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(Este capítulo está narrado en tiempo pasado 2/2)

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apuesta !%

—¡Esto es ridículo! —exclamé irritado, mientras daba un pisotón exaltado al suelo de la cafetería—, ¿Por qué justamente tiene que ser él?

—Perdiste la apuesta, que tú mismo apostaste mi querido HyunJinnie. Y más te vale que la cumplas —apuntó con el dedo, y un tanto victorioso, Lee Minho, uno de mis mejores amigos.

Solté un suspiro y pase mis manos sobre mi rostro hasta llegar a mi cabello y entrelazar mis manos sobre estos, para luego estirar los mechones de pelos, y desordenarlos con frustración.

La idea no estaba mal, pero justo tiene que ser él.

—Los odios tanto —musité en un murmuro, mientras veía cómo MinHo y ChangBin se reían de lo dramático que estoy actuando por la apuesta, que estúpidamente acepté, y rodeé los ojos a un lado.

Ladeé un poco mi cabeza, mientras agarraba la lata de gaseosa que había tomado de la máquina expendedora de refrescos, y mi visión se enfocó en la mesa en donde se encontraban una melena bastante conocida y llamativa para mí, que sonreía alegremente a sus amigos.

No podía negar que se vía tan tierno y adorable cuando sonreía y dejaba que sus hermosos ojos se escondieran en forma línea recta, que dejaba ver aún pequeño zorrito del desierto.

Sabía que mi orgullo se podía ir al carajo, pero la idea de besas los labios de ese chiquillo era mi gran tentación.

Y mi gran perdición.

Un revuelto y un apretón fuerte en mi estómago se hizo presencia. Claro, ahí estaban las típicas mariposas que todos hablan cuando piensas o miras a la persona que te gusta y mueres por ella.

Tan cliché, pero sí.

Sabía exactamente en donde, yo, Hwang Hyunjin, el chico que consideran popular de toda la institución solo por ser unos de los jugadores novatos más importante del club de fútbol y ser alguien visual—o como muchos dijeron ante mi persona—hacia cualquier persona del lugar, cuando solo soy un simple chico que le gusta estar las veinticuatro siete encerrado con mi mascota viendo dramas todos los fin de semanas, y que su gran sueño es ser alguien en la vida a través del baile artístico o arte en dibujos, esta por acceder ha algo sumamente aterrador para mí.

Cumplir la apuesta más absurda y estúpida que escuché en mi vida.

Besar a Yang JeongIn, el chico más hermoso que he visto en mi vida y que tan solo su mirada tan intensa, junto a esa sonrisa que se le marcaban sus hoyuelos encantadores, me había flechado por completo el corazón.

12 kisses | hyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora