8. Conexión

109 14 1
                                    

Después de cuatro meses Eren dio a conocer su paradero por medio de cartas que envío. En estas explicó como sería el ataque a Marley, el objetivo era conseguir al titán martillo de guerra, y debilitar a la principal potencia militar.

El titán martillo de guerra fue bastante problemático, lograron vencerlo tras agotarlo entre Mikasa  y Eren, mientras la legión distrajo al ejército y a los demás titanes. Marley dio todo con su arsenal y sus titanes cambiantes:  el carguero, mandíbula, bestia y el acorazado.

La batalla fue en el gueto de los eldianos, en el centro de Marley, gente procedente de todas partes se reunió ahí para declarar la guerra a Paradis; nobles, políticos, militares, comerciantes, y civiles. Al final no quedó nada más que escombros, cuerpos y el pudrefacto olor a muerte. En el centro las personas fueron aplastadas por la lucha entre los titanes, atrapados entre escombros. Mientras tanto el puerto  fue destruido por el titán colosal, dejando un camino de sangre y fuego que consumió todo.

Cuando el ataque cesó, se reunieron, buscaron el dirigible que los llevaría de vuelta a la isla. Mikasa se llevó entre sus brazos a Eren, ya que este estaba completamente agotado. Con esfuerzo intento subir, vio una mano que se extendió en ayuda, al voltear  se reencontraron, los ojos de ambos se mantuvieron fijos, a la expectativa. No hubo palabras o sonrisa, simplemente se tomaron de la mano. Al subir Eren se encontró con más miradas  de sus compañeros, todos lo observaron en silencio, el capitán Levi estaba ahí, lo miró fijamente mientras Eren se sentaba, lo pateó tras decir "Esa mirada no esperaba verla en ti" Mikasa quiso detenerlo, Armin la detuvo. En seguida el rubio se fue con Sasha, Jean y Connie. Esta vez los ojos verdes lo vieron irse.

-¿Por qué no le escribiste?- Mikasa lo miraba con aflicción desde que se encontraron en el campo de batalla.

El castaño se quedó callado, como pudo se levantó y se fue hacia la cabina de piloto, se suponía que su medio hermano Zeke estaría ahí. Mikasa se quedó parada, decidiendo a donde ir. Sasha llegó a su lado, abrazándola.

-¿Esto habrá sido lo correcto?- La pelirroja mostró gran tristeza, algunos soldados celebraban la victoria, pero ellos no. 

-No lo sé, Sasha. Sólo quiero volver a casa.-Mikasa volteó a ver hacia los demás y buscaba a su amigo Armin.

Ya casi toda la legión estaba en aquel dirigible, los soldados comenzaron a sacar bebidas para seguir celebrando la victoria. Con ese ruido no lograron escuchar que alguien subió. Un disparo terminó con aquella celebración, dos niños soldados llegaron ahí con intención de vengarse. Todos los presentes se abalanzaron sobre esos niños y los golpearon hasta casi dejarlos inconscientes. Jean y Connie intervinieron para que no los mataran a golpes, los llevaron a donde estaban la comandante Hange y el capitán Levi.

Sasha y Mikasa se encontraban en el suelo, gracias a los reflejos de la pelinegra lograron evitar la bala, sin embargo está le dio a alguien más. La persona que estaba enfrente de ellas era una recluta más joven, Elisa.  Armin fue corriendo hacia ellas, preocupado y cuando se percató que fue otra chica herida intentó darle los primeros auxilios, fue inútil, ella murió unos minutos después. Hubo un descontrol con los soldados, exigían que se mataran a los niños, Floch empezó con esta idea y los demás lo siguieron. Armin, Mikasa y Jean les hicieron frente. Pero se detuvieron hasta que el capitán Levi salió a ponerlos en orden, los amenazó con mandarlos a corte marcial por insubordinación.

- Pude haber sido yo...esa niña apuntó hacia mi...- Sasha estaba muy impactada, no soltaba a Mikasa.

- Cualquiera de nosotros pudo haber sido. - Mikasa trataba de consolarla.

- No... yo había visto a esa niña. No pude dispararle cuando estábamos en el campo de batalla.- Lagrimas brotaron de su rostro. Jean, Connie y Armin dieron un abrazo conjunto, lamentaban la muerte de aquella compañera, pero en el fondo agradecían que no hubiese sido ninguno de ellos. En ese abrazo a todos les brotaron lágrimas, después de cinco años su compañera más leal era la muerte, en cada misión a la que asistieron esta les dañó, pero también les perdonó. 

- Armin, ¿vas a hablar con Eren?- Jean se mostró incómodo de decirlo. Todos los demás voltearon a ver a Jean con un expresión de reprobación.

- Si, lo haré. Pero no en este momento, quiero pensar que voy a decirle.-

- Lo siento, no quiero presionarte amigo, es que vi que le ayudaste a subir... Creo que nadie sabe que decirle a ese idiota y no se si puedo confiar en él.- La expresión fue la misma en Sasha y Connie, Mikasa abrió sus ojos y Armin se quedó en silencio. Se quedaron así hasta que Levi se les unió, los llevó a parte, como era de esperarse debían enfrentar a Eren. Sin embargo cuando llegaron a la habitación a donde los guío el capitán no había nadie.

- Quería hablar con ustedes primero. No confío en ese mono barbudo, quiero que me digan que opinan de su plan.- como siempre Levi era perceptivo y sincero. 

 - Yo simplemente no confío en ninguno. Antes estaba seguro de Eren, pero ahora no sabemos cuál es su objetivo.- Jean lo soltó y no pudo aguantar ver a Mikasa, ella lo veía con tristeza.

- Concuerdo con Jean, lo siento Mikasa pero ni siquiera nos dio un saludo, y menos una explicación, él nos dijo que éramos importantes y que nos apreciaba. Pero se ve indiferente, incluso con ustedes que han estado con él siempre.- Connie lo soltó.

- Yo tampoco confió en ellos...en Zeke, Yelena o Eren.- Sasha respiró profundamente, a ella también le costaba creer sus propias palabras.

- Yo creo que debemos hablar con Eren para saber que planea, ¿Qué opinas Armin?- Mikasa le tocó del hombro, notó que este estaba pensativo.

 - Todos tienen razón, no podemos confiar, las opciones que nos dan son las mismas. El retumbar y seguir pasando el titán fundador, no es una solución real.- Armin sintió pesar en su pecho, quiso sonar lo más razonable posible, pero en su interior había confusión, a su mente llegaron recuerdos innecesarios, momentos y palabras que compartió con Eren. Se arrepintió de haberle dado la mano para subir, pero esta acción no la pensó, actuó y cuando se dio cuenta de ello se alejó.






Sueños de libertadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora