Prólogo

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Las personas somos esclavas de nuestra ignorancia. Siempre latente, incesante, nuestra ceguera no para, cada vez nos hacemos más torpes y crueles. Nunca sabremos cual es la verdad.

Por eso, les traigo mi manera tosca e ignorante de ver el mundo.

Los espejos son reflejos de nuestro mundo. Al mirarlos, reflejan una réplica exacta de lo que está al frente de ellos, pero al revés. Es decir, que como te ves todas las mañanas es un reflejo completamente opuesto de ti, ves tu imagen al revés. Nosotros jamás nos podremos ver en persona, sólo nos vemos por fotos o reflejos, esto significa que las personas nos ven de una manera distinta a como nos vemos nosotros. Jamás nos vamos a conocer en persona.

Pero, al final te das cuenta de que esa persona reflejada en el espejo eres tu. Tu te consideras esa persona. Ese reflejo, es la imagen que tienes de ti mismo. Entonces, si estamos en un mundo donde la persona que realmente somos es un reflejo... Eso significaría que nosotros somos el reflejo. ¿Que pasaría, si todos nosotros y nuestro mundo, sea sólo una ilusión y nosotros seamos el reflejo que vemos en el espejo?

Nuestro no mundo es una paradoja. Es nuestra mente la que las crea.

Y mi mente precisamente, es mi único castigo.

Reflecting StarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora