•Alquilado• minsung

◇•33•◇

El cuerpo de Jisung rebotaba ante las embestidas de Minho. Estaban en uno de los carros en el garaje, el asiento del copiloto estaba recostado y el peliazul tenía las piernas en los hombros del pelinegro, quien lo besaba con pasión sin frenar los embistes.

-Min... Minho....aaahh tene...tenemos que aaahh salir ra.. rápido- Trataba de hablar el omega después de separarse del beso- Se ugh se van a dar aaahh Lee!!.. Se van a dar cuenta que no estamos.

-No me importa- Dijo con voz ronca en la oreja del peliazul, para después morder el lóbulo de la oreja- Mierda... -El omega había apretado su interior, apretando con sus cálidas paredes el gran pedazo de carne que lo perforaba. Minho arremetió con más fuerza contra la deliciosa entrada. Jisung llevó las manos a la boca para no dejar salir un potente grito. Solo fue cuestión de unas cuantas embestidas más y los dos llegaron al clímax, la esencia de Jisung quedó atrapada en el preservativo que tenía puesto, evitando que se ensuciara el traje que tenía puesto. Minho anudó en el interior del peliazul vaciándose en el interior de él.

-Le... Lee... condón- Dijo jadeando el peliazul.

-Ahh ahí lo tienes puesto- Respondió ya recostado en el pecho del peliazul, señalando la goma que cubría el miembro del menor.

-No... el.. tuyo- Dijo.

-...

-Lee?- Preguntó mirando a su pareja.

-Pedías que lo hiciera rápido así que.... - Jisung abrió los ojos como plato y dejo caer su cabeza al respaldo del asiento. Los anticonceptivos comunes no funcionaban en el cuerpo de Jisung así que...

-Rata- Dijo. El pelinegro se apoyó en sus manos irguiéndose sobre el peliazul y empujó el nudo más adentro de este, sacándole un fuerte gemido.

-¿A quién le dices rata? MO-CO-SO- Dijo con una sonrisa ladina. Volvió a recostarse y acarició el vientre del peliazul y este ya resignado acaricio los cabellos negros del alfa. No le molestaba tener más cachorros, en verdad le parecía maravilloso. Después del tratamiento que el doctor le realizó junto con Lia, fue posible que pudiera quedar de nuevo en cinta. Le gustaban los niños y siempre quiso una familia grande, ya tenían tres niños. El nudo terminó y se acomodaron las ropas. Jisung se tambaleó al salir del auto, pero gracias a Minho no tocó el piso.

-¿Por qué te hice caso en esto?- Se preguntó el peliazul mientras se sobaba la cadera.

-Por que también querías mocoso, así que ahora no te quejes- Lo tomó de la cintura y lo ayudó todo el camino hasta que salieron a la parte de atrás de la mansión donde estaban todos los invitados y se podía ver a la hermosa pareja bailando. Ryujin y Yeji estaban celebrando su matrimonio, ya estaban legalmente casadas desde que se habían escapado, pero después de un tiempo la castaña quiso celebrar la boda como Yeji se lo merecía.

 -Jisung- Llamo Seungmin que se acercaba con su abultado vientre y llevando un carrito de bebé- ¿Dónde te habías metido?- Preguntó.

-Bueno...- Jisung giró a ver a su pareja, pero este solo miró a otro lado. El rubio miró a los dos y captó el mensaje.

-No importa- rio leve- Te entiendo.

-¿Jiu no se ha despertado?- Pregunto el peliazul mirando a su bebé en el carrito. Era una pequeña de cabello peliazul como los de él, que dormía plácidamente en su coche.

-No, ha estado dormida tranquilamente.

-¿Hyunjin, dónde está?- Pregunto Minho.

-Está vigilando a Changbin y Felix- El pequeño Changbin era un alfa hermoso de cabellos rubios y ojos marrones, era más alto que los niños de su edad... y mantenía cuidando a Felix, el pequeño omega pelinegro, era una copia exacta de su alfa padre... hasta en la forma de ser. Esos dos se mantenían siempre juntos, el alfa cuidaba mucho al pelinegro, aunque este no era nada débil.

-¿Y Yeonjun?- Era el hijo alfa que se parecía a Jisung.

-Jejejeje, no se despega del pequeño Soobin- Ese era el nombre del pequeño hijo de Ryujin y Yeji, el cual era un omega. Era un pequeño castaño de ojos azules. Jisung hizo una "o" con su boca- Bueno voy a ir a ver como le va a Hyunjin- Dijo dejando el coche con Jisung y alejándose hacia su esposo que estaba de pie vigilando a los pequeños que estaban cerca a un pequeño árbol donde su pequeño alfa cargaba a el pequeño omega pelinegro para que pudiera alcanzar una fruta.

-Vamos- Tomó a su esposo de la cintura y lo guio con el coche de la bebé hasta unos asientos, donde podían ver a su hijo peliazul que no se separaba del coche de un bebé y miraba con mala cara a quien se acercaba mucho.

-Se parece a mí, pero sacó parte de tu ternura- Dijo.

-Mhm- Murmuró, sonriendo de medio lado. Minho miró de reojo a su pareja que no dejaba de ver a su pequeña, estiró una mano tomando el mentón del peliazul girándolo para plantarle un suave beso en los labios, cargado de amor y ternura- Gracias- El peliazul sonrió como solo él podía hacerlo, iluminando todo a su alrededor.

 🧡💙

FIN

Fue muy bonito poder haber adaptado esta historia, todo esto fue gracias a @LeidyZuigaHerrera2 ella es la que merece todos los créditos de tan bonita historia.