Félix fue asignado por adopción a una familia que no pudo tener hijos. Su madre terrenal rubia y su padre con la piel de nieve y ojos azul profundos encajaban perfecto con la apariencia del pequeño, los cuales le recibieron con mucha emoción y felicidad, pero todo eso le duro poco al recordar a Changbin y su corazón dolió.
- ¿Por qué él no había tenido la suerte de nacer en una familia así? -
Comenzó a asistir a la escuela a los pocos días, pero, aunque él tenía la idea de ser un niño completamente normal, sus cabellos rubios, ojos color mar y piel pálida llamaron mucho la atención entre la cantidad de chicos pelinegros que había en el instituto.
Pudo observar a Changbin durante el descanso. Estaba sucio y desfajado mientras corría detrás de una pelota con el sudor cayéndole sobre la frente y las mejillas pintadas de rosa por el calor.
-En estos momentos parece que nada te doliera. – Susurro para sus interiores. Estaba tan nervioso que no sabía ni por donde comenzar. – ¿Qué debo hacer para acercarme a Changbin? – se preguntaba mientras veía pasar de un lado a otro al pequeño pelinegro que a sus 12 años aún era poco más bajo que el rubio. - Hasta hace poco me sentía tan emocionado, pero ahora comienzo a creer que esto va a resultarme más difícil de lo que pensé. Ser guardián con tan solo 12 años es demasiada responsabilidad. Si tan solo pudiera tener un poco de ayuda. – susurro dejando escapar un pequeño suspiro.
Tan solo le basto un poco de tiempo notar unos ojos oscuros al fondo de las gradas que lo observaban. Ese chico le sonreía como si supiera lo que estaba pensando, como si lo conociera, como si le resultara tan amigable, familiar y le transmitía una vibra de cercanía. No pudo evitar abrir sus ojos tan grande en cuanto se dio cuenta de quien se trataba. -Es un ángel...-
Atravesó la cancha hasta donde él se encontraba sin dudarlo, camino a prisa sin despegar la mirada de los ojos del chico mayor hasta que lo noto próximo a su ubicación. Félix subió los escalones hacia el punto más alto de las gradas y se detuvo justo a su lado.
-Creo que entre seres perfectos nos entendemos, ¿no crees? – le sonrió ampliamente mientras giraba su vista hacia el menor rubio.
- Me llamo Chan, y también vengo de arriba. – dijo mientras señalaba con su dedo índice hacia el cielo.
Créditos al artista. La imagen fue sacada de Pinterest únicamente para representar escenas de la historia, sin intención de afectar o perjudicar el trabajo del autor.
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He's an Ángel
Fiksi Penggemar"Nacemos con un propósito. Una vez cumplido, volvemos al cielo" -Los ángeles y los mortales no deben enamorarse. - Lamento no poder quedarme a tu lado, lamento no poder decir de dónde vengo. Yo te enseñe a ser más noble, y tú me enseñas te a ser más...