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                   MANSIÓN PARK

—Estoy tan feliz, es la primera vez que seo min me invita a una cita— emocionado*

-¿Debería alistarme ya?.. Aunque faltan seis horas; Ay que importa empezaré a alistarme, ¡ya!-

Desde que tengo memoria nadie se ha interesado en mí por lo que soy, solo me ven como el hijo de un importante empresario.

Una vez tuve un amigo en la primaria, accidentalmente tuvimos una pelea de niños y regresé a mi casa con algunos moretones, esa fue razón suficiente para que mi padre destruyera a toda su familia, lo que hizo que los demás niños se alejaran de mí, porque sus padres se los prohibían, desde entonces he estado solo... hasta qué seo min se me declaro fue el momento más feliz de mi vida el ser importante para alguien y que tenga el valor de hablarme aún sabiendo lo que mi padre es capas de hacerle. Aunque realmente no es mi tipo, pero daré mi mejor esfuerzo para enamorarme de él.

—quiero verlo ya, tal vez podría llegar una hora antes —

                                   ...
—oye amigo, ¿tienes tiempo esta noche?- pregunta uno de los amigos del azabache.

—tengo una cita con jimin—

—¡hombre! ¿Aún sigues con esa belleza?... dime... ¿Qué tan lejos haz llegado?  Mm?

—ese idiota ni siquiera deja besar—

—¿¡qué!? ¿En serio? ¿Entonces por qué sigues con él?—

—¿qué no es obvio? ¿Crees que dejaré ese gran trasero sin follarlo?—

—te sugiero que si no vas en serio con él es mejor que lo dejes, si le rompes el corazón estoy seguro de que su papá romperá el tuyo literalmente y se lo dará de regalo a tu mamá—

—su padre no me da miedo, mi padre es el jefe de policía, el que saldría perdiendo sería él—

—bien... dejando todo esto de lado, hay una hermosa chica que está dispuesta a pasar la noche contigo—

—esta noche no puedo, te dije que tengo una cita con jimin—

—solo cancélala y ya ¿o piensas que será más emocionante que pasar la noche con esa ardiente chica?—

—está bien, ¿a dónde tengo que ir?—

—dijo que te estará esperando cerca del parqué, no la hagas esperar—

—dile que estaré allí entonces—

                           PARQUE

—hola seo min, creí que no vendrías— menciona una hermosa mujer pelirroja, vestida con un hermoso vestido que se apegaba a su curvilínea silueta.

—crees que voy a dejar a una hermosa mujer como tu aquí sola—

—¿en serio?, pensé que te estarías divirtiendo con esa zorrita que tienes de novio— menciona juguetona la pelirroja.

—¿hablas de jimin? Él y yo terminamos hace tiempo, así que no te preocupes.—

—y puedo saber ¿por qué?—

—digamos que no era tan divertido como pensé— responde el azabache atrayendo de la cintura a la pelirroja —espero que seas más divertida que él— el azabache amaga darle un beso a la pelirroja, pero de pronto suena su teléfono

—creo que deberías contestar— aconseja la pelirroja 

El azabache toma su teléfono y se sorprende, había olvidado que tenía que llamar a jimin para cancelar su cita.
 El azabache contesta.

—sí, ¿qué quieres?— pregunta

—e-eh seo min, ya estoy aquí— habla Jimin del otro lado de la línea—¿dónde estás?—

—estoy en el hospital porque mi madre se torció el tobillo, así que no puedo reunirme contigo hoy—

—está bien- contestó el peli rosa—

Seo min se quedó un poco confuso, jimin no le reprocho por no ir a la cita

—¿todo bien cariño?— pregunta la chica

—no era nada importante— contesta el azabache para proceder a tomar de la cintura a la chica y acercarse a darle un apasionado beso

—¿por qué no continuamos esto en un lugar más íntimo?—

—me parece bien querido— después de aquellas palabras dichas por la chica, seo min no aguanto y procedió a darle otro beso a la chica; beso que hubiera sido más profundo, sino fuera por una belleza que le toco la espalda al azabache

—¿qué quieres? ¡No ves que esto...!—un golpe fue propinado en la nariz del azabache, tumbándolo en el suelo y derramando mucha sangre por aquella nariz

—¡o por dios!— grita la chica

—¿j-jimin?—

—¡eres un idiota!—...—no vuelvas a acercarte más a mí—

—me estás haciendo un favor a mí— dice enfurecido —¿Crees que alguien llegara a quererte?, cuando eres malditamente estúpido, ni siquiera dejas que te besen, no eres una maldita monja jimin, entiende—

Jimin estaba a punto de llorar por aquellas palabras, pero no le iba a mostrar su lado débil a ese bastardo, lo único que hizo fue largarse de ese lugar, con el corazón roto y su alma destrozada. Por muy desesperado que este jimin por conseguir a alguien que lo quiera no se iba a rebajar para que lo humillen, eso ¡jamás! Jimin puede tener el corazón más lindo y tierno, pero cuando se enoja no hay quien lo pare; en este momento estaba en un mar de sentimientos encontrados. Llamo a su único y verdadero amigo, un omega con una autoestima por los cielos y unos hermosos labios regordetes, sin duda otra belleza tan bello como jimin, era el único amigo que el señor Park le permitía tener a jimin, ya que pertenecían al mismo estatus social.

—j-jin ¿e-estás ocupado esta noche?— preguntaba el pequeño con su voz tembloroso a punto de llorar.

—¿qué pasa Jimin?—

—solo... te necesito, ¿tienes tiempo para hablar?—

—claro, pequeño, puedes hablar conmigo en cualquier momento—...—¿te parece si nos vemos en el bar que queda cerca de tu Universidad?—

—me parece bien, te veo allá—

Y así jimin termino la llamada para dirigirse a ese dichoso bar.

Una vez estando allí se sentó en la mesa y pidió una cerveza, nunca había tomado en su vida, no sabía cuanta es su tolerancia al alcohol, pero eso ahora no importa lo que más quería era emborracharse.

Empezó a tomar hasta que un delicioso olor le llamo la atención, olía a seguridad y amor... ¡Ja! Como si fuera posible que la seguridad y el amor tuvieran un olor, no lo tenían, sin embargo, eso era lo que le hacía sentir; no dudo en pararse de su silla y seguir aquel agradable olor que lo llevó a la presencia de un hermoso hombre vestido de traje, llevaba todas las miradas de las personas que lo rodeaban, pero ninguna era capas de acercársele, ya que emitía un aura de "háblame y te mato" jimin se hubiera retirado de ahí si no fuera porque sus pies empezaron a dirigirse hacia aquel hombre como si fuera un imán y jimin el único metal que se encontraba allí.

Una vez estando en brazos de aquel hombre sus piernas empezaron a temblar como si se hubiera presentado su celo en aquel momento quería ser tocado por aquel hombre, lo único que pudo salir de su boca fue...

-señor usted huele muy bien- y como si fuera otra persona lo abrazo por el cuello para susurrarle unas palabras; si Jimin no hubiera estado casi inconsciente en ese momento estaba seguro de que se hubiera desmayado de la vergüenza por aquellas palabras

"Por favor ámame" fue lo único que escucho aquel chico en su oído haciendo que pierda el control y dejara salir su lobo
















-¡bien vamos a amarte, príncipe!!♡-





















UNA NOCHE PARA RECORDAR ♡KOOKMIN♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora