Skyler abrió los ojos, por fin había despertado de su larga siesta. Se levantó de la cama para estirarse y observó por la ventana que había en la habítación, se pudó percatar de que ya era de noche. Camino hacia el espejo y trató de acomodarse su cabello.
Tenía hambre, así que salió de la habitación y se dirigió a las escaleras para ir al comedor, todos ya estaban ahí.
— Oh, que bueno que ya despertaste linda, ya estoy sirviendo la cena —le dijo amablemente la Señora Weasley, quién le servía su plato a Ron— Toma el asiento vació que esta al lado de Harry.
No puede ser. Se quejo Skyler en su mente.
Skyler caminó hasta llegar al asiento vació, y se sentó. Frente a ella estaban Aisha y Charlie.
— Hola, Skyler —la saludó Potter con alegría.
— Hola —dijo seca.
— Aquí tienes querida —La señora Weasley le sirvió el cena.
— Gracias, Señora Weasley.
—Puedes decirme Molly, querida.
— Lo tendre en cuenta —le dijo Skyler sin mirarla.
Todos comenzaron a cenar, Como era costumbre los Weasley se adentraron en una charla muy alegre junto con el cuarteto de Oro, Skyler simplemente los ignoraba, aunque aveces ellos trataban de integrarla.
— ¿Así que eres de la casa de Slytherin? —le preguntó Bill a Skyler.
— Sí —respondió sin interes de entablar una charla con él.
— Nunca había convivido con alguien perteneciente a esa casa —sonrió Bill— Supongo que siempre hay una primera vez.
— Sí, lamentablemente la hay —Le dió una sonrisa falsa.
Skyler se sentía observada, y no hacía falta voltear a ver para saber quién era.
— Basta de mirarme, Potter —Dijo Skyler— Sé que soy hermosa pero deja de observarme.
Potter se sonrojó y todos los que estaban presentes en la mesa soltaron una pequeña risa, menos el cuarteto de oro y Ginny Weasley.
— Siempre tan encantadora —Se escuchó una voz masculina.
Todos voltearon a ver hacia la puerta de la cocina y vieron a un hombre delgado, con los cabellos oscuros largos y algo rizados.
— ¡Sirius! —Chilló Potter emocionado, rápidamente se levantó del asiento y corrió hacia él a abrazarlo— ¿¡Cómo estás!?
— Estoy muy bien, Harry. Veo que tu también, pareces feliz —le sonrió a su ahijado.
— Lo estoy, te extrañaba mucho.
— Y yo a ti —se separó de él.
Skyler lo observó, se veía algo diferente a cuando estaba en Azkaban, ahora se encontraba limpio y se veía presentable. Además de que ya no tenía ese aspecto de locura.
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PROFECIAS ⁵ | Saga Harry Potter
FanfictionLibro 5 de la Saga Oscuridad: TERMINADO. Nadie en el mundo mágico creía en el retorno de Él Señor tenebroso, creían firmemente que era un invento de Él niño que vivió. Skyler sabía perfectamente que su retorno era verdad, pues ella misma había ayuda...