.•°•.|CLXI. El poder celestial|.•°•.

845 141 250
                                    

— Digo que jamás elegí a esos nueve principitos al azar . . . Digo que había una bruja en el reino Bang, Lee, Hwang, Han, Lix, Seung, dos en el reino Yang, y un brujo en los reinos Kim y Seo. ¿Satisfecha? — respondió como si nada. Como si no fuese una gran noticia. — MyungJun se enamoró de una bruja de aire en el reino Seung, y su hija se casó con el heredero al trono de ese mismo reino, y algo parecido pasó con los demás, a excepción de Jeongin, quien sí es hijo de una bruja y un humano, pero fue adoptado por los reyes. Y admito que por un momento me asusté al darme cuenta de que ninguna bruja se había infiltrado en la realeza del reino Yang, pero cuando noté la brujería en su interior lo supe . . . Ellos estaban destinados a encontrarse y a pasar por todo eso.

— ¿Estás diciendo que los reyes de la tierra son de los míos? ¿Pero tú igual los usaste? — cuestionó la bruja totalmente sofocada con la información.

— Ellos nunca fueron personas normales. No te diste cuenta porque cubrí su brujería con hechicería en cuanto nacieron. — declaró el menor con tranquilidad y cierto orgullo. — En especial Seungmin es único en todo el universo. El único que comparte sangre de humanos, brujas, de hechiceros y del poder estrella. El más fuerte, tal y como tú me habías dicho.

— El dueño del poder celestial . . .

SeokJin asintió. Ryujin no entendía lo que estaba diciendo, y Jisung sumido en sus pensamientos no supo qué decir. Rosé, sin embargo, al igual que aturdida, se dió cuenta que jamás llegaría el momento de ganarle al rey. Él no iba a liberarla por nada del mundo, pero guardaba un poco de fe en JungKook.

Ahora con más ira que nunca, no quiso dejar que él se llevara al muchacho mitad brujo.

— No dejaré que lo toques. — soltó de repente. Jin enarco una ceja ante lo que había escuchado.

— ¿Qué?

— Como oíste. No dejaré que sigas metiéndote en lo que no te importa. Los hechiceros siempre arruinan todo, y como la única bruja pura que existe, no dejaré que los toques. — manifestó con decisión, sin esperar que el mayor comenzará a reír, llevando furtivamente una mano al hombro de Jisung.

— ¿Qué? ¿Cómo planeas detenerme? Habla, te escucho. ¿Cuál es tu plan? — dijo sarcástico. — Has estado encerrada cientos de años. Y aunque yo muera, alguien más tomará mi lugar, y no te dejará libre. Eres una bruja, Rosé. Guardas una esperanza inválida. — tras ello ladeó su cabeza y le dedicó una sonrisa de labios burlona. — ¿Sabes por qué JungKook jamás cumpliría su promesa? . . . Porque pronto se dará cuenta de que ellos son brujos, y nuestra batalla de tantos siglos no ha acabado aún. Sea lo que sea que pienses, él sigue siendo hechicero, y nuestra raza ha pasado por mucho para convertirnos en quienes somos ahora: los líderes de éste mundo. Y pase lo que pase, ninguno de nosotros renunciará a eso por justicia. Es estúpido.

— Nada es imposible. Hasta un simple libro puede traer a alguien de la muerte. Y ahora que sé que no estoy sola, no me rendiré. Sabes que si las brujas y brujos de fuego, aire, agua y tierra se unen, podremos regresar el tiempo y-

— Me importa una reverenda mierda lo que quieras hacer. — la cortó de inmediato, con una expresión tensionada. — Ahora lo único que me importa es traer a JungKook de vuelta y acabar de una vez por todas ésta larga historia.

— Sabes que ésta historia no acabará.

— Sé que puedo hacer algo, a diferencia de ti.

— Sé que puedo hacer algo, a diferencia de ti

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
S T R A Y : 𝒌𝒊𝒏𝒈𝒔 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora