»» ─────── ♡ ──────── ««
◌⸛ Bright empezó a soñar de la nada con un chico de linda y peculiar sonrisa como de un conejito, la completa hermosura de aquel chico, y su peculiar personalidad hará que crezca un sentimiento esperado en el gran...
Otra vez me encontraba en el parque de siempre, con mi chico de sonrisa de conejito.
Le había dado unos apodos super bonitos que le encantaban: Bebé, Conejito, Mi chico de sonrisa de conejito, dientes de conejito.
Cada día que pasaba era imposible no enamorarme más y más de él. Y lo que más me encantaba era que era correspondido de igual manera.
Jamás pensé encontrar el amor de esta manera, pero a medida que pasaba el tiempo, también tenía miedo, mucho miedo.
Todo esto era un sueño, no quería aceptarlo, pero era casi imposible no lograr torturarme a veces pensando en ello.
Win es un sueño Bright, no es real.
Me repetía a diario eso, pero cada vez que me lo decía al momento de dormir, simplemente me perdía en lo que pasaba en mis sueños. Y estaba con él, con mi chico de sonrisa de conejito.
Sentía como si me estuviese teletransportando a otra dimensión, en un lugar donde encontraba al amor.
Al amor de mi vida.
Dios, si esto es solo un sueño, ¿Por qué se siente tan real?
Los besos, las caricias, los mimos, las conversaciones, los sentimientos. Todo, absolutamente todo, era lo más hermoso que había experimentado en mi vida.
En este preciso momento otra vez todo esto desapareció de mi mente, como decía cuando me encuentro aquí con él, con mi conejito, todo queda atrás. No hay preocupaciones, no hay nada.
Solo existimos él y yo.
Este amor, poco a poco me iba matando.
...
— Uhmmm... Brillitos, mira un arcoíris — decía mi conejito junto a mí señalando hacia el cielo —
Ambos nos encontrábamos en el pasto del parque echados sobre una manta como de picnic y nos dedicábamos a apreciar el cielo.
— Si mi conejito, es hermoso, aunque se me cierran un poco los ojos sabes — dije con una pequeña risa -
— Jajajajajaja ay Brillitos —dijo mi bebé —
— Oh no te rías conejito, sino me voy a vengar — dije con un puchero —
— Aparte de guapo, tierno, sabes que tus pucheros me encantan Brillitos, tienes tantas versiones de ti que me enamoran cada día más.
Tráiganme una ambulancia, esto fue demasiado para mi corazón.
— Tus versiones también me enamoran cada día más mi chico de sonrisa de conejito — dije recostándome de lado dirigiendo mi mirada hacia él —
Entonces Win me siguió y también se recostó de lado quedando ambos mirándonos el uno al otro.
— Te amo Bright, ¿Lo sabes verdad? — me preguntó —
— Por supuesto WinWin, yo también te amo, como no tienes idea — dije pasando una de mis manos por sus mejillas — Te amo tanto, mi amor...
Ups
— ¿Me-me dijiste mi amor? — dijo Win con un sonrojo en sus mejillas —
— Oh WinWin, ¿Te asusté verdad? Ahhhh soy un tonto, no... no de.. de... — me calló con un beso —
— Me encantas Brillitos, si que sabes como hacerme sonrojar, eres experto en robarle latidos a mi corazón.. Mi amor — y volvió a depositar un beso en mis labios —
Awwww, ¿Por qué eres tan lindo Win?
Nunca le había dicho mi amor a mi conejito, pero me nació en ese momento, lo consideraba el amor de mi vida.
Cómo quisiera conocerlo en la vida real, que pudiera existir, para poder buscarlo.
Juro que si Win fuera real, lo buscaría por cielo mar y tierra, Oh Dios, por supuesto que lo haría.
Pero al parecer no había esa posibilidad.
Me perdí en mis pensamientos cuando de pronto.
— Dulces sueños, Brillitos, dulces sueños, mi amor — dijo Win y depositó un beso en mis labios —
☁
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
☁☁
Frágil.
Si quisieran encontrar una palabra para describir como se sentía el corazón de Bright en este momento, sería frágil.
Se despertó con unas lágrimas que brotaban de sus pequeños ojos color café.
Tenía emociones encontradas, pues los sueños que estaba teniendo, cada día se volvían más dulces, más hermosos, más románticos.
Y eso le dolía, le dolía.
La realidad lo golpeaba.
Una realidad, donde Win, su chico de sonrisa de conejito, su bebé, su amor, el amor de su vida. No estaba con él. Donde no existía su WinWin.
Se repetía en su cabeza un millón de veces porque tenía que sentirse así...