Los tenues colores del amanecer me sorprendieron de inmediato, nunca había visto nada igual de hermoso en toda mi viva -bebí un poco de te de tila que me ofreció lía hace un momento- deseando tener mi cámara a la mano. De inmediato Baco llego a mi mente, a el le encantaría ver esto y inmortalizarlo en una fotografía mas que a nadie.
Me encojo de hombros mientras permito que el viento cálido, con aroma a tierra mojada golpe mi rostro. Siempre es bueno tener algo de paz en situaciones como estas.
--deberías regresar al castillo y descansar un poco -escucho a Owen detrás de mi-
--Aunque lo intentara no lo lograría, todo esto es tan... fascinante -séllalo el amanecer con taza en mano-
Doy un respingo al sentir sus manos en mi cintura.
--Owen -sus ojos azules se iluminan al escucharme decir su nombre- quiero ser completamente sincera contigo. Yo... no se que me paso ayer entre nosotros dos. Tal vez fue la adrenalina del momento pero...
--No tienes que decir nada, lo entiendo. -su mano de desvanece de mi cintura, pero la distancia sigue siendo la misma. Sus azules siguen brillando hermosamente para después tornarse de un tono mas oscuro- Apolo ya me ha contado.
Un escalofrió recorrió mi espalada acompañado de algunos silenciosos minuto. Estoy apunto de excusarme y regresar a lado de lía cuando Owen se adelante.
--ya que no esta cansada ¿te gustaría caminar un rato a mi lado?-me mira expectante-
El tono en que lo dijo parecía mas a una orden que a una pregunta, así que asentí sin mas. Owen retiro la taza que sostenía para remplazarla con su mano. Una oleada de calor invadió mis mejillas.
--¿Nos vamos? -su voz sonaba divertida y su labios se curvearon un poco-
Asiento nuevamente, repitiéndome mil veces en mi cabeza que solo lo dejaba tomar mi mano para no ser grosera y mostrarle lo agradecida que estoy con el por todo lo que ha echo por mi y que no tiene nada que ver con que me guste sentir su roce en mi piel.
Nos alejamos de inmediato de allí pasando por enormes prados del otro lado del castillo. Veo un pequeño punto marró entre hierva alta me tenso un poco al recordar el lobo que nos persiguió en la madrugada, si Owen no lo hubiera detenido sin duda que nos hubieran atrapado. Caminamos un poco mas y me doy cuenta que es máximo, suelto un suspiro aliviada justo en el momento en que un grupo de mujeres pasa a nuestro lado, esta hacen una breve reverencia mirándonos con atención y Owen les responde levantando la palma de su mano y asintiendo.
Caminamos un poco mas hasta llegar a un enorme lago ubicado a un lado de castillo. De inmediato me siento en el césped mientras respiro con dificultad y sonrío al ver tremenda vista.
--Es tan hermosa -suelto mientras el viento provoca pequeñas oleadas en el agua-
--lo se.
Volteo a verlo y me doy cuenta de que nunca a dejado de mirarme. Aclaro mi garganta cuando el se sienta a mi lado.
--Creo que es el momento perfecto para contare una historia.
Lo miro extrañada
—Una historia?
El asiente.
—Hace un tiempo existo un alfa que tuvo que dejar a su manada un mes entero para arreglar algunos asunto en la ciudad, al regresar encontró a su manada desecha, los cazadores se enteraron de su ubicación cuando el no se encontraba y masacraron a más de la mitad de su manada incluyendo a su mate. -toma mi mano y empieza a jugar con mis nudillos- Cómo era de esperarse el alfa quedó destrozado y cegado por la sed de venganza. Poco tiempo después encontró a los cazadores y los hizo trisas. Los humanos decidieron cerrar el paso hacia las montañas después de lo sucedido, pensando que había animales salvajes en la zona. Pero como era de esperarlo un grupo de ellos llamados gitanos, entraron a la fuerza y planeaban alojarse por un tiempo en aquellos rumbos.
ESTÁS LEYENDO
Gran Lobo Feroz
WerewolfSamara Zimmerman es una joven estudiante de fotografía. Junto a sus amigos Baco y Aelèn se dedican a la búsqueda de la fotografía perfecta en uno de los pueblos más misterioso y mágicos. Al llegar Samara es sorprendida al escuchar un relato de un v...