Capítulo 4: Desconfianza

39 6 0
                                    

Bella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Bella

La garganta me ardía como si tuviera brasas en ella. Parecía que me había liado a comer las ascuas de la chimenea sin molestarme a beber agua para que bajara la papa de humo y leña. La ponzoña me subía por ella y se confinaba entre mi lengua, los dientes y el paladar.

Cerré los ojos para usar todo mi autocontrol. El olor tan delicioso bailaba por todo el comedor, haciendo posturas sexuales tentándome para que me lo acercara a mi boca y lo lamiera. Pero no podía y menos cuando esa sangre tan deliciosa estaba sobre mi hija.

Ella permanecía quieta en medio del salón. Toda la familia, excepto Carlisle, estaban presentes mirándola. Jake estaba detrás de Renesmee con una actitud casi de adoración, aunque su mirada se le intuía el miedo.

Observé a Edward y éste miraba fijamente a nuestra hija con el ceño fruncido. Estaba leyendo las mentes de todos los que estaban en la estancia. Me moría de ganas de preguntarle qué había pasado y porqué Renesmee estaba bañada en sangre humana.

—Nessie — volvió a insistir Jacob — porfavor mírame, no puedo aguantar tu ignorancia. Háblame por favor.

Ella ni siquiera se giró para mirarle. Sólo miró a su padre, con una mirada de advertencia. No quería que dijera nada. Eso me preocupó. Emmett se acercó a ella y le abrazó. Era una señal de compañerismo.

—No pasa nada, Nessie — dijo con un tono burlón — Todos hemos caído alguna vez.

Ella lo separó de un golpe y lo miró con dureza. Esme se acercó lentamente y le acarició la cabeza. El amor de ella por mi hija era muy intenso. Renesmee le sonrió, le gustaba sus gestos.

—Vamos a ducharte y te hago un chocolate caliente — le dijo con ternura.

Asintió y me miró. Sus ojos negros me recordaban a los míos, dado que tenía mucha sed. Me acerqué absorta por ese color azabache. Levanté mi mano y le limpié la mejilla con mis dedos. Escuchaba como sus latidos iban más rápido de lo normal. Cogí su mano y me la puse en mi mejilla para ver si usaba su don conmigo. Ella sólo me demostró su amor por mí y me repitió la escena de cómo le había limpiado la sangre de su cara. En mi mirada vio amor y comprensión por ella. Pero mientras pasaba el tiempo, las emociones cambiaban. Tenía miedo al rechazo, terror al desprecio y dolor por la desconfianza, por pensar que fuera capaz de cometer semejante atrocidad.

—Eres mi hija — dije atrayéndola a mí con amor. Abrazándola suavemente, dado que no quería lastimarla — te amo más de lo que puedo soportar.

Vi por el rabillo del ojo a Alice que se quedaba viendo a la nada. Estaba teniendo una de sus visiones. Rápidamente desapareció de escena. Escuché cómo se fue al ático. Allí estaba lo suficientemente lejos de Renesmee para que le viniera las visiones más claras. La presencia de mi hija dificultaba el don de mi hermana.

—¿Dónde está el cuerpo? — preguntó Rosalie.

Ella quería ocultarlo para no despertar sospechas. Noté como Jasper se movió hacia Jacob. Éste estaba todavía en estado de shock, parecía que había visto a un fantasma.

Luna Azul // FanFic de CrepúsculoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora