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Volumen 8 CAPÍTULO 9

Al regresar a su propio patio, el cielo ya estaba ligeramente iluminado.

Las pequeñas viviendas que rodean la casa central están conectadas una por una, y las tenues luces se ciernen por la ventana, como si todos estuvieran en vela toda la noche.

Tan pronto como Rong Tian y Feng Ming entraron al patio, Chiu Lan, Chiu Xing y Chiu Yue salieron de la casa principal, todos los miraron con expresiones pesadas y expectativas.

Feng Ming supuso que habían sabido de Lie Er que habían ido a encontrarse con Xiao Zong y sacudió la cabeza hacia ellos.

Los corazones de todos se hundieron hasta el fondo.

Si Xiao Zong se niega a prometer un matrimonio, no es fácil obtener el antídoto de la Dama Yao Ye.

Rong Tian entró en la casa principal, se enderezó y le pregunto a Chiu Yue, "¿Quién más sabe esto?"

Ciu Yue respondió con cuidado: "¿Cómo me atrevería a decirle a alguien casualmente? Solo además de las tres criadas lo saben Rong Hu y Lie Er no hablarán mucho".

Rong Tian dijo "um", inclinó la cabeza y pensó.

Chiu Lan empujó a Feng Ming a la habitación para cambiarse de ropa, accidentalmente, salieron algunas lágrimas.

Feng Ming la consoló: "No te preocupes, Rong Tian dijo que este veneno es fatal. Mientras no toque la piel de la pareja, no morirá de inmediato".

Chiu Lan se mordió el labio y comenzó a llorar.

Feng Ming no le gustaba ver las lágrimas de las sirvientas, y rápidamente levantó la mano para rendirse: "¡No llores, no llores! Si lloras, lo hare también"

Chiu Lan negó con la cabeza dos veces, luego se frotó los ojos y dijo: "Odio a Rong Hu, es inútil. El rey confía en él y le entrega al Duke Ming. ¿Y Cómo lo protege? Ya no me preocupare por él". "

Esta vez Rong Hu está en un gran problema ...

Feng Ming sonrió con amargura: "¿Qué tiene esto que ver con Rong Hu? Nadie esperaba que hubiera un problema con Mei Ji. Pero ella simplemente se preocupaba por el estado de su país y no pudo soportar ver a la tercera princesa en ese estado".

Chi Lan después de llorar, bajó la cabeza y ayudó a Feng Ming a cambiarse de ropa. Luego se arrodilló y comenzó a se arrodilló a medias y comenzó acomodar su ropa. "¿Duke Ming no va a salir a ver al Rey?"

La cara de Feng Ming se arrugó como una expresión amarga, "No pude evitar querer tocarlo cuando regresamos. Por desgracia, no creo que sea bueno. Ahora está afectado por este maldito veneno En cambio, no puedo evitar querer sentir su temperatura., no sabes lo difícil que es soportar ... "

Chiu Lan dijo sorprendido: "Duke Ming debe contenerse. Escuché que la técnica de venenos de esta dama es increíble. La sangre del amante ha matado a muchas parejas. Esto no es una broma".

"Lo sé ..." Feng Ming asintió.

"¿Y ahora qué?"

"¿Qué más puedo hacer? Además de tratar de encontrar una manera de obligar al Maestro Xiao a casarse con la Dama Yao Ye".

"¿Obligar?" Chiu Lan también escuchó el nombre de Xiao Zong, y sus ojos llorosos miraron a su alrededor. "¿Cómo lo hara?"

Feng Ming también sufría de este dolor de cabeza, se rascaba la cabeza y decía: "Ahora mi cerebro está desordenado. Necesito dormir un rato para pensar".

Chiu Lan también estuvo de acuerdo, "Fue una noche desordenada, y el cuerpo del Duke Ming está débil".

La cortina se abrió de repente y entraron dos caras idénticas.