4.

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¿Así que te parece atractivo ese tipo? Veamos que tanto.

Ella caminaba sola por la calle en la noche, ay mi Jisoo, ¿no sabrá que es peligroso? Estaba cerca de casa y sacó sus llaves, no te dejare entrar Jung.

La tome del brazo, la jale hasta la puerta de su casa y la estrelle contra ella.

—Hola, mi amor —dije sonriéndole.

—¿¡Taehyung que carajos te pasa!? ¿por qué me asustas así? ¿qué mierda quieres? —dijo con odio en sus ojos.

—Hey, esa no es manera de hablarle al amor de tu vida ¿no crees mi Jisoo? —le acaricie el pelo pero ella apartó mi mano, hice una mueca de disgusto.

—Por si aún no te has enterado, Kim, somos ex novios ¿entiendes? Ningún tipo de relación nos une, así que deja tu actitud psicópata a un lado. Déjame en paz —me empujó lejos de ella.

—¿Por qué ese carácter? Vamos mi vida, no he hecho nada malo, no me trates así —hice un puchero.

—¿No has hecho nada malo? —dijo irónica—. Vamos Taehyung, tienes 18 putos años, no eres tonto —me miró con disgusto—.  Date cuenta de tus actos, no estás bien.

—¡Estoy completamente bien! —grité—. ¿No lo ves? Yo... yo estoy bien, cariño—reí.

—Taehyung no... —la interrumpí, tomándola del cuello, ahorcándola.

—¡Qué estoy bien maldita sea! —la agarre más fuerte—. Eres tu la que esta enferma, no quieres aceptar nuestro destino juntos —apreté el agarre, estoy fuera de mi—. Eres una maltida idiota, ¿por qué no quieres estar conmigo? ¿hay otro tipo, no? —ella le pegaba a mis manos, intentando zafarse—, ¡Dime! ¿hay otro verdad? —negó débilmente—. ¡Mientes!

—Taehyung... por favor...—dijo con dificultad.

—Te estas acostando con un chico, disfrutas de su aroma, de su cuerpo... —me enoje más.

—Taehyung sueltame... te lo... explicaré... me es... estás ahorcado.

¿Qué? ¿qué yo que? Volví a mi ser, no es cierto. Solté a Jisoo asustado, le hice daño. Ella se agachó para poder recuperar el aire... Dios ¿Qué hice?

—No tengo... a otro —aún le faltaba el aire—. Me aleje de ti... por esto mismo, ¿te das cuenta? —se levantó dejándome ver mis manos marcadas en su hermoso cuello.

—Yo... no hice eso —aún no lo podía creer—, no, no, no, no fui yo mi amor, no sería capaz... —tenía una crisis nerviosa—. No, no...

—Aléjate de mi... Kim, por favor —sollozo.

—No... no me puedo alejar de ti, pero... yo hice eso... —ahora yo no podía respirar, me lo merecía.

—Kim, si en verdad me quieres, vete lejos y no me vuelvas a buscar, por favor —se fue alejando lentamente de mi, como si fuera una bestia—. Eres un monstruo —sollozo—, no te reconozco.

¿Un monstruo? ¿soy un monstruo?, agarre mi cabeza con mis manos intentando alejar esas palabras de mi... no soy un monstruo, no lo soy...

—No, no... mientes, yo no soy un monstruo... ¡tu lo eres! Solo te quiero junto a mi y te alejas, ¡diciendo que te parecen atractivos otros chicos mientras yo sufro por ti! —le respondí agitado.

—Estas enfermo... ¡estoy en todo mi maldito derecho de ser libre! ¡me puede gustar la persona que se me dé la puta gana!

—¡No! —vocifere—. No te puede gustar nadie, solo yo —me acerqué a ella, tomándola fuertemente de los brazos—. Somos el uno para el otro, sé que pronto te darás cuenta de lo mal que estas mi Jisoo —le sonreí.

—Taehyung me di cuenta de lo mal que estás tú hace mucho tiempo. No te quiero, no te quiero cerca de mi, ¡no te quiero en mi vida, entiende! —se movía desesperada en mis manos.

—Cariño date cuenta —detuve su desesperado intento por sacar mis manos de sus brazos—. Mereces un castigo por todo lo que me has hecho, te lo mereces mi amor. Pero mírame, no te he hecho nada, no soy un monstruo —sonreí.

Ella me miró como si fuera un sínico el que el hablará.

—Ya basta, Kim. Es suficiente, escucha las babosadas que dices. Vete lejos de aquí, no vuelvas a entrar a mi casa —me miró.

—Eso ya lo veremos, mi amor —la bese, cuanto necesitaba un beso de ella, sus labios casi siempre sabían a miel, esta no era la excepción, la bese con necesidad, más sin embargo ella no siguió el beso, me alejo fuertemente de ella.

Sus labios eran una adicción, no la dejaría ir tan fácil.

Sus labios eran una adicción, no la dejaría ir tan fácil

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Maniac! | KTHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora