Décision

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¡No puedo decidir si quiero arruinar mi vida o no!

De pronto, mi consciencia regreso a su lugar y volví a empujar a la pelinegra

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De pronto, mi consciencia regreso a su lugar y volví a empujar a la pelinegra. ¿Quién se cree que es para besarme?

"Vete, ahora. Llamaré a la policía si no lo haces." Mi voz sonaba temblorosa, aun las personas con un poco de sentido común podrían saber que hacer eso terminaría mal.

Tocaron la puerta, la miré molesta antes de que se le ocurriera hacer algún movimiento extraño y entreabrí la puerta, logrando visualizar a la señorita Sayaka.

"Busco a la gata." Definitivamente no entendía nada de lo que estaba sucediendo, abriendo completamente la puerta ella me miro impresionada. Más bien, sus ojos se posaban detrás mío. "Sabía que podía pasar esto, la tuve que detener antes."

¡Ahora estaba más confundida que antes.!

"¿Qué pasa? No entiendo, ¿Usted conoce a la loca que entró a mi departamento como si viviera aquí?" Yo la dejé entrar en un principio, pero eso no le da derecho a hacer lo que hizo conmigo.

"Esa chica es el gato que dejó en mi cuidado, aunque no pude detenerla y ahora está aquí. Perdóneme." Se inclinó a manera de disculpa, al voltear hacia la mencionada estaba sentada en uno de los sillones tranquilamente mientras miraba sus uñas. ¿Acaso estaba ignorando que hablamos de ella?

"Explicate, chica gato." Al parecer lo único que conozco de este molesto intruso es; Uno, es una gata que puede convertirse en humano. Dos, Igarashi sabe algo sobre porque sucedió.

Necesito respuestas, nunca había escuchado sobre tales casos que para mí parecen una locura sin patas ni cabeza. ¡No tiene sentido! Es imposible que algo así pueda pasar, ¿No?

"Uhm, ¿Por fin estás interesada en mí?" Se extendió una larga sonrisa por su rostro, parecía satisfecha por lo que escuchaba. "¿Será que ya me amas?" Levantándose del sillón se encaminó hacia mí, moviendo su cola de lado a lado como un gato entusiasmado. "¿Aceptarías ser mi dueña?" Su voz tenía cierto encanto, al igual que ronronear cada palabra.

Esta vez no caeré tan fácil.

"No, solo quiero saber que eres exactamente y porque deseas que sea tu dueña. ¿Por qué yo?" Conozco a tantas personas amantes de las mascotas, posiblemente por más loco que suene alguien se la llevaría y viviría cómodamente como un gato. Sin embargo, estaba tomando el camino difícil tratando de convencerme.

"Ya te lo había dicho, estamos destinadas a estar juntas. Quiero ser tuya y de nadie más." Gruñí por lo bajo, al ver que Sayaka se limitaba al silencio atenta a nuestra interacción estaba quedándome sin ideas para resolver este problema.

¿Debía aceptarlo? Quizás así obtenga respuestas de lo que sucede.

Pero mi vida se tornaría en una completa locura.

Allergy to youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora