DUNKERQUE → Harry Styles. (Dunkirk) / TERMINADA

CAPÍTULO DIEZ

-Pensé que habías muerto, Styles -Es lo único que logro decir. Conmocionada tomo la mano que me ofrece. Él me jala a su pecho y me envuelve en un abrazo casi frenético.

-Pensé lo mismo de ti -susurra-. Me alegro de que hayas cumplido mis órdenes.

Me aparto de él y es entonces cuando logro verle el rostro. Me sorprende descubrir que apenas puede abrir el ojo izquierdo. Esta inflamado y rodeado por un moretón verdoso.

Harry se aleja de mí para abrazar a Garry y también a Niall, a quien le planta un beso en cada mejilla.

-¿Cuándo llegaron? -pregunta.

-Hace unas horas -responde Garry aceptando el agua que le ofrece Harry. En nuestro camino por la cuidad tratamos de llenar nuestros botes pero de ningún grifo que encontramos salió agua.

-¿Qué te pasó? -le pregunta Harry a James, mirándole el brazo.

-¡Un francesito, eso es lo que pasó! -chilla en un tono brusco que sugiere que estaba impaciente por que Harry formulara aquella pregunta-. ¡Esa pequeña mierda me confundió con un alemán y me disparo!

-Sólo le rozó el brazo -le digo y James me fulmina con la mirada-. Pero el corte es largo -agrego-.
y... profundo. Sangro mucho. ¿Qué te pasó a ti?

Harry me mira por un breve momento antes de voltear la cabeza para mirar por encima de la multitud de soldados. Encuentra al oficial que busca y le hace señas para que se acerque.

-¡Murphy! -grita cerca de mi oído y me deja medio sorda-. Hay un barco de heridos que está por zarpar -nos informa-. ¡Murphy! ¡Aquí hay otro herido! -Murphy llega a paso firme y se sitúa frente a Harry. Es un hombre en casi sus cuarenta, alto y rubio-. James está herido de bala.

Murphy examina a James y lo agarra por el brazo bueno con amabilidad.

-Vamos, chico, hay que subirte a aquel barco -le dice gentilmente.

Antes de que James se vaya le echo los brazos al cuello y lo abrazo con todas mis fuerzas. Él gime de dolor en mi oído.

-Nos veremos en Dover -asegura James.

«Tal vez una de los dos muera. La muerte llega sin aviso. Más si estás bajo una lluvia de bombas» pienso pero no se lo digo.

-Ten un viaje seguro -le deseo. Harry y Garry también se despiden de James y lo observamos alejarse con Murphy.

-Es seguro, ¿verdad? La fuerza aérea está haciendo su trabajo, ¿no? -pregunta Garry. La única respuesta que obtiene de Harry es un asentimiento con la cabeza.

-¡Señog! ¡Yo cgeeg que había pegdido! -chilla una voz a mi espalda. Los franceses. Llegan con la ropa llena de polvo y cara de susto. De algún lado han sacado cascos.

-¿Qué podemos hacer con ellos? -le pregunto a Harry señalando a los franceses.

Harry se encoge de hombros.

-Nada. Tienen que esperar. Los británicos tenemos preferencia.

-¡Pero si somos del mismo bando! -chillo indignada lo bastante alto como para que varios hombres me volteen a ver.

-Son nuestros barcos -dice Harry con frialdad. Le lanzó una mirada que espero que le haga saber lo que pienso de eso.

Si Inglaterra fuera invadida y los franceses tuvieran a la mayoría de los barcos no creo que Harry se tomaría aquella regla con tanta tranquilidad. Después de reflexionar esto me enojo tanto que me siento tentada a dejarle el otro ojo verde.