BABYSITTER

EPISODE 20

Cuando Xiao Zhan pudo regresar al trabajo, lo estaban esperando la abuela Helen y su hija Carman en el despacho, Xiao Zhan sabía lo que le dirían y solo se sentó en uno los costosos sofás a escuchar lo que ellas iban a decirle.

—Xiao Zhan, por una parte no puedo quejarme, tú has sido el mejor niñero que ha tenido mi hijo y ahora lo veo cada vez mejor... —sonaba como una despedida y Xiao Zhan se angustió—. También ayudaste a mi hijo Yibo a tomar la decisión de trabajar, nadie aquí lo pudo hacer y aunque la última cena con él haya resultado de lo peor, te quiero agradecer ese cambio en mi hijo mayor. —Xiao Zhan alzó la cabeza mirando a la mujer decirle todo eso y su corazón latió acelerado.

—Pero mi nieto no merece estar con un hombre —interrumpió la abuela, siendo firme y él se angustió—. No es gay ni esas cosas.

—Lo lamento —se excusó Xiao Zhan y Carman suspiró.

—Mamá, deja que yo hable. Mira Xiao Zhan, hemos ya tomado una decisión, y lamento decirte que no podrás seguir aquí. —Xiao Zhan se sintió como si un hoyo negro se abriera en el suelo y cayera en él sin remedio, era despedido con bonitas palabras... por querer a un hombre, nada más por eso.

—Señora... —dijo en casi un gemido.

—No me mires así, aún no termino; no podrás seguir de lunes a viernes, pero sí los sábados; de lunes a viernes estará con mi mamá, ella también quiere criarlo, ella me apoyará y además es su familia, sabemos que eso es lo mejor, tú mismo me lo dijiste una vez. —Xiao Zhan asintió, aunque no se sentía muy bien—. Tu paga será la misma —eso lo alentó—. Podrás estudiar mejor, esa es mi oferta, la tomas ahora o la dejas. —Qué difícil, Xiao Zhan miró a todas partes, pero no tenía otra opción, así que asintió—. De acuerdo. Te agradezco todo lo que has hecho por mis hijos, aunque no simpatice de su relación, ya sabes lo que te advertí. —Xiao Zhan se puso rojo de vergüenza y las dos mujeres mayores lo miraban fijamente. Para Carman era un chico con el cual su hijo jugaba, pero para la abuela era un hecho aberrante, no podía imaginar cómo Yibo optó por un hombre.

—Mi nieto solo juega a veces, no seas ingenuo —dijo Helen molesta y Carman tuvo que hacerla callar.

—Mamá, en ese asunto no nos meteremos más, ya Yibo hará lo que tiene que hacer, ya te advertimos Xiao Zhan—Lo miró seria y él asintió.

Esa advertencia tan dolorosa, pero él quería confiar en Yibo, en lo que estaban viviendo y que no tenía que darle explicaciones a nadie, correría el riesgo por su propia cuenta.

Esa tarde estuvo muy nervioso, debía despedirse de Jin, aunque lo seguiría viendo. Se sintió un poco culpable porque era él quien había dicho a Carman que era lo mejor para Jin estar con su familia, solo esperaba que la abuela sea una buena persona para el pequeño.

—¿Pasa algo? —preguntó el niño mientras terminaba su tarea.

—Estoy contento de que te estés portando mejor. —Jin sonrió.

—Sí, tengo amigos y una novia, se llama LiXue —contó con una sonrisa y Xiao Zhan rió.

—¿Novia? No me contaste. Vaya, no lo imagino.

—Yibo me ayudó a encontrarla, un día que fuimos al parque. —Sonrió y Xiao Zhan también lo hizo, aunque luego pensó en cómo eso había acontecido... pero no sospechó nada.

—Jin, debo decirte algo, en realidad no es tan malo, pero quizá te parezca así. —Jin soltó su lápiz y lo miró—. Debo irme por mis estudios, pero te seguiré viendo los fines de semana... —Vio cómo el niño abría la boca y luego dejaba de verlo—. Pero no estarás solo, tu abuela cuidará de ti...