¨̮ 🏷 열 두번째

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— Yangie — entró Kun al cuarto de Yangyang.

— Kun, creí que llegabas mañana — habló Yangyang mientras abrazaba a su amigo.

— Porque no me dijiste lo que pasaba, si Jaehyun no me llama, yo ni me entero.

— Por favor gē, no me regañes otra vez, sí, ya tuve suficiente por el teléfono con tus regaños. — Yangyang lo miró haciéndole ojitos; cuando llegó a Seúl habló con Jaehyun y le contó todo el drama familiar que estaba viviendo y este le dijo inmediatamente a Kun.

— Bien, pero eso no te salva de una conversación, no entendí lo de Jeno, un agente encubierto. — Dijo con duda Kun.

Mientras Kun hablaba, el otro rodó los ojos. — Hoy dejemos el drama de mi familia y a Jeno, sí.

— Ok, te extrañé — Kun lo abrazó nuevamente.

— Estás muy cariñoso, mejor dime como te fue con tu familia.

— Bien, ya sabes con la abuela y esas cosas, aunque admito que los extrañaba.

Yangyang se quedó callado, su familia ahora era tan lejano, su padre lo obligó a viajar a Seúl, y lo peor es que ni siquiera pudo verlo otra vez, su padre no lo quería ver; aún no sabe qué pasó con sus hermanos, es como si los hubiera tragado la tierra; y su madre, su adorada madre, no sabía exactamente qué información había dejado en ese usb y sinceramente ya no quería pensar porque la cabeza en cualquier momento le iba a explotar. Los abogados de su padre son muy eficientes, porque cuando quisieron ponerle trabas para que viaje, ellos lo arreglaron rápidamente; y según le dijo Henry uno de los abogados de su padre, él iba a tener protección policial, aunque no sabía desde cuándo, no es una idea que le agrade mucho, eso sin contar que hay dos guardaespaldas vigilandolo, aunque admite que estos no lo atosigan; todo esto por culpa del loco de Jack, que en más de una ocasión lo quiso secuestrar y ahora al parecer quiere su cabeza o algo así.

— Yo lo siento — dijo Kun apenado por hablar de su familia; porque su amigo se había quedado callado y con la mirada en el suelo.

Yangyang lo miró y sonrió, una sonrisa que no llegó a sus ojos, como solía hacerlo — está bien; solo quiero olvidar todo esto; así que mejor cuéntame cómo estuvo eso de que vistes a tu ex.

— Ni me lo menciones, lo encontré de casualidad en una cafetería, se me acercó e intentó hablar conmigo.

— Que quería.

— Pedirme perdón y retomar la relación, al muy idiota lo engañó el tipo con que me engañó — Kun rió

— El karma hizo solo su trabajo nene.

— Si lo sé, sabes esa vez no hablamos; pero nos reunimos después; me dijo que lo sentía mucho que si fuera capaz de retroceder el tiempo él lo haría, para no volver a cometer los mismos errores.

— Idiota, dime que ya no sientes nada por él — dijo serio Yangyang.

— No, no lo hago; lo perdoné, es decir creo que ya lo había hecho antes, como sea él me engañó con su amigo, pero ahora ya no me importa en lo más mínimo.

— Sufriste mucho; básicamente te fuiste de China por él; aunque le debo agradecer — Kun lo miro entre confundido y molesto — no me lo tomes a mal; por él te conocí. — Terminó de explicar Yangyang.

— Sí, lo sé; aunque ahora no se si fue una buena decisión venir a Seúl, es decir estoy enamorado de un tipo completamente heterosexual, eso es malo — dijo agotado Kun mientras se tiraba de espaldas a la cama de su amigo.

— Si eso apesta; yo ya pasé por eso una vez — Kun lo miró serió. — Ok tal vez otra vez, no quiero hablar de esto. — Dijo Yangyang haciendo un puchero.

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