Stiles gimió ante las fuertes embestidas — sí— empujando su trasero contra las caderas del alfa, mordiendo sus labios, rogando en silencio por más.
Su cuerpo convulsionando ante los mejores orgasmos de su vida.
Derek definitivamente era el mejor, claro no tenía con quien más compararlo.
— Cuando acabe contigo, lloraras y te subirás a mi regazo y pedirás más, vas a querer esto toda la noche, vas a rogar que te llene una y otra vez, hasta que tu agujero reviente— Stiles reprimió el gemido que amenazaba por salir de su garganta, no le daría gusto a este arrogante alfa.
— L-lo dudo— dijo Stiles resoplando como restándole importancia. Derek detuvo sus embistes ante el impacto que las palabras de Stiles tuvieron en él, miró al castaño durante tres largos segundos, que realmente era mucho cuando tenía su polla enterrada en los confines del muchacho. — ¿qué diablos te detiene?
La interrogante de Stiles, fue la equivocada, volvió su cabeza hacia Derek y su cuerpo se congeló ante la sonrisa depredadora que llenaba aquel salvaje rostro. Derek tomó el cuello de Stiles en un fuerte agarre, sus garras creando pequeños rasguños en el níveo cuello, obligándolo a enterrar la cara en la almohada.
Lo golpeó.
Duro.
Sin contemplación, no se detuvo, no podía, no sabiendo cuanto excitaba eso a su compañero. Derek gruño "su compañero", Derek quería poner a sus hijos dentro de aquel hombre, un hombre sin miedo a desafiar a su alfa, quería que sus hijos tuvieran esa irreverente personalidad, ni siquiera le importaba si alguno de ellos, naciera con aquella pálida tez o lleno de lunares o con esa falta de filtro cerebro-boca.
En su nirvana de placer escuchó a Stiles gemir debajo de él, pudo sentir la polla del castaño crecer bajo su agarre y supo que el orgasmo del niño estaba cerca, entonces su propio orgasmo lo alcanzó fuerte, el Dire dentro de él estaba cerca, podía sentir el inminente cambio, el lobo estaba por liberarse, tomó todo su autocontrol mantener a raya a la bestia, este queriendo reclamar al humano omega, Derek se corrió dos veces seguidas, sus bolas apretándose cuando su cuerpo se tensó, algo golpeo su plexo solar cuando por fin se liberó en la profunda calidez del castaño.
— Eso fue... no tengo palabras para describirlo— jadeó Stiles
— No hemos terminado— Derek se incorporó en sus temblorosas manos.
***
Stiles apenas podía sentarse en la parte trasera de la limusina, su culo estaba incomodo por decir lo menos. Odiaba al hombre frente a él, aquel magro cuerpo enfundado en un traje de tres piezas, acentuaba el atractivo del werewolf, quien estaba sentado con el tobillo cruzado sobre la rodilla y una estúpida y satisfecha sonrisa adornaba el cincelado rostro. Stiles lo miró de reojo, avergonzado, jugó con sus manos, evitando recordar lo que era tener a ese hombre enterrado en su interior.
Derek sonrió cuando la excitación del humano omega inundó el interior del coche, se limitó a observar en silencio al niño, como el depredador a la presa. Stiles miró por la ventana, admirando el camino a su nuevo hogar, luego con cautela observo a Derek, su nuevo compañero y amo temporal y luego regreso su vista a la carretera.
La mente de Stiles trabajaba a mil por hora, tendrían que esperar un par de días para saber si toda aquella faena había producido un heredero o no. Stiles rogaba porque no fuese así, no quería someterse a exámenes médicos y definitivamente no quería estar embarazado, pero si lo estaba, entonces ¿estaba preparado para dejar a su hijo?
Lo había visto pasar antes. En ocasiones los humanos omegas ya fuesen hombres o mujeres que habían dado a luz pequeños alfas, trataban de luchar en los tribunales por sus derechos parentales, solo para terminar siendo exiliados a sabrá la vida donde. Los hombres y mujeres que llevaban a niños shifters no tenían ningún derecho sobre ellos a menos que el alfa dijera lo contrario o en dado caso se enlazaran con las madres.
Stiles nunca pensó en tener hijos, pero ante la situación aún no estaba seguro. Miró a Derek, pero esta vez le sostuvo la mirada, solo la apartó cuando un pesado pulso se atenazó en su pecho y la excitación lo embriago.
Era ridículo. Él era un hombre adulto, tenia que aprender a controlar su libido, no se dejaría llevar por la lujuria, él podía controlarlo.
Stiles se preguntó, si todo aquello que sentía se debía a su reciente apareamiento, todo lo que sabia de aquel tirón era que iniciaría un periodo de celo que lo calentaría y molestaría por el hombre con el que se había acoplado.
Stiles no se sentía diferente ahora como antes de beber de la sangre de Derek, tal vez el tirón de apareamiento no era tan fuerte como había pensado que sería. Se enderezó cuando se dio cuenta de que se dirigían al bosque.
¿Dónde vivía Derek exactamente?
— Ya casi estamos en casa— dijo Derek, prestando por primera vez en hora y media toda su atención a Stiles.
Stiles tragó saliva.
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LOS BEBÉS DEL ALFA
FanfictionHACE UNOS DÍAS EN MIS GRUPOS DE STEREK DE FACEBOOK SUBI UN MINI RELATO, QUE SOLO SERÍA ESO UN MINI RELATO, PERO LA ACEPTACIÓN HIZO QUE REALIZARA DOS VERSIONES, DE DICHO ESCRITO. UNA VERSIÓN EDULCORADA CON LA COLABORACIÓN ESPECIAL DE LA USUARIA DE FA...