15 de noviembre.
Han pasado dos semanas desde la salida al parque de diversiones y todo es muy confuso desde ese día. Acciones como reposar tu brazo mi. La estúpida sonrisa de tu rostro o el simple hecho de que estés cerca mío y me ponga nervioso me irrita. Pero todo eso no se compara con el odio y rabia que le tengo a ese cargador con patas en estos momentos.
—Denki ya cállate— dices conteniendo tu risa.
—¿como le hace un ratón con una metralleta?, ratatatatata—
¿Es enserio?, ¿!!!ES ENSERIO?!!!, estas ahogandote de por ese puto chiste al punto de tener la cara morada. La vena de mi frente crece considerablemente al ver con la rara eléctrica se recarga sobre tu hombro.
¿Porque dejas que se recargue?, ¿quién le dio ese derecho?. Qué se aleje, shu shu.
"¿porque debería hacerlo?, es su amigo". Otra vez aquella voz.
—muere— susurro bajo. Recargando mi frente sobre el escritorio, dando ligeros golpes sobre ella. Inhalando y exhalando repetidas veces, en un intento desesperado por calmarme, no puedo explotarle la cara al imbécil de Kaminari en plena clase del profesor Aizawa. Con eso en mente logró poner mi atención a lo que queda de clase.
—Bakugo, ¿nos vamos?— tocas mi hombro mientras guardo mis cosas. De nuevo esa sensación eléctrica recorre mi cuerpo, pero no es molesta y eso es lo que me estresa. El hecho de no saber porque cada toque tuyo me gusta tanto.
—camina idiota— gruñó bajo. Salimos del salón vacío con pasos tranquilos.
Los pasillos están solos. Hay un silencio bastante tranquilo.
—Bakugo...— pronuncias quedito, pero lo suficiente fuerte como para escucharte. Volteando y teniendo mi atención en ti. —¿que quieres pelo de mierda—.
—¿estarás ocupado mañana?— preguntas dudoso.
—habla claro Kirishima— gruñó irritado.
—quiero estar contigo...— dices en un murmullo bajo y mi cabeza explota. "estar conmigo" "estar conmigo". Se repite como grabadora en mi cerebro y por más que quiera callarlo no se puede.
—¿q-que?— maldita lengua habla bien.
—es-estudiar contigo, s-si eso, quiero estudiar contigo— rascas tu mejilla con cierto nerviosismo. —es que eh tenido problemas con inglés y matemáticas de nuevo—.
—falta un mes para los exámenes de invierno— digo sin mas, dándole a entender que es muy pronto para darle asesorías.
—lo sé, es solo que no me quiero atrasar—.
—pídele ayuda a la cola de caballo— las palabras salen solas sin pensarlo. Algo dentro de mi quiere decirle que si pero no puedo.
—pero Bakugo... Es que yo, es que— me carga cuando deja las frases a medias.
—¡¡"es que, ¿que?"Idiota!!— paro en seco, tomando tu camisa, quedando a una distancia algo corta.
—es que quiero estar contigo— mencionas bajo casi susurrando lo último. Mi estómago da un vuelco, mi respiración se detiene y el calor amenaza con subir a mi cara. No entiendo como esas simples palabras provocan tantas cosas en mi en solo segundos.
—¿de que hablas?— pronunció lento. Teniendo sumo cuidado de no trabar mi lengua.
—s-si, es que la verdad me gusta pasar tiempo contigo, pero la única manera de hacerlo es estudiando— ríes nervioso, en un intento de relajar tu cuerpo.
Mi mano refuerza su agarre en tu camisa, acercándonos un poco más. Tratando de procesar lo último.
"quiere pasar tiempo conmigo" aquella frase inunda mi cabeza, dejándola vacía y llena. Haciendo todo tan malditamente confuso.
—cloro que si no quieres lo entiendo— sonríes incómodo, volteando tu rostro. Evadiendo mi mirada.
Suspiro y suelto tu camisa. Regresó mi vista al frente y camino.
—más te vale que no sea un desperdicio de mi tiempo o te mataré— mencionó con un tono de fastidio, mirándote por detrás de mí hombro. Tu sonrisa se agranda y pasas tu brazo sobre mi.
—verás que no blasty— vuelves a sonreír achicando tus ojos.
—como sea— digo hastiado. Bajando el rostro en un intento de ocultar mi sonrisa en lo que queda del camino a los dormitorios.
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recuerdos al viento
Fanfictionkatsuki Bakugo, un chico rudo, exploxivo, mal hablado y terco a más no poder, es amigo de Eijiro kirishima un chico dulce y de sonrisa hermosa. ambos empiezan a tener sentimientos el uno por el otro y bakugo al no saber expresarce decide escribir to...