7. Anhelo

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La isla comenzó una serie de medidas preventivas, arrestaron a todos los extranjeros que llegaron en navíos de Marley (tras la partida del barco a Liberio) , nadie entraría ni saldría para evitar la fuga de información. La nación tuvo que convertirse en un Estado militarizado, y se buscó fortalecer la imagen de la reina Historia, quién no era muy popular. Esta invirtió el dinero del Estado y la herencia de la familia Reiss para la infraestructura urbana y militar, además dispensó de impuestos por hasta 50 años a todos los nobles y comerciantes que invirtieran en la producción agraria, vías de transporte o comercio de materiales bélicos y de construcción para apoyar al Estado. Además se emitió una orden en la que toda la población que entrenara bajo la supervisión de la tropa de reclutas se les otorgaría tierra y casa. Se taparon las rupturas de los muros con el endurecimiento del titán fundador y también se reforzaron con piedra e instalaron trampas en sitios estratégicos. Los encargados de esta planificación fueron  Hange, Armin, Pixis con el apoyo de la Policía Militar.

Como era de esperarse la cooperación no fue fácil, pero el buen uso de la diplomacia y los medios lograron que en tres años avanzaran más que en el mandato anterior. 

Salieron al alba, los colores reflejados en el agua no mostraron más que el esplendor de la naturaleza, con su belleza única. Aquel viaje fue una misón que pocos funcionarios conocían, después de todo estaban dejando salir sus mejores cartas. Se basaron en la información otorgada por Yelena, había dicho que en Marley había grupos en favor a Paradis. Hange propuso hacer dos tareas; la primera descubrir dichos grupos de apoyo, Yelena y sus grupo se encargarían de eso, así como de estar dentro del ejército marlyense e informar sus planes. De manera secreta la legión buscarían otros aliados e información de los titanes cambiantes, para constatar lo dicho por Yelena. El escuadrón fue divido en parejas para trabajar varias zonas.

Mikasa-Jean (estarían en un país aliado en el Frente occidental), Sasha-Connie (en una colonia reciente) Eren-Armin (en un país aliado oriental) Hange y Levi (en Marley, buscarían a los restauradores y a Zeke) .  Antes de los dos meses se reunirían nuevamente.

Cómo estrategia Hange y Levi llevaron a Eren, para que les diera cierta garantía de que iban de acuerdo al plan. En las siguientes distrajieron el tema alegando a la propaganda de búsqueda del usurpador.
Armin y Eren vieron por segunda vez el rostro de quién eliminó a la legión, la incomodidad fue presente.    

-¿Qué opinas de Zeke?- iban en un navio hacia Medio Oriente.

-Algo no termina de convencerme. Por cierto se parece a tu padre-

-Cierto- mostró un gesto melancólico.

-Veamos el amanecer, en libros recientes encontré que dependo tu posición geográfica es diferente-

-No te aseguro llegar despierto-

-Para qué bebes de más, eso te causa sueño-

-Pará descansar aquí- señaló su cabeza -Aún no encuentro una solución-

- Dame un poco más de tiempo para encontrar una...  El retumbar o seguir con el juramento no pueden ser las únicas opciones- El rubio  tomó con sus manos el rosto del otro, lo miró con súplica.

- El tiempo no es algo que pueda cambiar.. lo sabes. Mi vida y la de Zeke se agotan.-

-Por ahora lo que podemos hacer es seguir como vamos. Prométeme que no actuarás antes.. dame seis meses-

-También le estamos dando tiempo al enemigo... pero si hay otra forma quiero saberla-  Se quedaron viendo, en silencio, podían sentir esa pezada carga, la muerte era una compañera  cercana.

El país al que fueron fue difícil, había muchas diferencias; la lengua, la vestimenta y su comportamiento social. Presentaron bastantes problemas aunque se habían preparado en el camino para tener una noción. Lo que más se les complicó fue la religión, notaron que está influía en todo. Dicha religión se llamaba Islam, su dios era Alá y su profeta Mahoma. Eren y Armin se sorprendieron de las cosas que se prohibían y se exigían. Como rezar cinco veces al día, y a diferencia del culto de las murallas ellos no podían expresar libremente su relación. Otra cosa que notaron fue el trato distintivo a las mujeres, quien en su mayoría salía solamente si un hombre de su familia o marido le acompañaba. Esto era lo que se llamaba diversidad cultural.

-¿Te gusta lo que ves Armin?-

-Es muy interesante, el mundo es maravilloso y hermoso-

-Me gustaría poder verlo como tú- acarició su rosto. Su cara se veía sonrojada por el alcohol y el calor.

-¿Cómo lo ves tú, Eren?- los ojos verdes mostraron una profunda decepción, no comentó nada, siguió bebiendo.
Lo único que pudo hacer Armin fue abrazarle, no le gustaba verlo ebrio casi todos los días, pero en ese estado lograba dormir sin tener pesadillas.

-Vamos, no pongas esa cara. Te haré sentir mejor- Eren levantó su rostro para verlo, lo besó con ternura y pasión. Su boca era caliente debido al alcohol, y en sus labios había un sabor agradable, a vino. Armin sólo quería fundirse en aquel calor, logró recostar a Eren, este lo vio con entusiasmo.

- Cómo quiero que me montes- le dijo mientras se desvestia apresuradamente. El rubio hizo lo mismo, toda inhibición entre ellos había desaparecido hace tiempo. Se sentó sobre él de manera inversa, deseaba sentir sus besos y caricias, de igual manera le gustaba darle el placer de su aliento a Eren.
No había parte en su cuerpo que no conociera el uno del otro, cada caricia, beso, mordida y lamida era exquisita.

Eren mantenía sus manos firmes en su cadera, para apoyarle a subir y bajar, cada vez más intenso.
La sincronización en ellos era como una danza, ambos seguían el ritmo, acompañados por la sinfonía del Eros.
Hasta que sus cuerpos se sintieron satisfechos pudieron parar, hasta quedarse sin aliento, el fuego cesará y el sueño los atrapará.

En aquel extraño lugar habían encontrado su propio paraíso, dándose el lujo de descuidar sus obligaciones.

-¿Y si no regresamos?- Eren susurró a su oído, mientras acariaba su espalda.

-¿Qué?...No puedo- Armin no lograba formular más, su cuerpo exigia descanso, le fue imposible abrir sus ojos.

Aquella conversación no fue aclarada, Armin pensó que eso fue parte de su sueño, o que Eren solo dijo eso porque estaba bajo influencia del alcohol y tal vez fue un error. Un día no encontró a Eren, por más que lo buscó y espero, este no regresó.







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