Capítulo 7

438 17 12
                                    

Saúl pov:
Los minutos se hacían cada vez más lentos, tenía tanto miedo... yo sin Altagracia, sin mi doña, estaría perdido, ya casi no tendría motivos para vivir. De tan solo perderla un nudo se apodera de toda mi garganta, estaba en cirugía, no me dejaban verla, estaba tan desesperado. Me dijeron que si todo sale bien, luego de la cirugía podría verla... pero ese era el problema: que todo salga bien, no podía perderla, no lo iba a permitir. Regina había llegado hace un rato junto con Felipe e Isabella. Todos estábamos tan angustiados, bueno, casi todos, se notaba claramente que Felipe estaba ahí por compromiso... si mi doña estuviera aquí estoy seguro que lo insultaría y luego lo hecharía, me sale una pequeña risa de tan solo imaginarlo, pero esa risa se va pronto cuando vuelvo a la realidad. Luego de horas y horas de espera, de horas en las que solo nos decían que Altagracia estaba en un "pronóstico reservado", la enfermera por fin habla
-¿Familiares de la paciente Sandoval?- Regina, Isabella y yo nos paramos inmediatamente- ¿Cómo está Altagracia, enfermera?- digo desesperado- La paciente está fuera de peligro, aunque costó muchísimo y perdió mucha sangre, todo está bien y la paciente está fuera de riesgo. En este momento esta sedada pero en cuanto el efecto de la anestesia se vaya, ella despertará- Al escuchar las palabras "fuera de peligro" sentí que mi alma volvió a mi cuerpo y pude respirar profundamente, creo que no hay palabras para describir lo felíz que estaba, sin Altagracia mi vida ya no tenía sentido. Necesitaba verla así que inmediatamente le dije a la doctora- Doctora ¿Ya podemos ir a verla?- Por el momento no, la paciente necesita descansar un par de días, sufrió un evento muy traumático y necesita estar tranquila- Por favor doctora- insistí- no serán más que unos minutos- No insista señor, lo siento pero no puedo permitirlo. Por el momento pueden ir a su casa y descansar. Eso hicieron Regina, Felipe e Isabella, pero yo ni me iba a ir de aquí, no sin antes no ver a mi doña. Esperé a que nadie esté en el pasillo donde estaba la habitación de Altagracia para luego escabullirme y entrar para que nadie me viera, costó mucho ya que todo el tiempo iban y venían médicos, pero por fin pude y apenas entré, la ví;

 Esperé a que nadie esté en el pasillo donde estaba la habitación de Altagracia para luego escabullirme y entrar para que nadie me viera, costó mucho ya que todo el tiempo iban y venían médicos, pero por fin pude y apenas entré, la ví;

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me acerqué y empecé a acariciarla, me dolía tanto verla así, tenía tanta rabia dentro de mí, pero me calmaba al saber que iba a estar bien. Cómo me gustaría que esto me esté pasando a mí y no a ella, ella no se merece nada de ella... después de todo lo que sufrió, lo único que quiero es que sea felíz. Le doy un suave beso en su frente y luego le susurro al oído; -Te amo infinitamente, mi amor... no te imaginas cuánto me alegra que estés bien, te prometo que me quedaré aquí cuidándote todas las noches todas las noches, te amo, mi doña- me quedo haciéndole mimos por un buen rato hasta que me doy cuenta que, lentamente esta abriendo los ojos y, sin darme cuenta sonrío intensamente mientras la sigo acariciando
-Saúl- dice Altagracia confundida- ¿qué hago aquí?- dice tratando de moverse
-Shhh, no te muevas mi amor, quédate tranquila- digo mientras le acaricio el pelo- estaba por entrar a la constructora cuando vi que un desgraciado te disparó, no llegué a ver quién y en ese momento ni lo pensé, lo único que podía pensar era en ti, en salvarte, así que te traje al hospital... Ay mi amor, no sabes lo que estoy sintiendo, de tan solo pensar que podía perderte...- veo que Altagracia me hace una caricia- Gracias por siempre cuidarme, mi licenciadito- dice tratando de sonreír- y quédate tranquilo, nunca te dejaría solo, no vas a deshacerte tan fácil de mí- ambos nos reímos y nos quedamos un rato mirándonos a los ojos mientras yo la acaricio- Mi amor... ¿tú sabes quién te disparó?- a penas hago esa pregunta, entra la enfermera
-SEÑOR!!!! ¿QUÉ HACE USTED AQUÍ? le dije CLARAMENTE que no podía pasar- Altagracia y yo soltamos una "disimulada" risa- Ahhhh ¿y encima se ríe? RETÍRESE INMEDIATAMENTE - Lo siento señorita- digo tratando de no reír- es que entiéndame, necesitaba ver al amor de mi vida y asegurarme de que sí estaba bien- cuando digo eso veo que Altagracia sonríe inmensamente- Está bien, está bien, no diré nada pero RETÍRESE AHORA MISMO- dice la enfermera enojada- necesito revisar a la paciente- Está bien- digo, y sin decir nada más me voy, pero no sin antes darle un beso en la frente a mi doña y susurrarle en el oído que cuando se ponga bien le daré una sorpresa que nos tengo preparada hace tiempo, luego de eso me retiro , estaba tan felíz... por fin iba a poder descansar tranquilo

Mi destino// saugraciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora