Compartiendo Piso {COMPLETADA}

Capitulo 4

Mi idea era claramente un no, pero al menos iba para no hacer el feo, después pondría cualquier excusa tonta, como que el precio es muy caro o que a lo mejor no estaba lista para dar esa paso, no se, lo que se me ocurriese.

¿Vivir a solas con un chico? No estaba lista y menos con las descripciones que me hacia Anna de él.

Bratt estaciono el coche en frente de un viejo bloque de pisos en una calle del centro de Nueva York. Había estado viviendo desde que nací en Nueva York, había pasado como un millón de veces por esta calle, pero nunca me fije en ese pequeño bloque.

Tenía un aspecto acogedor, tan solo tenía 3 pisos, la fachada era de un color salmón, los balcones eran blancos, me llamo la atención un balcón, el segundo. Estaba decorado con flores de colores, pequeñas y grandes, seguro que detrás de ese balcón había una señora mayor, de esas que hacen pasteles. En mi interior me reí de mi misma y de mis pensamientos. La puerta principal era de madera oscura, por su aspecto parecía muy antigua.

Dentro, en el portal, a la izquierda había un pequeño ascensor, diría yo que demasiado antiguo, con un cartel de averiado, a la derecha estaban las escaleras. Subimos hasta el último piso.

A pesar de que todo el bloque era muy antiguo, la puerta frente a la que estábamos era diferente a las demás, digamos que más moderna. Al ver el interior del piso me quede muy sorprendida.

Cuando una persona vive en un bloque así te imaginas que el interior de su piso sea igual, pero para mi sorpresa en el piso de Bratt no era así. Estaba decorado bastante a la moda. Era contradictorio un piso lujoso a la moda en un bloque pequeño y antiguo, pero ese choque que lo hacía extraño, me gustaba.

Mientras observaba aquel magnifico lugar, escuche una voz desconocida detrás de mí, al girarme para ver de donde provenía aquella voz, sentí algo en mi estomago, su mirada estaba clavada en mi.

Los nervios se apoderaban de mi cuerpo, me imagine viviendo aquí, los dos solos, ¿el estaría siempre así, sin camiseta? No pude evitar morderme el labio al mirarlo. Por una parte desearía vivir aquí, simplemente por velo cada día así, pero por otra parte no, me moriría de la vergüenza.

-Alex te presento a Brittany ella es la chica de la que te hablé - Por fin alguien hablaba, me estaba poniendo muy nerviosa.

-Vaya Bratt no me dijiste que era tan hermosa, un gusto - Su sonrisa me estaba matando, ¿cómo podía ser tan sexy?

-Lo mismo digo.

En este momento estaba dudando si mudarme aquí o no. El piso tenía muchos puntos a favor, estaba en el centro cerca de mi trabajo, el precio del alquiler no era demasiado alto, el piso estaba muy bien, pero el dueño estaba mejor.

Sacudí mi mente apartando esos pensamientos de mi cabeza, si les digo a mis padres que me mudo con un chico me matarían. ¿Por lo de mi timidez? Creo que con el tiempo podría arreglarse.

-Brittany está un poco dudosa aún, no sabe lo que hacer.

-La entiendo, para ella ahora mismo soy un desconocido. ¿Por qué no comemos juntos, solos?

-Emm...

Que digo ahora, buf no pierdo nada por conocerlo - Pensé

-Está bien.

-Bueno chicos pasarlo bien, nos vemos.

Cuando Bratt y Anna salieron por la puerta, volví mi mirada hacia Alex, el estaba observándome. Si seguía así iba a matarme, sus ojos miel estaban siendo mi perdición.

-Brittany espérame aquí, me visto y nos vamos guapa.

Mis mejillas se tornaron de un color rojizo y no me salía la voz, me limite a asentir. Observe otra vez aquel salón, había varias fotos de Alex y Bratt, pero una me llamo la atención, era la de un niño junto a Alex durmiendo, aquel pequeño era bastante parecido a él.