You should work with me

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31 de Diciembre 2016

Quisiera que la música se detuviera al igual que el tiempo, que me muriera por un par de segundos y poder pensar. Estoy demasiada ebria, soy demasiado imbécil para despertar del entumecimiento que acoge mi cuerpo y evita que tenga el valor suficiente para salir de esta casa de mierda. Todos tenían a alguien con quién pasar este día, pero yo había gastado mi sueldo en bebida para olvidar que estoy sola. Creo que he estado aquí desde que nací y los recuerdos de sus bellos labios son lejanos. Si esto es una fiesta es la peor en la que he estado.

— ¡Hola, gatita! — "Gatita" solo una persona me había dicho de ese modo y no era este tipo que me ha estado molestando desde un par de noches, no sé su nombre. Viste una estúpida camisa de palmeras en pleno invierno y pantalones del color de sus cabellos marrón.

—Vete a la mierda. —Respondo evitando su mirada acusadora. Si no me vistiera como una dominatriz en cuero barato no sucedería nada de esto. Al diablo, yo no tengo culpa de esto.

Mi maquillaje de todos modos está arruinado y mi cabello es grasoso por el sudor del lugar, está tan corto que nadie lo nota. Tengo que ahorrar en todo lo que pueda, por ello no tengo el lujo del cabello largo y ondulado como antes. Una canción violenta suena en la pista y aumenta mi jaqueca. La estúpida hermandad, es solo un montón de chicas en una casa.

— ¿Qué sucede? ¿Un ratón te comió la lengua? —El tipo sigue con eso, deja su mano en mi hombro y eso me hace estar más asqueada.

Disparo vomito en su fea camisa, mi único alimento era varias botellas de whisky durante varios días.

—Eso fue asqueroso, pero supongo que me debes un favor, gatita.

Toma mis mejillas entre sus manos limpiando mi boca con una servilleta y trata de besarme. En este momento pienso que estoy jodida si dejo que algo así pase, me rehusó a estar tan jodida. Lo único que se me ocurre es apartarme y besar a la primera chica que veo. Ella tenía el cabello corto y rasurado en los lados, sus brazos fuertes y grandes. Ella me corresponde mientras uso todos mis trucos sucios para hacerlo intenso, latiendo sus mejillas y labios. Ella me abraza con delicadeza hasta terminar con un clásico chupón en su cuello, lo lamento si ella tiene novio o novia.

—Sí, lo lamento pero soy lesbiana desde que nací. ¡Ahora lárgate antes que vomité el resto en tu fea camisa!

Pateo la silla en la se sentó haciendo tambalear sus pies. Él no sé miraba satisfecho, me iba a meter en problemas de nuevo. Estaba de acuerdo, en ese instante me parecía sensato luchar con él en mi propia casa a horas antes de año nuevo. Pero no recibí ni un golpe de su parte, logre atinar un puñetazo en la cara pero después deseé no haberlo hecho pero jamás arrepentirme de aquello.

— ¡Basta, policía de New York; dejen de pelear! —Gritó la mujer que besé.

Yo leí en sus placas "Scorpia Maxwell"

Dos Años Después

— ¡Maldita sea! — Exclame mientras despertaba en la cama de aquella policía. — ¡Scorpia tengo clase en media hora!

Tuve que ponerme la ropa interior y pantalones a velocidad luz pero estaba aun mareada. Acordamos tener sexo cuando nuestros horarios coincidieran pero jamás pensamos en las consecuencias para el día siguiente. Scorpia seguía en la cama desnuda y somnolienta, últimamente está más agotada de lo normal, una cara larga con ojeras aparecían en su cara con mucha más frecuencia en estos días.

— ¡Levántate de la cama! — Tiré de las sabanas y también de su cuerpo. Ella no reacciono muy bien pues agarro un brazo mío para besarme desprevenida.

𝐊𝐢𝐬𝐬 𝐀𝐧𝐝 𝐌𝐚𝐤𝐞 𝐔𝐩 ~ 𝐂𝐚𝐭𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora