LA MARCA DEL ALFA 11

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NOTA: ESTOS DÍAS DE ASUETO HE ADELANTADO CAPITULOS QUE SUBIRE ESTA SEMANA...



*** 

Días después del chequeo médico, Stiles ojeaba con detenimiento el álbum de fotos de los humanos que se ofrecieron a llevar a los bebés de algunos miembros de la manada, tanto hombres como mujeres lucían enormes vientres y semblantes felices, de reojo miró al alfa de la manada.

El lobo de Derek se removió inquieto cuando sintió la ambarina mirada de su compañero. Stiles mordió su labio, señal de nerviosismo que el lobo detecto.

— Derek...— susurró el castaño.

— ¿Sí?

— ¿Crees...? Si sobrevivo al parto...— Derek gruñó por lo bajo, el humano sobreviviría.

— Lo harás, los médicos dicen que tu salud es buena a pesar de tu condición, si fueses débil, no estuvieses aquí.

— Esta bien, solo lo digo en caso que algo ocurra ¿crees que pueda estar cercas de ellos? — tragó saliva cuando vio el entrecejo de Derek arrugado— quiero decir, no como padre, sé que no es así como funciona, pero tal vez incluso puedan verme como en tío o un pariente lejano, podría verlos en su cumpleaños o en navidad...

— Detente...— Stiles tragó duro— serán mis hijos. Tu archivo dice que estas en deuda con la sociedad por deshonrar a tu manada de crianza.

— Esas son tonterías.

— No te creo y aunque fuera verdad lo que dices, todos saben que los humanos y las reglas de la manada no se mezclan.

— Lo sé.

— Serán mis hijos, una vez nazcan tu no cuadras en la foto.

— Si, está claro— Stiles se recordó así mismo el premio principal. Derek todavía le estaba ofreciendo pagarle mucho dinero. El pensamiento en realidad lo puso un poco triste. No le ayudaba a superar el dolor que se acumulaba en su interior de la manera que él esperaba.

— Vamos— dijo Derek sacando a Stiles de sus pensamientos, la voz del alfa era suave— te llevaré de caza y mañana iremos a la tienda por ropa.

Stiles apenas escuchó esa última parte. Lo único que comprendió fue que Derek quería llevarlo a la caza ceremonial que realizaban los alfas, y toda su atención y concentración se centraron en cuánto quería hacer eso.

"El estúpido calor de apareamiento"

A pesar de que el castaño acababa de recibir una dura bofetada en la cara, figurativamente, no pudo evitar sentir la oleada de calor y el deseo que lo hacían ansiar ser cazado como un animal y luego jodido en el bosque. El lobo de Derek aulló en éxtasis cuando el aroma a lujuria llego a su nariz.

Esa noche mientras se preparaban para el ritual de la luna, Derek luchaba por mantener al lobo bajo control, su alma dividida en dos imploraba por liberar al lobo, pero también a la bestia, Derek y el lobo, eran uno, pero Derek y la bestia irracional luchaban por el control, Derek era la razón, el autocontrol, la bestia sin forma era instinto primitivo e irracionalidad.

Y esa misma lucha hacían que Derek, el hombre, empezara a preocuparse por su compañero temporal.

Como animal enjaulado, la consciencia del alfa hizo mella en él, Derek no sabía cuál demonio era su problema.

¿Por qué debería sentirse culpable hacia un humano, un hombre que solo estaba aquí para dar a luz a sus hijos y nada más?

No debería sentirse culpable en absoluto. Stiles estaba siendo pagado generosamente por su servicio.

Había humanos que trabajaban en situaciones mucho más peligrosas que la que el moreno alfa le pagaba a Stiles.

Podía enumerarlos.

Mineros de carbón

buzos de aguas profundas

hombres que trabajaban en climas árticos.

Pensó.

Ningún alfa quería acercarse a alguien que pudiera morir con sus hijos. Era demasiado complicado.

El alfa apenas recordaba a su madre y a su padre omega, pero sabía que este último había sufrido la perdida de su compañera. Su Soulmate.

Un beta tocó la puerta, era la hora.

La luna brilló esplendida.

El Dire Wolf bajó las escaleras de caracol, los sirvientes de la mansión hicieron un gesto de respeto a su alfa. Derek iba desnudo del torso, su fuerte y musculado torso expuesto, solo vestía unos jeans desgastados, al llegar al altar de la luna, Stiles estaba de rodillas, con un traje vaporoso blanco, la ninfa sacerdotisa miró al alfa y este asintiendo aulló a la luna, sus músculos crecieron todavía más si eso era posible.

Stiles se puso de pie, con el cuello ladeado en muestra de respeto.

La ninfa se adentro al corazón del bosque seguida por la pareja. Derek tomó la barbilla de Stiles y este último se estremeció al ver a el lobo cerca de la superficie.

— Voy a cazar solo esta noche, —dijo Derek áspero y ronroneante, llevando a su nuevo compañero a los árboles. —La mayoría de los alfas mantienen sus hogares en áreas de caza principales, pero es tierra protegida. Los cazadores furtivos no tienen permitido cazar aquí, aunque no se mantiene cercado. De lo contrario, los animales no podrían entrar.

— Tiene sentido.

— El oso ocasional sale por aquí, pero es poco probable que alguna vez veas uno. De cualquier manera, me quedaré lo suficientemente cerca de ti como para poder escucharte si tienes algún problema. Por esa razón, aunque muchos shifters viven en este territorio, es mejor que no te acerques a ningún lobo o zorro que veas, por si acaso son animales reales y no parte de mi manada.

Stiles asintió de nuevo, esta vez algo más que una expresión de inquietud en su rostro.

— Trataré de recordar eso.

Entraron en lo profundo del bosque. Derek se mantuvo en los senderos fáciles que los cachorros tendían a caminar cuando estaban fuera por el bien del humano. Él no pudo evitar sonreír.

— Dije que estabas a salvo conmigo. Lo dije en serio.

— Lo sé.

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⏰ Last updated: Apr 05, 2021 ⏰

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LOS BEBÉS DEL ALFAWhere stories live. Discover now