Carlota Montero Olivares una chica muy linda, cuerpo lindo, vive con su abuelo materno no conoce a su padre trabaja en la manción de los Santivañez como empleada doméstica, es una chica tierna noble cariñosa pero todo eso cambiará...Se convertirá en...
Voy camino a la empresa mi secretaria me llamo para decirme que Héctor quería hablar conmigo lo que quiere decir quedé decidió algo.
Cuando entro en la oficina veo a Héctor mirando por la ventana.
-Señor Santivañez que gusto verle aquí- cuando me escucha hablar se voltea asustado- dígame me tiene una respuesta
-Si mi familia y yo emos decidió aceptar su propuesta.
-Perfecto venga mañana con su familia a firmar el contrato-
-Me parece bien Señorita Montesinos- dice el mirándome fijamente la verdad es que ya me tiene harta.
-Bueno eso es todo señor Santivañez puede retirarse tengo muchos pendientes mañana puede venir a eso de las 7am.
-Yo quería invitarla a mi casa a una cena para festejar que vamos hacer socios y que nos está ayudando.
-Claro con gusto voy dejé la dirección de su casa con mi secretaria dígame a qué hora voy y si llevo algo.
-A las 7:30pm estaría bien.
Muy bien a esa hora estaré ahí.
El se fue y yo me quede pensado en cómo mi vida a cambiado en que estoy rota pero no importa.
(Horas después)
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Me terminó de cambiar para la cena con Los Santivañez, estoy nerviosa si, pero a la vez quiero burlarme de ellos quiero verlos cara a cara aunque para ellos soy Bárbara Montesinos.
Llegue a la casa de los Santivañez espero nadie me reconozca.
Toco la puerta y me habré Cloe al verme duda un poco y titubea por lo que me presento:
-Hola me llamo Bárbara Montesinos tengo una cena con los Señores de ls casa- digo miradola a los ojos.
-eh...si claro pase la esperan en la sala- dice ella haciéndose a un lado para dejarme entrar.
Mis tacones se escuchan y cuando llegó a la sala todos voltean un sonriente Sara con un niño supongo que es su hijo, Miguel está con una cara un poco serio, La tipa con la que está Héctor me mira de manera normal, y Héctor igual que Sara muy sonriente.
-Buenas noches, traje este rico vino para acompañar la cena es de una muy buena cosecha- digo sacando la botella.
-Cloe- llama Sara en un grito.
-Si señora- dice Cloe con nerviosismo.
-Lleva el vino que trajo nuestra querida Bárbara a la mesa- dice Sara mirándome.
-Claro que si Señora- Cloe se me acerca me quita la botella de vino para llevarla a la mesa.
Sara me invita a sentarme en el sillón y gustosa me siento, me siento muy poderosa.
-Ya Héctor nos dio la noticia de que finalmente somos socios- dice muy feliz Sara.
-Si somos socios de verdad espero que el negocio valla muy bien, saben que si no se da ustedes me tendrán que dar esta casa, la hacienda, la empresa- digo de manera sería.
Sara se pone un poco pálida yo solo puedo estar feliz.
-Sii veraz como todo sale bien- dice Miguel.
-Si claro todo saldrá excelente es más creo que ya que somos socios merecemos brindar no- digo yo.
-Sii brindemos por esta unión- dice Héctor.
Héctor fue abrir un vino y yo me quede en la sala, está casa me trae tantos recuerdos.
Hector aparece con una copa de vino me la da y con gusto la recibo.
-Señora Sara desea servir ya la cena- dice Cloe.
-Si pasemos a cenar- todos nos levantamos y nos dirigimos al comedor este comedor me trae recuerdos.
RECUERDO.
-Estabamos a punto de comer cuando entra Cloe y me sirve la sopa- la pruebo pero no me gusta así que la escupo.
Todos en la mesa me ven impresionados Héctor me ve con una cara de muerte.
FIN DEL RECUERDO.
Empezaron a servirnos y justamente le sirven la sopa por la que escupí hace dos años, claro a hora se mucho más de clase y etiqueta.
-Que ricura de sopa- digo probando.
-Si esa es una sopa muy rica, tu si sabes de sabores- dice Sara.
-Hace años cuando Hector se casó con una estúpida sirvienta, escupió esa sopa que pena pero tú eres de nuestra clase y si sabes comer lo que es bueno- dice Sara.
-Si claro- digo un poco desconcertada.
Esta mujer es un asco de persona.
La cena paso hablando de negocios, ya después me fui a mi casa.
