𝐓𝐡𝐞 𝐔𝐧𝐝𝐞𝐫𝐠𝐫𝐨𝐮𝐧𝐝 𝐂𝐢𝐭𝐲─────•

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𝐊𝐞𝐧𝐧𝐲 𝐚𝐧𝐝 𝐓𝐡𝐞 𝐁𝐫𝐨𝐭𝐡𝐞𝐫𝐬


→EL SUBTERRÁNEO ERA EL LUGAR MÁS SUCIO Y OSCURO QUE PODÍA EXISTIR en todas las murallas, El se encontraba en ese asqueroso lugar para encontrar a su hermana menor, según le habían comentado algunos ebrios hombres en uno de los tantos bares a los que comúnmente concurría, Kuchel su única hermana, trabajaba como prostituta para sobrevivir en ese sucio lugar.

Se adentro a la vieja casa donde se supondría que vivía su hermana, la cual estaba a punto de caerse, al entrar observo a su hermana postrada en una cama vieja, y aun lado de ella un pequeño bulto el cual pudo observar era una niño, al momento en que se acercó para revisar.

—Oi oi oi adelgazaste mucho Kuchel. —hablo, creyendo que está se encontraba dormida lo cual era totalmente erróneo.

—No la toques. —se escuchó bajo pero entendible en la silenciosa habitación.

Era una voz rasgada la cual llamó su atención. Además del cuerpo fallecido de la mujer, había otro bulto a su lado un poco pequeño, el cual reconoció como un niño más pero en busca del calor de su madre. Y otro sentado a un lado el cual tenía el cabello negro, y ojos grises que veían fijamente cada movimiento del extraño que había venido a invadir su hogar. No lucía nada más que un viejo trapo café, con manchas que lucían como si fuera sangre.

—¿Está muerta?. —preguntó en voz baja aun sabiendo una posible respuesta.

El pequeño aun lado se la quedó viendo sin nada de vida y dando la impresión de que no contestaría, pero aun así abrió su pequeña y seca boca.

—Esta muerta. —habló el mocoso pelinegro que seguramente se encontraba sus últimas, miro hacia la cama y dedujo que se encontraba muerta, voltio hacia el niño pequeño en la cama.

—Que hay del otro mocoso, también se encuentra muerto. —el niño giro su vista al pequeño de la cama, y negó.

—Esta con vida, y es una niña. —hablo con una rasposa voz, así que es una mocosa, eh pensó.

—Soy Kenny, solo Kenny. —Hablo el mayor mientras se deslizaba por la pared hasta quedar sentado dejando escapar un suspiro. —¿Y tu?.

—Levi, solo Levi. —hablo bajo.

Giro su cabeza hacia la cama y miro a la niña, según aparentaba la mocosa solo tendría algunos dos años de vida, —¿Y la mocosa?. —pregunto.

—Alice. —hablo, —Su nombre es Alice.—camino a hacia la cama y tomo a la pequeña, observo como el otro mocoso el cual dijo que se llamaba Levi, que a pesar de estar casi muriendo de hambre se levantó de forma casi brusca.

—La llevare hacia la superficie, si se queda aquí morirá. —informó, al levantarla pudo observar que en el cuello de la niña de no más de dos años había un collar en forma de un ala, pero solo la mitad de esta, algo que lo extraño.

Levi quien no se había movido luego de pararse se movió con una brusquedad ya que ese extraño hombre, se intentaba llevar a su pequeña hermanita.

Kenny miro hacia Levi y hablo. —Sígueme.

Sin tan siquiera tener la mínima idea de que hacer lo siguió, hacia lo que era unas extrañas escaleras, donde su hermanita fue separada de él, aunque se negara a dejarla ir, aunque hubiese intentado detenerlo, el sabía que si ella se quedaba ahí, iba a morir al igual que él.

Aun con el enorme dolor que sintió al separase de lo más importante que tenía en su vida, su hermanita, tenía que vivir, además ese extraño señor llamado Kenny le dijo que ella iba a vivir mejor, su collar el cual su madre le había comprado días antes de caer enferma era unos de sus mayores tesoros, con ese collar podría volver a encontrarla cuando el saliera de ahí.

《......》

Lo único que Kuchel había dejado atrás fue a una mocosa recién nacida y un azabache de unos 10 el cual se encontraba en sus últimas sin pizca de ánimos y que se movía como un fantasma dado a su horrendo aspecto, que no hacía nada más que observar en silencio cada movimiento que hacían las personas a su alrededor. Kenny no vio más opción que tenerlo a su lado, viendo que sufría el mismo parecido que Kuchel.

Le enseñó todo lo que sabía; persuadir, combatir, manejar a las personas, y siempre cuidar de el mismo sin tener que depender de nadie.

No le sorprendió que aprendiera tan rápido, estaba en su sangre, después de todo. Levi creció lo suficiente para no avergonzarse de su apariencia y vida y pasó a ser reconocido en toda la ciudad subterránea como alguien que no debía ser subestimado por su apariencia.

La mirada que tenía no cambió en estar fija en nada más que en los movimientos de sus adversarios, pero habían cobrado algo de brillo cuando peleaba y conseguía ser distinguida por todos.

Era ver un ser que sólo se movía por puro instinto y que su objetivo solo era sobrevivir en la mugrosa ciudad que llamaba hogar, yendo por los mandos más altos y derrotándolos. Ganar o perder, eso le habían enseñado, y aprendió cómo siempre tener la victoria solamente con sus manos.

Era un orgullo para la persona que le había enseñado todo. Era algo seguro que ese mocoso sería un monstruo cuándo fuera un adulto.

Kenny no más al ver lo que había hecho con el mocoso se vio a sí mismo a su edad, por lo que no tuvo más opción que dejarlo en la sucia ciudad y para jamás volverla a ver.

Al menos le había enseñado como sobrevivir en aquel apestoso sitio, no podía reclamarle nada más que gratitud.

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Es algo cortó pero solo es para adentrarse en la historia original.

Jamás pensé que tendría la confianza para publicarla, pero una amiga me animo, ¿Qué opinan debería terminarla? Soy una persona demasiado insegura y no hace mucho estuve en tratamiento psicológico así que quiero distraerme escribiendo....Gracias a las personas que leerán está loca historia, que he escrito para superar mi inseguridad..


♡︎𝐃𝐚𝐢𝐬𝐮̄𝐤𝐞♡︎


𝐒𝐀𝐋𝐕𝐀𝐓𝐈𝐎𝐍 𝐆𝐀𝐌𝐄──𝐒𝐍𝐊 (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora