- Ya sabes un kilo de mandarinas - Me repitió mi mama por tercera vez
Quejándome baje del carro para adentrarme al supermarcado, a decir verdad disfrutaba pasear por los pasillos de este pero hoy el tiempo era limitado tenia solo un objetivo mandarinas, tenia que cumplirlo si quería disfrutar de la tradicional agua de mandarina de mi mamá.
Observe la bolsa de mandarinas al final del pasillo si mi vista no falla era la ultima, camine sin prisa imaginándome el sabor del agua en mi boca.
La tome y observe el contenido, se veían bien
- ¿Es la ultima que queda? - me pregunto un chico con gorro negro quien parecía estar un poco agitado
- Si - hice una mueca triste
- ¿Me la puedes dar? - pregunto estirando su mano hacia mi, supongo que esperaba que cediera fácilmente
- ¿Por que lo haría? - di un paso atrás abrazando las mandarinas a mi cuerpo
- ¿Por que yo las quiero? - dijo obvio acercando mas sus manos hacia mi
- Así claro ten - dije dulcemente despegando un poco las mandarinas de mi, el chico estaba por arrebatármelas pero las aleje rápidamente -¿Enserio pensaste que te las iba a dar? ¿Quién te crees? - lo mire incrédulamente y me di la vuelta
- Enserio las quiero y no tengo tiempo para ir a buscar en otro lado - me tomo del brazo girándome hacia el
- Tenia la duda - dije sarcásticamente
- ¿Cuánto quieres? te doy el doble de lo cuestan - saco dinero de su cartera
- ¿Tienes un fetiche con las mandarinas o algo así? Es mejor que no te las de - dije con miedo dando un paso hacia tras aferrándome mas a las mandarinas
- ¡NO! Solo hace mucho que no como una - dijo un poco tímido cosa que me hizo gracia
- Igual que yo, que triste - le di una sonrisa y me dirigí a pagar
- Lo siento parece que no puedo venderle las mandarinas - dijo la chica quien acababa de hablar por teléfono
- Aquí esta la etiqueta y no están en mal estado no veo el porque no - dije extrañada enseñándole la bolsa de mandarinas
- Lo siento pero yo solo sigo ordenes - dijo
- ¿Y quien te dio la orden? ¿Por que no me pueden vender las mandarinas? Quiero hablar con el gerente ¿Qué el servicio al cliente no es lo primero? - bufe enojada
- Si claro, ya lo llamo -
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- ¿Cuál es el problema? - una mujer llego a la caja seguido de aquel chico de gorro negro quien me dio una sonrisa divertido
- ¿Cuál es el problema? ¿Todavía se digna a preguntar? Quiero comprar unas mandarinas y al parecer me lo están negando -
- ¿Sabe quien es el? - contesto calmadamente señalando al chico con gorra
- No - conteste extrañada ante su respuesta
- Es Suga de bts - palmeo la espalda del chico, con una sonrisa emocionada
- ¿!SUGA¡? - fingí saltar de la emoción provocando una sonrisa triunfadora en el chico
- ¿Si puedes creerlo? - pregunto emocionada la mujer
- ¿Me vas a quitar las mandarinas para dárselas a el? - pregunte tontamente
- Así es, comienzas a entender - me regalo una sonrisa
- No, yo las tome primero - dije
Las sonrisas de los presentes se borraron al ver mi rápido cambio de actitud, mi tono de voz paso de feliz a enojada sin previo aviso
- Eres una terca -
- Y tu un soberbio -
- ¿Qué les parece si mejor compran la mitad y la mitad? - pregunto un empleado que pasaba
- ¿Qué opinas Yoongi? Si no quieres esta bien, puedes llevarte todas - dijo la señora provocándome soltar una risa sarcástica
- Yo soy la que debe elegir, yo soy quien las tomo - levante un poco la voz
- ¿Las vas a compartir? - pregunto suga
- NO -
- por favor cóbrelas que tengo prisa - le dije amablemente a la cajera la cual veía a la señora esperando su aprobación
- Déselas, muchas gracias por intentarlo hablare muy bien del lugar - le dijo amablemente a la señora
- Siempre tan humilde - le pellizco una mejilla y se retiro
- Serian $20 -
- Si claro ten - le pase el dinero a cajera y me retire del lugar no sin antes mirar mal al chico el cual seguía en la caja
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- Entonces ¿No me quieres dar las mandarinas? - estoy segura que la aproxima vez que escuche la voz del chico rogando por mandarinas me volvería loca
- No, no no ¿No entiendes dos sencillas letras? Solo quería venir rápidamente a comprar unas mandarinas para que mi mamá haga agua de mandarina que es mi favorita pero termine discutiendo con un idol malcriado por una hora - ahora mas bien lo que salía de mi era un berrinche
- Lo siento - dijo evitando contacto visual
- No era mi intención usar mi fama para molestarte solo quería comer mandarinas, tuve un mal día y las mandarinas son mi fruta favorita, recorrí varias tiendas pero al parecer no tenia -
- Esta bien, solo no lo vuelvas hacer espero puedas encontrar tus mandarinas - le di una palmada en la espalda y me dirigí al carro de mi mamá
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Narra Yoongi
- Ni siquiera se compadeció de mi historia - susurre para mi mismo observando como aquella chica de cabello castaño huía con mis mandarinas.
