CAPÍTULO 6: QUE LA FIESTA NO PARE

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Empezaba otra vez la semana, clases y más clases. Cris y yo nos levantamos sobre las siete y media; hicimos todos nuestros quehaceres y nos dirigimos a la universidad. Como de costumbre allí estaban Verónica y Adele. Después de comentar el fin de semana y lo cansadas que estábamos de algunos apuntes, cada una se dirigió a una clase. Yo tenía una optativa a primera hora que no tenía ninguna de mis amigas, así que me fui sola a clase. Cuando me senté y empecé a sacar los apuntes, mi móvil vibró.

Lunes 10:00

"Carol, qué ilusión me hizo tu mensaje; pensé que te habías olvidado de mí. He estado muy ocupado entre reuniones, cenas y fiestas. ¿Cómo estás? Espero volver pronto"

¿Fiestas? Ha estado de fiesta, seguro que conociendo a chicas y pasándolo genial y yo como una tonta preocupada por él. ¿Debería contestarle? Si – pensé.

Lunes 10:02

"Igual que te olvidaste tú de mí. Espero que tú también estés bien y hayas disfrutado mucho de las fiestas. Adiós"

Lunes 10:03

"¿Estás enfadada por algo? No son las fiestas que tú piensas. Y no me digas adiós".

Miré el reloj, eran las 10:04 y el profesor no había llegado aún. Volví a mirar el mensaje. ¿Enfadada? ¿Yo? Pues no. Pero pensaba picarlo, al igual que yo estaba picada.

Lunes 10:05

"No estoy enfadada. Estoy ocupada con los estudios. No he pensado en ningún tipo de fiesta. Supongo que será del tipo de la que tengo yo el viernes que viene."

Lunes 10:07

"¿Tienes una fiesta? ¿Qué clase de fiesta? Contesta"

En ese momento entró el profesor así que no volví a contestar.

Mientras tanto, en Londres estaba Peter, sentado en el sillón de su despacho mirando el móvil

-Mierda – dijo para sí mismo.

Desde el viernes no le había mandado ningún mensaje, Peter no quería agobiarme y ahora parecía que estaba molesta y Peter no sabía muy bien por qué. ¿Tenía una fiesta? – pensó él. Las fiestas universitarias, no eran fiestas como las que él tenía; las suyas eran más recatadas y por negocios. Pero las de la universidad, eran... bueno, todos sabemos cómo son.

-Joder – dijo en voz alta.

- ¿Qué pasa hijo? Tienes ya el informe, ¿no?

-Sí papá, toma.

Su padre cogió los papeles y salió del despacho. Sabía de lo que iba todo aquello. Su padre lo estaba reteniendo allí con todo el papeleo para que no pudiese volver; pero él estaba intentando hacerlo todo en la mayor brevedad posible. Necesitaba volver. Volvió a mirar el móvil y ya no obtuvo respuesta.

Lunes 10:33

"Carol contéstame ya"

Pero llegó la hora de comer y yo no respondí.

Las chicas y yo salimos de clase. Abrí el último mensaje de Peter y volví a cerrarlo; no pensaba contestarle. Nos fuimos a la cafetería y allí sacamos cada una su túper y comenzamos a comer. Mi móvil sonó; alguien me estaba llamando. Miré la pantalla y era Peter; me quedé mirando cómo sonaba.

-Ehm, creo que te está sonando el móvil. – dijo Adele irónicamente

-Ahora vengo chicas. – dije.

Salí hacia la entrada y descolgué la llamada.

- ¿Sí?

- ¿Cómo que sí?, menudo saludo, un hola hubiese estado mejor.

ENAMORARSE ESTÁ DE MODADonde viven las historias. Descúbrelo ahora