You shouldn't Lie

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En este juego de ajedrez, a veces se tiene que sacrificar a la reina para proteger al rey, algo no muy feminista de su parte. Pero teníamos dos reinas, yo y Adora. ¿Qué si sacrificábamos a ambas reinas? Puede que no esté muy segura esto a media que se trazaba el plan, pero con cada segundo se veía claro como el agua. De seguro ayudaba el hecho que nos encontrábamos contra la pared ya que a nuestras espaldas se encontraba el mar y en frente teníamos a francotiradores apuntándonos ante la orden de la morena de abrigo oliva. Los nervios nos carcomían y ni siquiera yo o Adora estábamos seguras de que viviríamos. Solo teníamos en frente a Mara y lo remanentes del pasando pisándonos los talones.

Pero no era el momento de huir, era el momento de matar dos pájaros de un tiro. Ambas levantamos las manos mientras la morena le sonreía.

— ¡Hey Adora! — La luz de los reflectores del muelle apuntaron a nosotras desde arriba mientras la nieve caía. Mara parecía complacida. — Sabes cuando ocurre una de estas reuniones es mejor traer matones, somos unas delicadas damas que necesitan protección ¿pero tú?... — Ella me miró — Bueno a no ser que ella sea una súper agente especial para poder contra diez de nosotros.

Punto su arma encontrar nuestra

—Bueno casi, soy abogada.

—Ja. Sí que tienes sentido del humor, Adora. Acabemos esto rápido quieres. Se me congela el trasero. Es Navidad y te voy a dejar negociar por tu vida. — Dijo altivamente mientras bajaba el arma y la miraba fijamente. — ¿Quieres hacerlo?

Adora sonrió mientras mis nervios estaban a punto de fallar, todo dependía de Adora ahora. Seguro puede hacer lo que sea, como lo que está a punto de hacer.

— Mara yo no soy una gánster, simplemente una mujer de negocios. No tengo que ensuciarse las manos en un mal negocios, hay una forma de hacer esto limpiamente. ¿Qué quieres?

—Todo...

— ¡Que avariciosa! — Dijo alzando una ceja. — ¿Y por ello te refieres a...?

—Qué te parece todo, empresas, propiedades, territorio, TODO.... — Dijo sin pestañar. — Light Weaver me dejo una pequeña pista, al parecer no te quería tanto ¿o sí, Adora? Ella de verdad que te odiaba.

— ¿El poder que le dejó a Catra? —Dijo estoicamente. Yo me quede fría al oír algo sobre eso, Adora jamás me dijo algo parecido a ello.

¿Hasta qué punto esa puede arruinar mi vida? ¿Qué era lo que me dejó? ¿Por qué? ¿Por qué Adora no dijo nada? Bueno de todos modos lo hubiera rechazado, por decir que me hubiera burlado de ella en su lecho de muerte. Pero permanecí sin emociones por ahora, solo necesitaba tiempo, tiempo para volver a desconfiar de Adora, pero no la quiero muerta.

—Mara querida, déjame decir que tal cosa en una pérdida de tiempo. Light Weaver no amaba a nadie, ni a ella misma por eso murió sin tratar su cáncer. Tampoco es que ambas hayamos luchado por alargar su vida. — Suspiro el aire frio, miles de pensamientos debían pasar por su mente, pero ella sonreía. Ella no estaba actuando, trato de matarse; Adora era una persona dispuesta a perder todo, no tenía nada a excepción de mí. Como un maldito lastre en su vida. Como siempre ha sido. — No existe tal cosa para Catra, una hija secreta que odiaba con toda su alma, que fue capaz de lastimarla, aterrorizarla y desterrarla; no... Catra no era más que un peón en su juego maquiavélico. Es navidad y te diré la verdad y tu decidirás si me matas o no. De todas formas yo gano.

—Abre tu puta boca, Adora. Hace frio. — Dijo Mara sin mucha paciencia.

—Qué pena es una historia larga, cagaras hielo. — Se burló mientras la tensión se hacía cada vez más grande. — He aquí la historia de vida, si me matas que estas sean mis últimas palabras. Weaver me adopto a mí y Catra, solo para que me manipulara con ella. Jamás me amo, solo me quería para que al morir hubiera alguien para seguir jodiendo a todos a su alrededor; incluyéndote. Decir que te también te manipulo como una muñeca es quedarse corto, eras más tonta que yo. Dejo la intriga de saber que era lo que le dj o a morir a Catra solo haría que tú y yo nos matemos. Voy a adivinar lo que Light Weaver te escribió, que Catra recibiría todos sus bienes en cuanto se presentara; pero a ella nunca de avisaron ello. Por lo que tenías dos opciones, yo no lo le diría sobre su herencia y tu podías hacerlo que manipularla a ella. O la matabas y me matas a mí por igual. Y ahora entiendo porque no la mataste, Scorpia Maxwell estaba con ella y no te podías acercar.

𝐊𝐢𝐬𝐬 𝐀𝐧𝐝 𝐌𝐚𝐤𝐞 𝐔𝐩 ~ 𝐂𝐚𝐭𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora