Iba entrando a la Universidad. El sábado desperté en mi cama, no hablé ni con Niall ni Louis. Tal vez todo fue un espantoso y a la vez hermoso sueño. No podía concentrarme y entré torpemente al salón y me senté…
-Si no es la mejor skater del Mundo –se acercó con una sonrisa Justin.-...
- Hola –dije y saqué el cuaderno de mi mochila mientras metía el skate entre la pared y mi asiento.-
- ¿Sucede algo? –preguntó.-
- Nada, solo que no dormí lo suficiente –me quejé y tiré los brazos sobre mi mesa- puto estudio.-
- Hablamos después, viene el profe –me senté bien.-
Sin duda escribir me aburría y el profesor hablando como perico no me ayudaba. El solo hecho de pensar en Louis me hacía estremecer, eso no fue un sueño y lo peor es que se que cuando se le mete algo en la cabeza, por mas loco que sea, lo hace. Nos dejaron salir y me fui a caminar por el campus, tenía que relajar aunque sea un poco los músculos. Le envié un mensaje a Perrie y quedamos de juntarnos en mi casa, necesitaba hablar con mi amiga así que el skate con los chicos quedará para otro día. Miré hacia un lado y Louis venía acercándose, el miedo me invadió y salí corriendo. No podía, simplemente no podía. Escaparía de él, aunque sabía muy bien que era una cobarde, una completa tonta. No saldría al campus, por ningún motivo. El día terminó y me fui en mi patineta a casa, necesitaba relajarme y respirar. Samuel estaba en la universidad aun pero algo debía haber para comer.
Entré a casa y tiré mi mochila al sillón, rebusqué en el refrigerador. Solo había una sopa instantánea, ¿qué importa? No prepararé nada. Puse el hervidor y esperé a que el agua estuviera lista, la puse en el recipiente y comencé a beber. El de verdad me amaba, pero me dañó. El de verdad me ama, pero no nos merecemos.
Demoré mucho en tomarme esa tonta sopa que ni siquiera tenía un buen sabor cuando escuché la puerta, me levanté y vi a mi amiga. No pude evitarlo y la abracé muy fuerte…
-Wow –me abrazó- tienes mucho que contarme ¿cierto?.-
- No tienes ni idea.-
- Desde que nos conocemos, puedo tener varias ideas.-
- Pasa –la dejé entrar y nos sentamos en el sillón.-
- Es sobre Louis ¿cierto?.-
- Si… ¿cómo…?.-
- Zayn me dijo algo sobre skate, pero solo me dijo que tu estabas ahí, Louis te vió y bla bla bla.-
- ¿Crees que es posible superar lo de Louis? –le dije sincera.-
- Si de verdad se aman, si.-
- Hablamos el viernes… en realidad, no gritamos todo.-
- ¿Se gritaron? –me miró preocupada.-
- Todo lo que habíamos sentido con esto de estar separado pero luego nos calmamos, dijo que me amaba –sonreí un poco- lo sentí tan sincero. Pero hoy lo vi en la universidad y salí corriendo.-
- Explícame ________ ¿qué quieres? Y por favor no me mientas, sé sincera y dime las cosas como son ¿Lo amas? –asentí con la cabeza- ¿Quieres estar con el? –asentí nuevamente- ¿Lo vas a hacer? –negué- ¡Pero qué te pasa! –gritó casi histérica.-
- Yo… no lo sé –pensé un momento- le quiero pero recuerdo todo lo que pasó y deseo alejarme, después recuerdo lo que le hice y me siento indigna de estar con él pero luego pienso en esa chica y que nada hubiera ocurrido si ella no hubiera hecho nada ¡Es un enredo! –tomé aire- mi hermano dice que hice algo malo, pero mis amigos sienten que él es el malo.-
- ¿Qué importa lo que ellos crean? Bueno… excepto yo, claro –levantó los brazos- ¡es tu cabeza y tu corazón! ¡Tu orgullo y tus sentimientos los que luchan!.-
- Siento que si llegáramos a volver, todo sería un círculo vicioso –puse una mano sobre mi frente- creo que dejaré que esto pase.-
- ¿Qué pase? Lo intentaste una vez y mírate.-
- Pero ahora estamos cerca, verá que puede mirarme en la universidad y no sentir nada. Pasará. Antes siempre estaba la incógnita de que hacía el otro, ahora no.-
- ¿Saldrás con otros chicos? ¿Eso significa?.-
- No lo sé… tal vez… .-
- ¡Dios! –gritó y se acostó en el sofá.-
- Sé que soy pesada pero… -y se escuchó el sonido de la puerta.-
- Eh… Hola –dijo Samuel y pasó a la cocina- ¿No hay nada otra vez?.-
- Pudiste haberme dado dinero para que pasara al super –dije.-
- Mañana recuérdame hacerlo, no quiero ir yo –suspiró y sacó una gaseosa de su mochila.-
- ¿Y tu novia? –le pregunté.-
- Está enferma –se tiró al sillón justo a mi lado- se enfermó del estómago por comer mucho ayer –resopló.-
- ¿La fuiste a cuidar? –preguntó Perrie.-
- No tuve tiempo, salí de la universidad y me llaman que me corrieron el turno para trabajar. Ahora podré respirar tranquilo.-
- ¿Pedimos algo para comer? –le pregunto.-
- Nada de eso –dijo Perrie- algo tienen que tener y les preparo algo rico ¿qué dicen?.-
- Liiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinda –le dije y comenzó a reír, caminó a la cocina y empezó a abrir los estantes- ¿segura que debe haber algo?.-
- No intentes llevarme la contraria, encontraré algo.-
- Está bien –Samuel se pasó y fue a su cuarto- iré a buscar un cuadernos y lápiz, tengo tarea y si no la llevo mañana tendré que hacer un estúpido proyecto.-
- Deja de reclamar y ve a buscarlo.-
Saqué el cuaderno de mi mochila y fue a mi cuarto por una regla y más lápices, necesitaba hacer la tonta tarea, prefiero esto a tener que hacer una gran investigación. Me senté cerca de la mesa donde Perrie cocinaba y me entretenía mientras escribía. Era genial tener a alguien como ella cerca, y que te cocinara, sin duda es la mejor amiga del mundo; y la única que tengo.
-Quién diría que podrías hacer tanto con tan poco –dijo Samuel con la boca llena, le pegué un codazo.-
- Se te ve la comida retrasado.-
- A ti también hermanita –y me devolvió el codazo.-
- Dejen de golpearse –sonrió Perrie mientras dejaba su plato en al lavaplatos.-
- Yo lavaré, deja ahí-le dije mientras tomaba jugo.-
- No hay problema… .-
- Que dejes ahí respondí –la miré- no quieres que me enoje.-
- Ok, ok, como quieras.-
- Eres toda una mala hermanita –dijo Samu, riendo con la boca llena.-
