Yui y Nana se iban con la excusa de que debían comprar atuendos para la noche.

Al quedarnos solos Hobi puso su brazo sobre mis hombros y me detuvo a mitad de camino del estacionamiento:

-Angie, nena… de verdad vas a ir está noche?- su pregunta me tomó por sorpresa.

-S…si?- contesté dudosa.

-Mira, estaré a tu lado toda la noche y no te pasará nada ok?- su nerviosismo había vuelto.

-Que quieres decir con eso? ,Porque habría de pasarme algo?- dije algo asustada.

-Angie, de verdad no te diste cuenta?, después de lo que ha ocurrido en los últimos días, acabas decir que irás a la fiesta del mejor amigo de Min…-

Con las palabras de mi amigo empezaban a dibujarse en mi mente miles de posibles situaciones, en su mayoría una peor que la otra. Hobi caía en la cuenta que acaba de entender lo que quería decirme y esperaba calmo a que hablara.

-Hobi, no podemos dejar que una sola persona nos arruine los buenos momentos verdad?, Además estaremos juntos y este….chico…Kim no parece malo…-

La cara que puso Hobi no me dió nada de tranquilidad pero no podía echarme atrás, debía terminar esta noche lo que no pude en los vestuarios.

Estaba dándole los últimos toques a mi maquillaje, y viéndome en el espejo a la espera de que Hobi llegara, al volver a casa le había comentado a kook que tenía una fiesta y que iría con un amigo, lo cual no lo convenció pero no se animó a retrucarme nada ni a hacer más preguntas.

Cuando el timbre sonó fui corriendo hacia la puerta, un Hobi con ropa elegante y muy perfumado me veía desde allí.

-Niña! -dijo dando un silbido seguido de una risa- vas a una fiesta o quieres matar a más de uno está noche?

Su apreciación me levanto el ánimo, fue la afirmación de que no había elegido mal lo que traía puesto, un corto vestido negro con cremallera delantera, muy entallado con mis botas de combate, ojos muy maquillado y labios color rosa.

En el tiempo que estuve arreglándome en casa pensé en un plan a seguir, el cual consistía en que aprovecharía el estar en la casa del mejor amigo de Min, para hablar con él para intentar saber el porque de su aversión hacia mi, tal vez Kim podría decirme el porqué o darme pistas. Pronto tomé mi chamarra de cuero y mi bolso y nos fuimos en el auto de Hobi, el viaje hacia la zona rica no fue tan largo como pensé pero nos dió el tiempo suficiente para tomar unos tragos para infundirnos algo de coraje, tanto él como yo estábamos nerviosos pero al llegar a la acera de la casa éramos todo risas, tal vez el miedo a lo que podría pasar nos hizo pasarnos un poco de la raya. Allí ya estaban esperándonos Yui , Nana, Tae, jimin, Jin y Félix.

-Se tomaron su tiempo eh?- bromeó Tae como era su costumbre.

-Bueno no todos podemos ponernos lo que sea y lucir bien- se quejó Yui caminando hacia la entrada.

Tae nos regaló una de sus sonrisas perfectas mientras jimin lo golpeaba por detrás.

-Ya deja de molestar quieres?- dijo riendo.

Al llegar a la puerta ya se oía la música alta y la gente intentando hacerse oír por encima de ella, justo en ese momento la puerta se abrió dejando ver al dueño de casa.

-Ah, buenas noches chicos, me alegro que hayan decidido venir- dijo con una voz que parecía sincera – Hola, creo que no nos hemos presentado, soy Namjoon- dijo bajando un poco la mirada y extendiendo su mano hacia mi.

La tensión pareció apoderarse del grupo a la espera de mi reacción, todos parecieron volver a respirar cuando estreché su mano, incluso el mismo Namjoon.

-Me alegra saber que no prejuzgas a pesar de las amistades- dijo Nam dándome una amplia sonrisa con hoyuelos.

-No, nadie debería prejuzgar a otros sin motivos- dije observando si caía en lo que realmente quería decir, pareció entender a la perfección dándome un asentimiento.

-Espero que disfruten de la noche – dijo haciéndose a un lado para que entráramos.

Pronto Yui y Nana desaparecieron de la vista mientras que el resto y yo fuimos hacia la barra, a pesar de todo y todos hoy nos olvidaríamos de todo y nos divertiríamos. Pasamos el rato bebiendo y bromeando entre nosotros, Nana parecía estar ligando con Félix, mientras Yui estaba con un chico yendo hacia el patio de la casa.

-Chicos, debo ir al baño- dije entre risas, el alcohol ya se me había subido a la cabeza, estaba en ese momento en el que todos los problemas parecen desaparecer.

-Espera, le diré a alguna de las chicas…-dijo Jin

-No te preocupes, parecen ocupadas- dije dándole un guiño que ambos entendimos.

-Ok, pero no tardes o Hobi me asesinará si algo te sucede- dijo mirando hacia él que charlaba animadamente con Tae y otros chicos cerca de nosotros.

Dándole una última sonrisa me alejé lentamente tratando de que todo mi autocontrol me ayudara a caminar de manera que nadie se diera cuenta de lo que mal estaba, recorrí la planta baja en busca de un baño, al encontrarlo ví una larga fila, al parecer había alguien que estaba peor que yo usándolo.

-Disculpa, sabes si hay otro baño?- pregunté a una chica de la fila.

-Si, en la planta alta hay dos, uno en la habitación de los padres de Nam y otro en su habitación- dijo amablemente la rubia.

Me quedé en la fila un momento sopesando si debía esperar o subir, el llamado urgente de la naturaleza hizo que me decidiera por la segunda opción, me hice camino entre las personas hasta las escaleras, esto me traía malos recuerdos pero no podía esperar, no podía dejar de sentir que algo pasaría, pero no pensaba con toda claridad en este momento y mucho menos con las ganas de ir al baño.

Subía lentamente, sosteniéndome cómo podía, esquivando personas que subían y bajaban también ,vasos y botellas vacías abandonadas en los escalones, unos minutos después que para mí fueron una eternidad logré llegar, en la habitación de Nam había una fila también así que me atreví a mirar en la habitación de sus padres, allí por suerte no había nadie, al entrar prendí las luces y cerré la puerta opacando un poco el ruido de afuera, corrí al baño, cuando hube terminado acomodé mi ropa con la lentitud que mi estado me permitía, escuché como la puerta se abría y se cerraba de nuevo, no pensé mal hasta que al salir noté que alguien había apagado las luces, no podía ver nada pero de alguna manera sabía que no estaba sola…

Lo imposible.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora