*̥˚ CAPÍTULO 6 *̥˚

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Malentendidos

Mikasa observó asustada a Levi, pegó un grito ahogado mientras se cubría un poco con la blusa que traía en manos. Levi por su parte salió apenado de la habitación cerrando fuertemente la puerta.

─Idiota ─murmuró recostado por la puerta.

Torpemente fue a la sala con un sonrojo notable. Se maldecía internamente por no tocar la puerta antes de abrirla, ahora Mikasa debe de malinterpretarlo.

─Aparte de gruñón ahora es pervertido ─refunfuño la pelinegra poniéndose una blusa rápidamente.

Se miró al espejo y pudo notar un sonrojo. Se encaminó a la puerta y al abrirla observó de derecha a izquierda el pasillo pero no pudo notar a Levi merodeando por la zona. Rápidamente bajó las escaleras, observó a Levi parado enfrente de la chimenea intentado encenderla.

─Ahora entiendo todo, las novelas que lees alborotan tus hormonas ─bromeó.

─Sino fue por cierta mocosa que no sabe cerrar la puerta con llave, jamás hubiera pasado todo esto ─recrimino Levi, sin apartar su vista de la chimenea estaba demasiado apenado como para mirar a Mikasa a los ojos y tampoco quería que se de cuenta de su sonrojo por recordarla sin blusa─. Maldita imaginación idiota ─murmuró enfadado.

─¿Dijiste algo?

─Que dejes de hacer suposiciones idiotas ─mintió.

Mikasa rodó los ojos y se acercó a él. Se percató que al enano le costaba encender la chimenea ya que esta era eléctrica.

─¿Acaso no te llevas bien con la tecnología? ─preguntó con un tono de burla.

─Tch, esta cosa esta descompuesta ─respondió un poco enfadado.

La pelinegra lo apartó un poco y presionó un botón haciendo que la chimenea se encendiera al instante.

─¿Decías?

─La antigua chimenea era mejor.

─Ya veo... los viejos no se llevan bien con la tecnología ─bromeó Mikasa sin imaginarse que eso afectó al orgullo de Levi.

─Por lo menos no me haré esclavo de la tecnología cómo tú ─atacó retirándose de la chimenea para ir a la biblioteca.

─Exclamó el don antaño.

─La tecnología apesta, pero peor apesta el desastre que dejaron tus amigos ¿Vendrás a limpiarlo o quieres que te arrastre hasta allá?

─Enano ─murmuró Mikasa a regañadientes siguiendo a Levi.

Ambos subían las escaleras sin dirigirse ninguna mirada acompañados con un silencio agradable. Levi abrió la puerta de la biblioteca haciendo un gesto indicando a Mikasa que ingresara ella primero y así lo hizo. Al estar ahí pudo notar que Levi ya había traído todos los productos de limpieza.

─Limpiaras las mesas y las sillas, yo me encargaré de los libros y los estantes ─ordenó, tomando algunos productos.

Por parte de Mikasa no hubo ninguna respuesta. En silencio tomó las cosas de la limpieza y empezó su arduo trabajo.

Un Fantasma llamado Levi AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora