Curando Un Corazón

Capitulo 1

Japón feudal, 500 años en el pasado.

Estaban heridos, bastante cansados, pero aún así no se darían por vencidos, les había costado tanto trabajo llevar a Naraku al límite, no desaprovecarian esa oportunidad. La perla estaba completa, y además contaban con la ayuda de Sesshomaru y... De Kykyo.

El ataque simultáneo de Inuyasha, Kykyo, Sesshomaru y Aome, fue lo llevo a Naraku a la muerte, la perla los absorbió a los cuatro, sin embargo, nadie pidió el deseo.

Tres días después

Había ido a buscar unas hierbas medicinales que la anciana Kaede le había pedido, había decidido quedarse en esa época, pues estaba seguro de que Inuyasha la elegiría a ella, estaba cien porciento segura de que sus amigos eran como su familia, pero lo que escucho antes de entrar a la cabaña, le rompió el corazón.

Inuyasha: Entonces que proponen para quitarle la perla?
Kykyo: La matamos y ya!
Sango: Así no estaríamos escuchando sus lloriqueos!
Miroku: Pero recordemos que el Lord Sesshomaru la ha estado protegiendo!
Inuyasha: La llevamos hasta el barranco y ella simplemente caerá!

Dejo caer el canasto con las hierbas, y corrió, corrió como cuando estaba de algún demonio, llegó hasta el claro en dónde Sesshomaru la había estado entrenando tiempo atrás.
Al llegar vió que Sesshomaru y Shippo estaban ahí, pues ahora era el pequeño zorrito quien recibía un entrenamiento.

Shippo: Aomecita! (Alegre)
Aome: Planean matarme para quitarme la perla!

Lo dijo, sin filtro alguno, esto hizo que el youki de Sesshomaru se elevará y su rostro se viera aún más serio. La razón?
Sesshomaru había salvado a Aome en una ocasión, era la única humana a la que Rin no le tenía miedo y la veía como una hermana mayor. Con el tiempo, el mismo Lord del Oeste le había tomado cierto afectó, y también comenzó a considerarla su hermana, aunque su forma de admitirlo fue dándole un entrenamiento.

Sesshomaru: En dónde están? - pregunto con seriedad - Dime dónde están.
Aome: No los mates, sólo, dales esto, y si el deseo que pidan no es el correcto y la perla no se destruye.... Les quitas la perla!
Shippo: Te vas a ir Aomecita?
Aome: Lo siento Shippo! - dijo poniéndose a su altura - puedes... Cuidar de Shippo? (Mirándolo)
Sesshomaru: Hmp!

Sesshomaru y Shippo la acompañaron hasta el pozo, pues cabía la posibilidad de que la estubieran esperando.
Sus sospechas eran ciertas, pues ahí estaban, sin darle tiempo a nada, la alzó y la llevo hasta el pozo.

Sesshomaru: Nos vemos en 500 años!

Si, Sesshomaru sabía que Aome venía de 500 años en el futuro, y para él eso no era más que unos días, por eso le dijo eso antes de arrojarla al pozo, el grupo estaba en shock por eso, pero salieron de este cuando Sesshomaru les arrojó la perla y les dijo que más les valía pedir el deseo correcto o el mismo los mataría.

Época actual, Santuario de Athena, Grecia.

La guerra santa había pasado, después de suplicarle piedad a su padre, Zeus le otorgó el poder de revivir a sus caballeros caídos durante la guerra, porque aunque hayan revivido por Hades, seguían siendo caballeros, es por eso que ahora se encontraba en la sala del patriarca, con las 12 armaduras doradas frente a ella, cada una, con su sangre.

Athena: Mis caballeros... Ustedes han peleado incontables batallas, me han jurado su lealtad! - dijo mientras hacía arder su cosmos - vivan. - apunto con su báculo cada una de las armaduras - Mu y Shion de Aries, Aldebarán de Tauro, Saga y Kanon de Géminis, Death Mask de Cáncer, Aioria de Leo, Shaka de Virgo, Dokho de Libra, Milo de Escorpión, Aioros de Sagitario, Shura de Capricornio, Camus de Acuario, Afrodita de Piscis. Les ordenó que vivan! (Gritando)

Uno a uno, los caballeros fueron apareciendo frente a la diosa de la guerra estratégica, está los vió y les sonrió, sin embargo, notaron que Aioros parecía tener la misma edad que Aioria, pues el león a penas estaba alcanzando los 20 años.
Athena les dijo que había tratado de que tuviera la apariencia que tendría si no hubiera muerto, pero no lo consiguió del todo, aún así, el estaba agradecido.

Un año después

La cicatriz en su costado, eso era lo que le quedaba de recuerdo de la época antigua, junto al arco del monte Azuza.
Había pasado un año, un año en el que ella misma se había encargado de sellar el pozo, tiempo suficiente para que empezará a dejar de creer en el amor y distanciarse un poco de sus amigas.

Aome: Hace dos años que llegue a la época antigua. - dijo mientras soltaba un suspiro y se miraba frente al espejo - y hace un año que vencimos a Naraku. Hace un año que Inuyasha y los chicos...
Naomí: Aome! - grito desde la cocina llamando su atención - se te va a hacer tarde!
Aome: Ya voy mamá!

Acomodó el moño de su uniforme, se dió un último vistazo y bajo a desayunar.

Por otro lado

Shiryu, Seiya y Aioros caminaban por las calles de Japón.
Athena debía atender personalmente un asunto en la fundación, y Aioros, Mu y los de bronce la habían acompañado.
Iban tranquilamente caminando, cuando de pronto comenzó a llover, entraron a un establecimiento, pero algo logro captar la atención del centauro, pues era una chica que corría en plena lluvia, todo indicaba que estaba escapando de algo o alguien, y lo comprobó cuando vió a dos sujetos acelerar el paso para alcanzarla.

Aioros: En un momento vuelvo! (Corriendo)
Seiya: Aioros espera!
Shiryu: Que le pasará? - pregunto viendo cómo se iba - supongo que vió a alguien!
Seiya: Aquí solo nos conoce a nosotros.

Eri, Yuca y Ayumi, le habían insistido que fuera con ellas a tomar algo después de clases, se estaba lamentando por haber aceptado, pues la sorprendio la lluvia y además se dió cuenta de que dos sujetos la iban siguendo. Estaba a unas cuantas calles de su casa, si corría tal vez podría llegar ilesa, pero... Para su mala suerte, los dos sujetos la alcanzaron.
Las calles estaban oscuras y no había nadie debido a la lluvia, por eso nadie podía ayudarla.
Sintió el impacto contra una pared, y le pidieron de inmediato su bolso y su reloj, después de entregar lo que le habían pedido, uno de los sujetos acercó una navaja a su cuello, se imaginó lo peor, cuando de la nada apareció frente a ella un chico, no lo veía bien debido a la lluvia, pero ese extraño golpeó a los sujetos que la estaban asaltando, y en cuestión de nada, los dejo inconscientes. Recogió sus cosas y se acercó a ella.

???: Estás bien? - pregunto acercandose a ella - te lastimaron?
Aome: Estoy bien, gracias! (Asustada)
???: No te haré daño! - explico al escuchar su voz asustada - ví cuando te estaban siguendo, los perdí de vista pero logré encontralos. No podía dejar que te hicieran algo!
Aome: Te lo agradezco! (Aliviada)
???: Puedes irte sóla o necesitas compañía?
Aome: Llámame loca por confiar en alguien que acabo de conocer. - río nerviosamente mientras decía eso - pero... Me salvaste. Podrías... Acompañarme a mi casa?
???: Claro!

El sólo dar un paso le costó, pues debido al susto estaba paralizada, por lo que al tratar de caminar, cayó abruptamente al suelo. Aioros al ver esto, se acercó a ella y la alzó, mientras ella le indicaba por dónde debía ir, ella simplemente estaba aterrada por el asaltó, pero por alguna extraña razón, el hecho de que ese completo desconocido la acompañará, la hacía sentir segura.