Una vez llegó a la biblioteca, dejó su mochila y su chaqueta en un asiento y fue a buscar libros que la pudiesen interesar.
Estaba por la sección de "Criaturas mitológicas" cuando Hellen, la bibliotecaria, se acercó. Se conocían desde hace años, así que Hellen conocía perfectamente los gustos e intenciones de la chica.
- Ten. Un compañero me ha traído este libro, tal vez te interese...- susurró Hellen a su oído. -
Laura tomó el libro y leyó el título: "Cuentos populares y todo sobre ellos". La ilusión se reflejaba en el brillo de sus ojos azules.
- Gracias Hellen - dijo, y sonrió ampliamente. -Después, fue directa a su mesa para comenzar a leer. El libro era enorme, pero a Laura no le importaba absolutamente nada. Pensaba pasar toda la tarde leyéndolo.
Antes de abrir el libro, notó que alguien la observaba, así que miró disimuladamente alrededor. Un chico con pelo rubio y ojos verdes la miraba desde otra de las mesas. Cuando establecieron contacto visual, el chico apartó la vista con aire de timidez. Acto seguido, este se levantó de su mesa y se acercó a Laura.
- ¿Puedo sentarme? - y señaló la silla situada al lado de Laura. -
Ella se sonrojó y contestó:
- Oh...emmm... sí...por supuesto. -
El chico dejó sus cosas y se sentó junto a ella. No se conocían, pero ambos se sintieron cómodos. El chico prosiguió:
- Te ví al salir de clase, no me caen nada bien esos chicos... -.
- Bueno, una vez te acostumbras deja de molestar tanto - contestó Laura aún sonriendo -.
- He de decir que te he seguido hasta aquí a propósito. Escuché la conversación. - dijo el chico mientras observaba curioso el libro que Laura sostenía -
- Tú también crees que es una tontería, ¿verdad? - se desilusionó -
- Todo lo contrario, jajajaj, yo también llevo un tiempo investigando sobre esa historia. Me encanta pensar que existen criaturas mágicas en algún lugar que desconocemos. -
- ¡Genial! - Laura se sobresaltó, llamando la atención de toda la biblioteca - Oye... aún no me has dicho tu nombre... -
- Me llamo Alan, encantado - ofreció su mano a Laura -
- Bonito nombre, yo me llamo Laura - y aceptó el apretón de manos. -
Alan le propuso a Laura leer juntos el libro que aún seguía intacto sobre la mesa.Se acababan de conocer y, aunque no lo supiesen, era el inicio de una gran amistad.
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Otra realidad
FantasyLaura es una adolescente como cualquier otra, tal vez no tan similar. Creció junto a historias de animales fantásticos y junto a la famosa serie de Pokémon y le encantaba imaginar un distinto mundo donde podías tener "mascotas" tantas como quisieras...